¿Cómo fue el romance entre Frida Kahlo y León Trotsky?
La relación entre la mexicana y el ruso tuvo un abrupto final. Foto: Especial

León Trotsky, un líder revolucionario de 58 años, y Frida Kahlo, una de las artistas más icónicas de México de 29 años, tuvieron un romance fugaz y con final abrupto. Sólo en México podía pasar algo así.

Ambos se conocieron en 1937. Kahlo y su esposo Diego Rivera eran miembros intermitentes del Partido Comunista Mexicano y con ideología marxista marcada en sus obras. Su camino político los llevó a definirse como trotskistas tras seguir de cerca la Revolución Rusa.

En Rusia la situación dio un cambio inesperado cuando en 1924 Iósif Stalin asumió el liderazgo, degradó a Trotsky y cinco años lo exilió de manera definitiva. Rivera convenció al entonces presidente Lázaro Cárdenas de ofrecerle asilo políticoa Trotsky en el país luego de que anduviera entre Turquía, Francia y Noruega. León y su esposa Natalia Sedova llegaron a Tampico el 9 de enero de 1937. Kahlo fue a recibirlos sola porque en aquel momento Diego se encontraba enfermo.

Frida y Rivera les dieron asilo en la ahora conocida como Casa Azul, que se encontraba protegida con guardias, barricadas, sistemas de alarmas y con las ventanas cubiertas.

Jean van Heijenoort, secretario del político, contó en diferentes ocasiones que Sedova no entendía el inglés, idioma en el que Kahlo y Trotsky se comunicaban.

Frida y León se encontraban en la casa de la hermana de la artista, y el político deslizaba notas de amor en los libros que prestó a la mexicana para que los leyera cuando se separaban. 

Sedova descubrió a los amantes pese a la discreción y perfil bajo que mantenían, por lo que le puso un ultimatum entre la mexicana y ella. La artista nacional se dio cuenta de ello y también comenzó a disminuir su atracción por el ruso.

En 1939, Kahlo y Rivera cambiaron de bando, pasando a ser estalinistas. El pintor y el político comenzaron a distanciarse en lo que a ideas políticas se refiere. El ruso calificó a Rivera de “infantil en la política” y lo ridiculizó por su “ambigüedad política”, mientras que el mexicano apoyó a Francisco José Múgica.

El 20 de agosto de 1940, Ramón Mercader, un agente encubierto que trabajaba para Stalin asesinó a Trotsky con un picahielo. Años después salió a la luz un fragmento de la carta que el ruso le escribió a la mexicana tras su separación.

La carta que León Trostky le escribió a Frida Kahlo

A continuación un fragmento de la carta que León Trotsky le escribió a Frida Kahlo:

“Frida, amada, Al contemplar esta noche tu rostro de cervatillo, he descubierto que jamás conseguiré hacerte a un lado de mi cabeza no se diga de mi corazón. Arde mi sangre como una lámpara votiva al lado de mi mesa, y es como un cerrojo (parte ilegible en el original) una noche en Colloacan (sic). Dejo este papel debajo de tu puerta. Y debo volver a aclarar que no hubo diferencias entre nosotros. Ni la espina dorsal abre un surco insalvable en los hemisferios de una espalda. Me cuesta precisar en cualquier caso, tal vez por mi alma eslava, si ese espacio abierto entre nosotros podrá cerrarse y cicatrizar (…) Te amé desde siempre y a escondidas. Me encontraba dueño de un juego de principios en los que me arrellanaba como un castor, y esquivaba el fantasma de tu bigote, tu porte de soldadera y esa sed de besos capaz de (parte ilegible en el original)”.

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