Feministas de Chimalhuacán exigen justicia tras desalojo con violencia
Tres agentes de tránsito de Chimalhuacán fueron detenidas

Feministas del municipio de Chimalhuacán desalojadas con violencia de un plantón que instalaron frente al centro de justicia el fin de semana exigen justicia a las autoridades de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México por las agresiones que sufrieron.

La noche del viernes y madrugada del sábado, un grupo de feministas instaló un plantón afuera del centro de justicia de Chimalhuacán, en el oriente del Estado de México, el cual fue desalojado con violencia y gas de extintores la madrugada del domingo.

Las manifestantes denuncian haber sido agredidas por uniformados y hombres vestidos de civil después de haber hablado con la fiscal para la atención de delitos de género del Estado de México, Dylcia García Espinoza de los Monteros, la madrugada del 3 de abril. La conversación fue transmitida en vivo a través de una página de facebook.

Nelly, quien pidió no dar su apellido por temor a represalias, es integrante de la colectiva Amor no es Violencia, una de las organizaciones que han surgido en el Estado de México y el país ante los altos niveles de violencia e impunidad en contra de las mujeres, y estuvo presente en los hechos.

“Dylcia nos dijo: ‘Es que no me dejan hacer mi trabajo’. Da unos pasos hacia delante y con los tres dedos de en medio hace una seña, se da la vuelta, se sube a su camioneta, se va y ahí fue cuando pasó todo”, dijo a La-Lista.

La manifestación dio inicio el 1 de abril horas después de que Irene Martínez fue detenida por policías mientras viajaba con un hombre a bordo de una motocicleta con supuesto reporte de robo.

Irene denunció en 2019 que su hija fue víctima de violación por parte policías municipales y acudió a las autoridades, pero la investigación no ha avanzado y no ha habido detenidos.

De acuerdo con las manifestantes, la familia de Irene no pudo localizarla por varias horas hasta que supieron dónde estaba detenida. Ante su detención el viernes pasado, jóvenes de diferentes colectivos, así como madres de víctimas de feminicidio en el Estado de México, acudieron al centro de justicia de Chimalhuacán para exigir su liberación.

Colectivos como Amor no es Violencia y activistas independientes realizaron un plantón afuera del centro de justicia y por la madrugada del sábado 2 de abril cuando las autoridades liberaron a Irene. Al quedar libre, afirman que tenía signos de tortura, estaba golpeada y le faltaban dientes, por lo que el plantón se mantuvo para protestar y pedir que los cuatro policías de tránsito, tres mujeres y un hombre, fueran detenidos, dijo Nelly a La-Lista.

“Ella estaba detenida sin razón. Los policías de tránsito dijeron que la moto en la que iba tenía reporte de robo, pero ella enseñó que era suya y aun así la detuvieron”, contó Nelly.

Una vez afuera del centro de justicia, Irene se reunió con las jóvenes feministas y activistas, entre las que se encontraba Irinea Buendía, madre de Mariana Lima, asesinada por su esposo en 2010 y quien era comandante de la policía en Chimalhuacán

En 2015, su caso llegó hasta la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en donde se sentaron lineamientos para investigar un feminicidio, pues las autoridades habían cerrado la investigación al declarar que Mariana presuntamente se había suicidado. Hasta ahora, no hay una sentencia contra el presunto feminicida, quien se encuentra recluido en el penal de Nezahualcóyotl, Estado de México. 

Por la noche del sábado, la fiscal Dylcia García llegó al centro de justicia, habló con Irene y otras activistas quienes exigían que fuesen detenidos todos los policías involucrados en las agresiones a Irene y sus mandos, pero al no alcanzar ningún acuerdo, se retiró más tarde. Minutos después, dio inicio el desalojo con gases.

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Dylcia García reunida con activistas, el 2 de abril de 2022/ Crédito: FB Justicia para Diana

“Los policías que estaban dentro de la fiscalía, junto con los policías vestidos de civiles que estaban a los costados, nos comenzaron a atacar”, dijo Tabata, de 17 años, quien se encontraba en la protesta y también fue herida por policías la noche del 2 de abril.

En ese momento, policías y hombres vestidos de civil aventaron las casas de campaña que las feministas tenían instaladas en el pavimento y agredieron a las jóvenes, según se observa en un video publicado en redes sociales.

“Un policía me dio un macanazo en el brazo, lo traía inmóvil y no lo podía mover. Traigo un moretón verde y tengo muy inflamado. A una de nuestras hermanas le abrieron la cabeza, a otra la tiraron al piso y la patearon y a otra la agarraron y la aventaron contra un árbol y se lastimó las costillas”, contó Tabata, a La-Lista.

La hija de Irene, quien ahora tiene 16 años, también estaba en el plantón. Policías la tiraron al piso y la patearon, aseguró Nelly del colectivo Amor no es Violencia. 

Hasta el momento, ninguna de las jóvenes ha denunciado las agresiones por temor a que las autoridades conozcan su identidad y domicilio y sean víctimas de represalias.

“Una vez que el Estado obtiene tu identidad, ya no te deja en paz”, dijo Nelly, activista y defensora de derechos humanos de 27 años, en el Estado de México.

Detención de policías de tránsito

Ese sábado, tres mujeres policías de tránsito fueron detenidas por lesiones contra Irene. La Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) abrió una carpeta de investigación en su contra.

“Estas elementos en activo fueron puestos a disposición del Agente del Ministerio Público de la Fiscalía Regional de Nezahualcóyotl por también policías municipales de Chimalhuacán, donde se inició la carpeta de investigación, intervención de médico legista y de la Policía de Investigación, para deslindar responsabilidades”, informó la FGJEM.

El lunes 4 de abril, las tres policías de tránsito fueron vinculadas a proceso y el juez les otorgó llevar su proceso en libertad. Nelly afirma que aún falta un comandante presuntamente involucrado, a quien no han detenido.

A pesar de esto, el titular de la Dirección General de Seguridad Ciudadana y Tránsito Municipal de Chimalhuacán, Salvador Hernández Torres, negó el domingo que los policías hayan maltratado a Irene durante su detención.

El funcionario dio su versión de los hechos. Relató que policías de Tránsito Municipal pararon a un hombre y una mujer que a bordo de una motocicleta circulaban en sentido contrario en una avenida y, que después de hacer una consulta en Plataforma México descubrieron que la unidad tenía reporte de robo, por lo que se detuvo al conductor, quien fue presentado ante el Ministerio Público de La Perla, de Nezahualcóyotl.

Aseguran que su acompañante mujer “fue por su propia voluntad al MP, luego de que se le dijera que ella debía irse”, porque no había nada que perseguir en su contra. “Pero ahí se nos ordena que sea regresada a Chimalhuacán y después ella afirma que en el trayecto fue golpeada y torturada”, afirmó el funcionario.

El funcionario reconoce que la denunciante presentaba lesiones de segundo grado, por lo que tres elementos policiacos fueron puestos a disposición del Ministerio Público y procesadas por un juez de penal Neza-Bordo, en donde se inició una carpeta de investigación, señala el comunicado.

Las feministas exigen ahora la destitución del cargo de funcionarios y hacen un llamado a emitir un tuitazo masivo con el #ChimalhuacánFeminicida.

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Imagen: Especial

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