Ellos son los 10 mineros atrapados en el pozo de Sabinas, Coahuila

En la oscuridad de un profundo pozo de carbón en Sabinas, Coahuila, un torrente de agua venció las paredes y polines inundando las excavaciones de 60 metros de profundidad. Lograron salvarse cinco mineros, pero en el fondo quedaron atrapados 10 hombres.

A las 13:35 horas del 3 de agosto, un pozo carbonero en la comunidad de Villa de Agujita se inundó por un afluente de agua que se había acumulado en la mina vecina Conchas Norte, una instalación abandonada por años.

Quienes conocen la región carbonera explican que El Pinabete no es una mina sino un pozo carbonero, su estructura es más simple porque solo consisten en uno o varios pozos, como los cientos que hay en Coahuila y que abastecen las plantas carboeléctricas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).

Las labores de rescate de los mineros atrapados en Sabinas se convirtieron en una guerra contra el tiempo y contra el agua, que ha vuelto los esfuerzos en el mito de Sísifo. Cuando han estado a punto de vaciar los pozos con la fuerza de 20 bombas de agua, una nueva corriente subterránea de agua inunda los pozos al máximo posible. Se han extraído más de 705 mil metros cúbicos de agua, el volumen equivale a haber vaciado los pozos más de 100 veces.

El sinistestro puso nuevamente en evidencia las precarias condiciones de seguridad en las que trabajan miles de mineros de la región, la principal fuente de carbón mineral de la que se abastecen las plantas carboeléctricas de la CFE.

Entre los mineros atrapados hay familiares de alguno de los 65 mineros que estuvieron en la explosión de una mina de carbón que se registró en Pasta de Conchos en 2006.

Cristian Solís, el nombre de quien se registró como patrón en la mina, fue dado a conocer por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social a las pocas horas del siniestro. Pero días después se supo que los dueños registraron a los mineros ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) después de la inundación.

La Fiscalía General de la República inició una carpeta de investigación en contra de la misma persona por el delito de explotación ilícita del subsuelo, pero el gobierno piensa que es probable que sea solo un prestanombres y que los verdaderos dueños de la mina no estén en los registros.

La coordinadora Nacional de Protección Civil, Laura Velázquez, ha informado sobre las labores de rescate, en las que ha participado la Comisión Federal de Electricidad, el ejército y personal del gobierno de Coahuila y de Sabinas. Esta semana informó que se dará una indemnización “muy seria y digna” a cada una de las familias.

Los familiares directos de los 10 mineros atrapados permanecieron a unos metros de los pozos carboneros hasta este lunes, cuando toda esperanza de rescatarlos con vida pareció agotarse, ya que la solución más viable de llegar a sus cuerpos es haciendo un tajo que tomará de seis a 10 meses.

Este sábado se llevará a cabo una misa en el sitio del siniestro, a la que solo podrán asistir siete familiares por cada uno de los trabajadores atrapados, lo que ha causado molestia entre personas que han estado al pendiente de las labores de rescate.

Entre los mineros que quedaron atrapados hay quienes regresaron para intentar salvar a sus compañeros y algunos que llevaban años dedicándose a la actividad de extracción de carbón porque era su pasión. Estas son sus historias.

Jorge Luis Martínez Valadez

34 años

La última vez que vio a su hijo de 10 años le prometió que el 5 de agosto iba a ir por él para salir a pasear. Su hija de 16 años es la única que sabía que su papá estaba atrapado en la mina y está al pendiente de las labores de rescate, junto con su mamá, Carolina.

Es residente de la Villa de Agujita y padre de familia de dos menores. Su hermano Sergio Alejandro dice que todos lo llaman “El Loco“, por su carisma, tiene una risa inconfundible. Pero así como es alegre, se enoja y es “mecha corta”.

Su papá fue carbonero, y algunos de sus primos y tíos también han pasado por la industria el carbón. Él, desde antes de los 18 años, se dedicó a la minería.

En la adolescencia inició con los trabajos “rudos” en los pozos de carbón y minas. Su esposa Carolina Álvarez, lo describe como un hombre muy trabajador, responsable y excelente papá, siempre al pendiente de su familia. Sus conocidos coinciden en decir que es “dicharachero”.

Las autoridades solo le dan información a las esposas, por lo que Sergio Alejandro no puede acercarse a preguntar por su hermano. “Ese es uno de mis corajes que traigo atorado, sin derecho a opinar en nada”.

Margarito Rodríguez Palomares

52 años

Esposo, padre de dos hombres y una mujer y abuelo de dos niñas y un bebé. Fue militar y al salir de Secretaría de la Defensa Nacional, hace 15 años aproximadamente, comenzó a dedicarse a la minería.

Una vez que entró a las entrañas de la mina, decidió que ese sería su trabajo para el resto de su vida.

Comenzó trabajando en una mina llamada Los Morales, cerca de Sabinas, pero la dejó para irse a los pozos porque ahí pagan más. Su cuñado Pedro Huerta Ramos lo describe como un hombre noble, amante de la comida hecha en casa, le gusta mucho cocinar y pasarla bien los fines de semana al lado de sus nietos.

Mario Alberto Cabriales

45 años

Esposo, padre de familia, abuelo y residente de la Villa de Agujita. Se ha dedicado al trabajo en minas desde hace más de 15 años.

Su padre, Antonio Cabriales Valdez, lo describe como un hombre muy responsable y comprometido con sacar a su familia adelante. Sus descansos siempre los pasa con sus hijos y nietos. Le gusta estar en su casa, hacer comida para todo el fin de semana y disfrutar cada momento.

Hugo Tijerina Amaya

29 años

Hugo tiene poco tiempo de haber ingresado a la riesgosa labor de la minería en la región carbonífera de Coahuila.

Antes trabajaba en una maquiladora de la ciudad, sin embargo, por ganar un poco más de dinero y llevar mejor sustento a su casa decidió entrar al mundo del carbón, cuenta su primo José Luis Amaya González.

Es padre de tres niños y su esposa está desesperada por reencontrarse con el amor de su vida, con quien tiene una relación desde hace 10 años.

Sergio Gabriel Cruz Gaytán

41 años

Apenas hace dos meses, Sergio Gabriel entró a trabajar a la mina El Pinabete. Es padre de dos mujeres y abuelo.

Su tía Cecilia Cruz lo describe como un hombre que siempre ha tratado de darles todo a sus familiares y atenderlos, totalmente servicial y a quien le encanta salir a pasear con sus nietos.

Ramiro Torres Rodríguez

24 años

Su primera hija tenía apenas dos semanas de nacida cuando ocurrió la inundación en El Pinabete y no ha podido registrarla, relata su esposa Nélida Flores.

Apenas comenzó a dedicarse a la minería, una de las principales fuentes de empleo en la región, ya que antes trabajaba en la industria de la maquila.

Trabajaba en el pozo con su hermano Aureliano, de 22 años, quien salió a la superficie por un refresco cuando ocurrió la inundación y desde entonces ha ayudado en las labores de rescate.

José Moreno Morales

22 años

José es residente de Nueva Rosita, lleva pocos años dedicándose a la minería junto a su padre, José Moreno Leija, quien también está atrapado en el pozo carbonero El Pinabete.

José Moreno Leija

42 años

Residente del municipio de Nueva Rosita, José se dedica a la minería desde hace más de 20 años.

Es esposo y padre de cuatro hijos, tres son mujeres y uno hombre. Su hijo José Moreno Morales también se encuentra en el pozo El Pinabete.

José Luis Mireles Arguijo

41 años

Vive en Villa de Agujita. Es esposo, padre de tres hombres y abuelo de dos niñas. Su nuera Diana Flores lo describe como un hombre honrado y “muy buena gente”.

Nunca dice que no ha nada, siempre “le entra” a todos los trabajos y le fascina el empleo de la minería. Desde adolescente inició trabajando en los pozos de carbón y minas.

Jaime Montelongo Pérez

61 años

Tenia una semana de haber iniciado labores en ese pozo carbonero. Es esposo y padre de dos hijos de 34 y 32 años, con los que es muy allegado.

Su hermana María Magdalena Montelongo Pérez lo recuerda como un hombre muy responsable y hogareño.