Erupción del volcán islandés: ¿provocará crisis de vuelos, cuánto duraría?
Mientras se abre una fisura de 3.5 kilómetros en la corteza terrestre que expulsa chorros de lava, analizamos las implicaciones locales e internacionales con respecto al volcán islandés.
Mientras se abre una fisura de 3.5 kilómetros en la corteza terrestre que expulsa chorros de lava, analizamos las implicaciones locales e internacionales con respecto al volcán islandés.
A las 22:17 hora local del lunes comenzó una erupción volcánica al norte de Grindavík, en la península islandesa de Reykjanes. Se produjo tras semanas de intensa actividad sísmica del volcán islandés y ha sido descrita como “una de las más espectaculares jamás vistas”. ¿Cuál ha sido la causa y qué ocurrirá a continuación?
¿Qué ocurrió con el volcán islandés y por qué?
Se abrió una grieta de 4 km en la superficie terrestre de Islandia que está expulsando chorros de lava color naranja brillante rodeados de nubes de humo rojo.
En una actualización nocturna, la Oficina Meteorológica de Islandia dijo que la fisura eruptiva tenía unos 4 km de largo y la distancia desde el extremo sur hasta el borde de Grindavík era de casi 3 km.
En un momento dado, salieron entre 100 y 200 metros cúbicos de lava por segundo del volcán islandés.
La erupción se esperaba desde hacía tiempo. A finales de octubre y noviembre, la península de Reykjanes sufrió un enjambre sísmico, con cientos de terremotos diarios durante un tiempo. Aparecieron surcos en el terreno a medida que el magma ascendía hacia la corteza terrestre.
Situada en el Atlántico Norte, Islandia se extiende a lo largo de la dorsal atlántica que separa las placas tectónicas euroasiática y norteamericana. Estas enormes placas de roca se separan a un ritmo de un par de centímetros al año, lo que provoca actividad sísmica y volcánica.
¿Corre peligro la población cercana al volcán islandés?
Durante semanas, los habitantes de Grindavík, un pueblo pesquero de 4 mil habitantes situado a unos 40 km al suroeste de la capital islandesa, temieron que sus casas se vieran afectadas por una erupción. Sus temores parecieron disiparse el martes, cuando se supo que la ciudad, evacuada en noviembre, no iba a ser alcanzada por la corriente de lava.
El gobierno islandés declaró el martes que la erupción no representaba una amenaza para la vida. El ministro de Infraestructuras del país, Sigurður Ingi Jóhannsson, declaró a la emisora RÚV que “parece que hemos tenido bastante suerte con la ubicación y el desarrollo (de la erupción), y esperamos que siga siendo así”.
Los habitantes de Grindavík parecen haber escapado de milagro. La policía sugirió el lunes que cabía la posibilidad de que se les permitiera volver a casa sin restricciones para Navidad.
Para los visitantes de Islandia, la seguridad debe ser primordial, dijo Matthew Watson, profesor de volcanes y clima de la Universidad de Bristol. Añadió que, aunque habría una “fuerte atracción” para ver la erupción, la gente debe tener cuidado.
“Este tipo de erupción es una de las más espectaculares jamás vistas y habrá una fuerte atracción turística, aunque el complejo termal Blue Lagoon haya vuelto a cerrar. Los turistas deben seguir estrictamente las advertencias oficiales, ya que hay peligros importantes, como nuevas erupciones, que pueden poner rápidamente a la gente en peligro”, dijo.
Las lenguas de lava seguían estando a pocos kilómetros de lugares turísticos como el Blue Lagoon “y sigue preocupando que la lava alcance estos lugares clave”, añadió Sam Mitchell, investigador asociado en vulcanología, también de la Universidad de Bristol.
¿Va a desencadenar esto otra crisis mundial de vuelos?
En 2010, una nube de ceniza creada por la erupción del volcán Eyjafjallajökull provocó cancelaciones de vuelos y caos en los viajes por todo el mundo.
Los expertos no creen que la última erupción volcánica tenga el mismo impacto porque es poco probable que produzca tanta ceniza. “En estos momentos no existe ninguna amenaza para el espacio aéreo a causa de esta erupción, especialmente para los vuelos más allá de Islandia”, declaró Mitchell.
“Cualquier cambio en el tráfico aéreo podría limitarse a Keflavík (el principal aeropuerto del país) si se producen cambios en la dirección del viento o en la salida de gases y ceniza fina del volcán islandés”.
“Esta es una erupción muy diferente a la de Eyjafjallajökull … donde una gran erupción explosiva bajo un glaciar produjo una nube muy grande y ceniza muy fina en la atmósfera cuando la dirección del viento apuntaba hacia Europa continental”.
El gobierno islandés dijo: “No hay interrupciones en los vuelos hacia y desde Islandia y los corredores de vuelos internacionales permanecen abiertos”.
¿Cuánto puede durar esto?
No lo sabemos. “Es muy difícil decir cuánto durarán estas erupciones; podrían ser días, podrían ser meses”, dijo Mitchell.
“Las erupciones más grandes e intensas tienden a durar menos tiempo, pero si el caudal se reduce podría prolongarse durante algún tiempo”, añadió.
Las autoridades se mantienen a la expectativa. El presidente de Islandia, Guðni T. Jóhannesson, dijo: “Ahora esperamos a ver qué nos deparan las fuerzas de la naturaleza”.
“Estamos preparados”, dijo, “y permanecemos vigilantes ante la actividad del volcán”.
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