Artista que protestó en el Museo Picasso pierde su obra y es víctima de acoso

Silenciosas, sin molestar a ningún visitante del Museo Picasso de Barcelona, María Llopis y sus estudiantes de la clase de arte y feminismo portaron playeras blancas con leyendas como “Picasso, abusador de mujeres”. Se hicieron escuchar más que otras voces y gritos, resonando en el mundo a través de las redes sociales, donde incluso fue mayor el revuelo que en las mismas salas de la pinacoteca española.

Fue un ejercicio colectivo que buscaba visibilizar la obra y persona de la artista plástica Dora Maar, así como recordar que el pintor y escultor español Pablo Picasso tuvo comportamientos cuestionables hacia las mujeres. En el museo, el personal de seguridad solo estaba pendiente por si ocurría algo más, pero no pasó de allí. Cosa contraria a lo que se desencadenó en las plataformas digitales, donde el acoso que recibió Llopis provocó la cancelación de su cuenta de Instagram.

En entrevista para La-Lista, la activista feminista y representante del movimiento postporno sostiene que con la cancelación de la cuenta perdió su obra, pues ahí tenía una serie de publicaciones inéditas y, además, escribía un cuento por capítulos. Aunque personal de la red social le ha dicho que deben revisarse las denuncias que ha recibido por parte de sus haters, sostiene que ante la incertidumbre y la angustia está sufriendo una invisibilización en los espacios que podrían llegar a ser considerados como las galerías contemporáneas.

“En realidad es como si a mí me hubieran cerrado el taller y quemado las obras”, afirma la artista que no solo recibió agresiones en Instagram, sino también mensajes de odio a través de su cuenta de correo electrónico.

“Lo que me estoy encontrando, como me están escribiendo directamente, es que este es un problema para las mujeres, como que si no publicas fotos de gatitos o paellas, cualquier tipo de reivindicación feminista recibe muchos ataques. Las mujeres tenemos distintas tácticas, como bloquear enseguida a los haters o incluso la cuenta durante unos días para calmar los ánimos. Es algo que sucede sistemáticamente, yo no soy una excepción sino la norma”.

Te sugerimos: El feminismo se resume en derechos humanos: Ana Luisa Amaral

Dora Maar y Camille Claudel: Mujeres artistas, frenadas por sus parejas

María Llopis recuerda que con esta actividad colectiva que llevaron a cabo el pasado 27 de mayo no desvelaron ningún secreto en torno a Pablo Picasso. Distintas biografías, incluso la de su nieta Marina Picasso, han señalado que el artista presuntamente maltrataba a las mujeres. Incluso se ha detallado que a Dora Maar le pidió que dejara de tomar fotografías a sus 30 años, cortando así su carrera profesional.

Maar no ha sido la única creadora opacada por su pareja e invisibilizada en el mundo del arte. Un módulo de las clases de Llopis se dedica exclusivamente a este fenómeno, que también afectó a la escultora francesa Camille Claudel, pareja de Auguste Rodin.

“Su estilo revolucionó la escultura, pero conoció a Rodin y ya después se puso a hacer las manos y pies en las piezas del artista. Luego la internaron en un psiquiátrico, donde pasó 30 años hasta su muerte”, recuerda la profesora.

Otra de las figuras mundiales que supuestamente padeció este tipo de agresión fue Alma Mahler, quien mantuvo una relación con Gustav Mahler. La compositora y editora musical era desde pequeña una prodigio; no obstante al casarse tuvo que firmar una carta en la que se le prohibió seguir creando y únicamente podía componer para su esposo.

Te recomendamos: ‘Sin libros, no lo lograríamos’: Valeria Luiselli sobre el poder de la ficción

“Esto es algo que sigue ocurriendo de una forma u otra bajo la frase ‘Ya no puedes trabajar fuera de casa y tu vida ahora soy yo’”, destaca Llopis, quien considera que en la actualidad han cambiado los discursos pero las acciones hacia las creadoras está vigentes. “Seguimos viviendo en una sociedad machista, las formas son otras”.

La artista y activista feminista considera necesario visibilizar a las mujeres que históricamente han sido denigradas y, en el caso de Dora Maar, señala que hacerlo es una responsabilidad moral e histórica del Museo Picasso y que lo debe plantear de forma honesta para contribuir a un cambio.

Te recomendamos: Laurence des Cars será la primera presidenta del Museo del Louvre

“El Museo Picasso, un lugar que tiene un espacio precioso y único en el centro de Barcelona con una sala de exposiciones temporales, le debería dedicar un lugar a estas mujeres; queremos la reinvidicación”.

En lo que respecta al acoso que ha recibido en redes sociales a partir del performance que llevó a cabo, considera que debería haber una mayor protección y leyes que defiendan a las víctimas en estas situaciones. Cree que el problema es a nivel general como sociedad, pues es necesario conocer de dónde viene tanto dolor y necesidad de sacar rabia contenida. “Si lo piensas, detrás de esto solo hay dolor, personas que se ponen a atacar a otras, que ni siquiera conocen, y se hace de forma gratuita porque es odiar por odiar”.