“Las niñas queremos salir siempre seguras”, piden infancias en el 8M CDMX

Dianali, Sara Ximena, Andrea y Tamara no rebasan los 11 años de edad; asistieron juntas al 8M en la Ciudad de México (CDMX).

Eran un contingente pequeño, pero ruidoso. Estaban sobre la acera muchos metros antes de llegar a metro Bellas Artes. Veían a todas las manifestantes pasar mientras gritaban: “Las niñas queremos estar siempre seguras”.

Las demás, al verlas, les respondían: “Esas morras sí me representan” mientras les aventaban confeti, daban dulces o cantaban la consigna con ellas.

Las cuatro niñas, acompañadas de sus madres y hermana, no dejaron de gritar en el 8M que se conmemoró en la CDMX.

Andrea, de ocho años, explicó que quiere que todas las niñas salgan a las calles sin ningún peligro.

“Muchos señores malos pueden estar cerca y atrapan a los niños con dulces cuando las mamás están distraídas”, mencionó Andrea.

También apoyó a las mujeres que están desaparecidas.

“A las que están desaparecidas, siempre las voy a apoyar y a recordar… Veo muchos carteles pero no sabía de ellas, que están desaparecidas”, ahondó Andrea durante la marcha del 8M en la CDMX.

La niña también es consciente de que ninguna persona puede tocar su cuerpo sin su consentimiento:“No se vale que un niño toque el cuerpo de una mujer, es delito”.

Su hermana, Karla, de 22 años, le ha enseñado la importancia de hacerse escuchar.

“Desde muy chiquita le he inculcado la importancia de hacernos visibles, conocer nuestros derechos y de siempre buscar lo mejor para las mujeres… me gusta que se dé cuenta que tiene muchísimo apoyo, no sólo el mío”, mencionó en la marcha del 8M.

Dianali, de 10 años, era otra de las niñas más grandes que integraba el contingente.

Su actividad favorita es la gimnasia, lo demostró con una vuelta de carro que realizó sobre la banqueta al paso de los contingentes del 8M.

En la escuela, su clase preferida es el español, pero hoy decidió marchar, por primera vez, y también gritar: “Mujeres escuchen está es nuestra lucha”.

Dianali explica que asistió a la marcha para mostrar apoyo.

“(Vine) a defender a toda nuestra familia gigante que son todas las mujeres que están aquí alrededor de nosotras… Se siente bonito salir a gritar”.

Las más pequeñas del contingente eran Sara Ximena y Tamara, de seis años y mejores amigas.

Sara Ximena portaba un cartel que decía: “Chiquita pero valiente” y no dejó de gritar con sus primas.

“Soy valiente porque casi no le temo a nada”, aseguró Sara.

Mientras Tamara, quien estudia tercero de kinder, portaba un cartel con el mensaje: “Mujeres no tengan miedo, somos fuertes”.

Ellas no fueron las únicas niñas que salieron a las calles este 8M en la CDMX.

Andrea llevó a la marcha del 8M a su sobrina Frida, de seis años. Quiere enseñarle a no callarse ante cualquier situación injusta o de violencia hacia las mujeres y niñas.

“Quiero inculcarle a Frida, que pueda ver, aunque somos afortunadas de no vivir un episodio traumante en la familia… que desde muy pequeña aprenda que soy su persona de confianza a la que le puede contar algo malo”, mencionó a La-Lista.

Los temores de las mujeres adultas y las infancias para exigir que vivan sin violencia no son infundadas.

Los últimos datos de la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) advierten que 70.1% de las mujeres de 15 años y más sufrió algún tipo de violencia alguna vez en la vida.

“Una de cada tres mujeres reportó haber enfrentado violencia psicológica y una de cada cinco sufrió violencia sexual”, de acuerdo con el Inegi.

A nivel mundial, 245 millones de mujeres y niñas siguen sufriendo violencia física o sexual por parte de sus parejas, de acuerdo con el informe Panorama de Género 2023 de la ONU.

El organismo advirtió que 86% de mujeres y niñas viven en países sin sistema sólidos de protección legal contra la violencia.