Acapulco: la ciudad donde las autoridades han encontrado más fosas clandestinas

De joya turística a escenario de violencia en México. El puerto de Acapulco, una ciudad que millones de personas visitan cada año, es la ciudad donde las autoridades han encontrado más fosas clandestinas a nivel nacional.

Organizaciones defensoras de derechos humanos y familiares de víctimas alertan que, mientras los turistas descansan bajo el sol y disfrutan del mar, las zonas periféricas de Acapulco se han convertido en un “panteón” en el que grupos del crimen organizado entierran a sus víctimas, muchas de éstas reportadas como desaparecidas.

“Desgraciadamente nos vamos acostumbrando a esta situación”, dice Sergio Ceballos, integrante del colectivo Familias de Acapulco en Busca de sus Desaparecidos. “Es principalmente en la periferia donde hemos encontrado las fosas clandestinas, en el centro (del puerto) también lo hemos hecho, pero es más difícil porque es dentro de predios que le pertenecen a alguien”.

En Acapulco, las autoridades estatales y federales han encontrado por lo menos 284 fosas clandestinas desde el 2006. Dentro del estado de Guerrero no hay ninguna otra ciudad que tenga una cifra de hallazgos tan elevada. Muy por detrás de Acapulco se encuentra el municipio de Iguala, con 55 fosas.

A nivel nacional, Acapulco es la ciudad donde las autoridades han encontrado más fosas clandestinas, por encima de Tecomán, Colima, donde ha habido 224 hallazgos; Ahome, Sinaloa, con 175; Veracruz, Veracruz, con 154; y Ciudad Juárez, Chihuahua, con 150.

Sergio es el coordinador de las labores de búsqueda del colectivo al que pertenece. Empezó a realizar esta actividad porque en el 2015 su hija Montserrat, de 16 años, desapareció. Un año después la Fiscalía de Guerrero encontró sus restos en una fosa clandestina en un predio baldío de la zona urbana de Acapulco.

A pesar del hallazgo de su hija, Sergio decidió seguir ayudando a las personas que tienen un desaparecido en Acapulco. Comparte que cuando su colectivo empezó, solo eran seis familias en busca de sus seres queridos, ahora son alrededor de 400.

“Cuando empezamos el colectivo hicimos la promesa de que, a pesar de que encontráramos a nuestro familiar, íbamos a seguir ayudando a los demás. Desgraciadamente no pensamos que esto fuera a crecer tanto”, expresa Sergio.

Los datos oficiales muestran que en el estado de Guerrero hay 4 mil 64 personas desaparecidas y más de una cuarta parte de estos casos (mil 89) se han registrado en el puerto de Acapulco.

Cerro de El Veladero, un ‘panteón clandestino’ en Acapulco

Si bien la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB) no da detalles del lugar en el que han sido encontradas las fosas clandestinas, los colectivos que trabajan en Acapulco señalan que el Parque Nacional de El Veladero es el punto principal donde los criminales entierran a sus víctimas.

Este Parque Nacional es un área verde de 3 mil 617 hectáreas que rodea todo el Puerto de Acapulco. Desde el año 2000 esta zona fue declarada un área natural protegida, lo cual conllevaba que las autoridades ambientales de México debían vigilar y preservar la flora y fauna del lugar.

Más de 20 años después, Sergio señala que “prácticamente todo el cerro de El Veladero es un gran panteón“. Añade que dentro del Parque Nacional han encontrado fosas clandestinas a la altura Pie de la Cuesta o en zonas más céntricas como la colonia Sinaí. “Los hallazgos los hacemos donde trabajan más las organizaciones criminales, donde se pone más peligroso”, explica.

El colectivo Familias de Acapulco en Busca de sus Desaparecidos realiza jornadas de búsquedas una vez al mes junto a autoridades de Guerrero y tres veces al año con la Fiscalía General de la República (FGR). En cada jornada el grupo llega a encontrar entre una a cinco fosas clandestinas.

“Por lo regular siempre tenemos éxito, muy pocas veces bajamos de esas búsquedas sin encontrar algún fragmento o algún resto”, señala Sergio. Al mismo tiempo critica a la Fiscalía de Guerrero, pues asegura que su colectivo ha encontrado restos humanos en fosas clandestinas que esa dependencia supuestamente ya había revisado.

En 2013, el periódico El Sur reportó el hallazgo de cuatro fosas clandestinas con una osamenta y tres cuerpos en la zona. Desde ese entonces fuentes de la Fiscalía de Guerrero dijeron a ese diario que en el Parque Nacional podría haber más cuerpos.

Sin embargo, esto no limita que en otras zonas del puerto sean encontradas fosas clandestinas. En 2018 las autoridades localizaron uno de estos sitios en la playa Luces del Mar, en la zona de Pie de la Cuesta. Los restos recuperados correspondían a los de Norma Patricia, una maestra jubilada que había sido reportada como desaparecida días antes.

Del total de fosas clandestinas en Acapulco, 147 fueron encontradas entre el 2006 y 2018, en los sexenios de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, mientras que 137 fueron encontradas en la administración de Andrés Manuel López Obrador.

Una ciudad turística de interés para la delincuencia organizada

Acapulco se desarrolla en dos realidades totalmente opuestas. En un informe reciente esta localidad fue ubicada como la décima ciudad más peligrosa del mundo porque en 2022 ahí se registraron 65 homicidios dolosos por cada 100 mil habitantes.

A pesar de este nivel de violencia, Acapulco sigue siendo un importante destino turístico. Para la Semana Santa y Pascua de este 2023 la Secretaría de Turismo de Guerrero estima que este puerto será visitado por 490 mil turistas y habrá una derrama económica de 4 mil 500 millones de pesos.

Esta misma afluencia turística provoca que Acapulco sea una ciudad de interés para los grupos del crimen organizado, opina Humberto Guerrero, coordinador del Programa de Derechos Humanos de la organización Fundar.

“El municipio de Acapulco como centro económico tiene mucho movimiento por parte de los grupos del crimen organizado, no hay que olvidar que ellos lo que hacen es un negocio y funcionan como empresa”, expresa Guerrero.

El experto lamenta que, en medio de la disputa de los grupos criminales por el control económico de Acapulco, la cantidad de personas desaparecidas y de fosas clandestinas haya crecido tanto.

“Fenómenos como las desapariciones, las ejecuciones, el hallazgo de cuerpos ya sea expuestos o en fosas clandestinas, todo esto forma parte de modus operandi que han ido desarrollando los grupos, incluso con participación de las autoridades”, concluye.