Secretaría de Cultura condena subastas en Francia con patrimonio prehispánico de México
Las piezas provenientes de diferentes culturas serán puestas en venta en próximos días.

Al grito de “Mi patrimonio no se vende”, la Secretaría de Cultura federal condenó que Francia realice subastas con piezas prehispánicas de México, un acto que ya han llevado en ocasiones anteriores.
La institución presidida por Alejandra Frausto hizo un llamado a través de redes sociales para que se ponga un alto a estas operaciones que tendrán lugar en próximos días, donde se ofrecerán objetos que formaron parte de culturas antiguas de nuestro país.
La sociedad de Giquello y la casa Boscher Enchéres son quienes pondrán a la venta estas piezas que “pertenecen a la memoria histórica y patrimonio cultural de México”.
Como lo instruyó el Presidente @lopezobrador_, acompañados de la doctora @BeatrizGMuller, en el @GobiernoMX seguiremos alzando la voz #MiPatrimonioNoSeVende pic.twitter.com/GpzRacH8jr
— Alejandra Frausto (@alefrausto) November 30, 2023
Algunas de las piezas del patrimonio cultural de México que se ofrecerán en las subastas de Francia provienen de culturas prehispánicas como la olmeca, la chontal, jaina y tarasca, entre muchas otras.
Por algunas de las piezas se esperan hasta más de 8 mil euros, aunque la comunidad cultural sostiene en redes sociales que si estas piezas caen en manos de particulares, nuestro país perderá un legado importante en el ámbito cultural.
“Como lo instruyó el presidente Andrés Manuel López Obrador, acompañados de la doctora Beatriz Gutiérrez Muller, en el Gobierno de México seguiremos alzando la voz”, insistió Frausto en su mensaje donde pidió un alto a las ventas.
La Secretaría de Cultura ha condenado en ocasiones anteriores las subastas que se llevan a cabo en Francia, España y otros países europeos con el patrimonio del México prehispánico. En algunas ocasiones se han detenido las operaciones, pero otras han continuado.
En el gobierno actual, la administración ha podido recuperar diferentes piezas precolombinas que han estado en otros países bajo la campaña “Mi patrimonio no se vende”.