Sean ‘Diddy’ Combs es mencionado en una demanda que acusa a su hijo de agresión sexual
Sean "Diddy" Combs en el MGM Grand Garden Arena el 15 de mayo de 2022 en Las Vegas, Nevada. Foto: Frazer Harrison/Getty Images

El magnate de la música Sean “Diddy” Combs y su hijo de 26 años, Christian “King” Combs, son mencionados en una demanda que acusa al joven de agresión sexual a bordo de un yate en diciembre de 2022.

La demanda, presentada en el tribunal superior de Los Ángeles el jueves y reportada por primera vez por Rolling Stone, acusa al joven Combs de agresión, agresión física, agresión sexual e infligir intencionalmente angustia emocional. El padre de Combs, que enfrenta varias demandas por abuso sexual y recientemente fue objeto de redadas federales en una investigación de tráfico sexual, es acusado de complicidad.

La denuncia de 31 páginas en nombre de Grace O’Marcaigh, de 25 años, describe los eventos a bordo del yate alquilado por Sean Combs para un viaje familiar a St Martin en diciembre de 2022. El viaje fue “vendido como una excursión familiar saludable”, pero, según la demanda, se convirtió en un “entorno hedonista”, en el que se incorporaron presuntas trabajadoras sexuales y otras celebridades.

O’Marcaigh, quien trabajaba como bartender a bordo del yate, alega que en las primeras horas del 28 de diciembre, Christian Combs la presionó para que bebiera un trago de tequila que “rápidamente sospechó” había sido adulterado con drogas. Combs supuestamente le impidió salir y la obligó a practicarle sexo oral.

La demanda también afirma que un video del joven Combs tocando y besando a O’Marcaigh fue filmado por Rodney “Lil Rod” Jones, un productor musical que presentó una demanda contra el mayor de los Combs en enero alegando agresión sexual y forzarlo a contratar trabajadoras sexuales. La denuncia también incluye fotos de hematomas en el antebrazo de O’Marcaigh donde Christian Combs supuestamente la agarró.

O’Marcaigh afirma que escapó de Christian Combs cuando un compañero empleado del yate la buscó intencionalmente porque había estado ausente durante mucho tiempo. Según la demanda, ella informó al capitán del barco sobre lo sucedido, pero el incidente no fue investigado. O’Marcaigh cree que esto se debe a que Sean Combs pagó al capitán para mantener todo en secreto.

Desde el presunto incidente, O’Marcaigh ha sufrido de ansiedad, ataques de pánico y graves ideas suicidas, según la denuncia.

Aaron Dyer, abogado de ambos hombres, desestimó la demanda en un comunicado como “otra acusación lasciva y sin fundamento de Tyrone Blackburn”, el abogado que representa a O’Marcaigh y a Jones. “Esta denuncia está llena del mismo tipo de mentiras fabricadas y hechos irrelevantes que hemos llegado a esperar de Blackburn”, continuó la declaración, señalando que un juez federal en Nueva York criticó a Blackburn por “presentar casos de manera inapropiada en la corte federal para obtener atención mediática, avergonzar a los demandados con acusaciones sensacionalistas y presionarlos para que lleguen a un acuerdo rápidamente”. Dyer dijo que presentaría una moción para desestimar la demanda de O’Marcaigh.

La demanda es la última de una serie de problemas legales para el influyente magnate de la música, quien el año pasado actuó con Christian en los MTV Video Music Awards y recibió un premio de ícono mundial como parte de un regreso musical de larga duración. En noviembre del año pasado, Sean Combs resolvió una demanda con su expareja Cassie, un día después de que la explosiva denuncia detallara años de presuntas violaciones, abuso físico y tráfico sexual por parte del rapero. Una demanda separada acusó a Combs y a otros dos hombres de violación en grupo en 2003, cuando el demandante anónimo tenía 17 años.

Y a finales de marzo, agentes federales de seguridad nacional y otros funcionarios encargados de hacer cumplir la ley allanaron las propiedades de Combs en Los Ángeles, Miami y Nueva York como parte de una investigación sobre tráfico sexual realizada por autoridades federales en Nueva York. Christian y su hermano mayor Justin fueron detenidos durante la redada en Los Ángeles, pero luego liberados.

Sean Combs ha negado todas las acusaciones y prometió “luchar por mi nombre, mi familia y por la verdad” en un comunicado publicado en X. Sus abogados han presentado una moción para desestimar la demanda que lo acusa de violación en grupo, diciendo que “nunca participó, presenció o tuvo o tiene actualmente conocimiento de ninguna mala conducta, sexual o de otro tipo, relacionada con el demandante en ninguna circunstancia”. Tras las acusaciones, Combs renunció como presidente de Revolt, la empresa de medios digitales que co-lanzó en 2013, y su reality show de Hulu fue cancelado.

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