Caso Ayotzinapa | Encinas revela que se desecharon mensajes usados como pruebas
Alejandro Encinas, titular de la Comisión del caso Ayotzinapa. Foto: Alejandro Encinas/Facebook.

Alejandro Encinas, titular de la subsecretaría de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación (Segob), reveló que algunos mensajes utilizados como pruebas sobre el caso Ayotzinapa tuvieron que ser desechados al no contar con elementos suficientes para acreditarlos como reales. 

El pasado 18 de agosto, la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del caso Ayotzinapa presentó un informe del tema ocurrido en septiembre de 2014, en el que aseguró que no existían indicios de que los 43 normalistas siguieran con vida, y calificó el hecho como un crimen de Estado. 

Sin embargo, este miércoles 26 de octubre declaró al The New York Times que algunos mensajes utilizados para la investigación “no tienen elementos suficientes para acreditarse”, por lo que tuvieron que ser desechados. 

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Familiares de estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa. Foto: Mario Guzmán/EFE.

Además, explicó que los textos, conformados por 467 capturas de pantalla, le fueron entregados por una sola fuente y que si bien se cotejaron con otras pruebas, no fueron compartidos con la Fiscalía General de la República (FGR) para que esta dependencia realizara un análisis forense y verificara la autenticidad.

En este sentido, dijo que no los entregó  a la dependencia al mando de Alejandro Gertz Manero por miedo a que los mensajes se filtraran.

Pese a esta situación, reiteró su confianza en la investigación que la comisión realizó y destacó que se está consolidando. 

Los mensajes a lo que se refiere Encinas detallan la supuesta complicidad entre integrantes de grupos del crimen organizado, policías municipales e integrantes del Ejército en los hechos ocurridos en Ayotzinapa.

A la par explicaban el operativo llevado a cabo por estas personas para coordinar la desaparición de los 43 normalistas, ocurrida la noche del 26 y madrugada del 27 de agosto. 

Luego de la difusión del informe de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del caso Ayotzinapa, la FGR detuvo a Jesús Murillo Karam, titular de la entonces Procuraduría General de la República (PGR) con Enrique Peña Nieto y quien defendió la “Verdad Histórica” que aseguraba que los normalistas fueron asesinados e incinerados, y sus restos arrojados a un basurero en Cocula.

Murillo Karam es el único exfuncionario de alto nivel que se encuentra en un proceso penal por desaparición forzada, derivado del supuesto montaje de la “verdad histórica”, la cual aseguraba que los jóvenes habían sido quemados en un basurero de Cocula, en Guerrero.

Además, en septiembre, un juez federal de procesos penales dictó auto de formal prisión en contra de José Rodríguez Pérez, José Martínez Crespo y Eduardo Mota Esquivel, elementos de la Secretaría de la Defensa ligados al caso Ayotzinapa.

La solicitud de ayuda a Tomás Zerón

The New York Times también tuvo acceso a un audio en el que Encinas pide ayuda al extitular de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), Tomás Zerón de Lucio, en que le piden apoyo para esclarecer el caso a cambio del ‘apoyo del presidente’.

En febrero, Encinas voló a Israel para encontrarse a solas con Tomás Zerón de Lucio, quien está acusado de tortura y de fraguar la llamada “verdad histórica”.

“Encinas pidió a Zerón información sobre los restos de los estudiantes que podría haber retenido mientras estuvo en el poder. El funcionario le ofreció el ‘apoyo del presidente’ a cambio de su cooperación”, consigna el NYT que se escucha en el audio entre ambos personajes.

“Ayúdame a desenmarañar todo esto”, le dijo Encinas a Zerón en el encuentro según el medio estadounidense. “Yo te garantizo el apoyo del presidente”.

“Al presidente no le importa meter gente a la cárcel”, le dijo el subsecretario al exfuncionario peñista.

El medio consultó a Encinas, quien sostuvo que intentaba persuadir a Zerón de que cooperara porque consideraba que tenía información valiosa y que solo le prometió que López Obrador respaldaría un acuerdo que podía haber incluido una sentencia reducida de prisión.

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