‘Mi hermana quería de regalo de 15 años un ramo de flores buchón’, hermano de Norma, víctima de bullying

La hija menor de la familia Ramos, Norma Elizabeth, estaba a un mes y doce días de cumplir 15 años, cuando murió a consecuencia de un traumatismo cráneoencefálico, después de haber sido golpeada por una de sus compañeras afuera de la escuela secundaria número 518, anexa a la Normal de Teotihuacán. 

La condición económica de su familia no es la más favorable, pero estaban ahorrando dinero para organizar su festejo. Su madre, Francisca Pérez, trabaja haciendo limpieza en otras casas y su hermano tenía empleo en los globos aerostáticos de la zona arqueológica hasta que tuvo un accidente que lo incapacitó por 10 meses.

“Mi hermana quería de regalo de 15 años un ramo de flores buchón, yo se lo iba a regalar, estaba muy emocionada con esa fecha”, contó a La-Lista Omar, hermano de la joven, mientras su papá preparaba el café y la comida para el rosario que se rezaría por la noche.

Norma Elizabeth era víctima constante bullying -acoso escolar- desde que inició la secundaria. Su mamá y su papá asistieron a la escuela varias veces para exponer la situación; sin embargo, las autoridades educativas no hicieron nada para evitarlo.

“En tercer grado fue cuando comenzó su bajón, no nos contó en segundo cómo eran sus compañeros, pero ya hasta tercero nos empezó a contar porque ya no aguantó y nos dijo que la molestaban mucho, que le decía a los maestros, pero nadie hacía nada”, relató Omar.

La joven le reveló a su familia que la habían retado a una pelea, pero también les dijo que ella ya estaba harta de que la molestaran todo el tiempo: le jalaban el pelo, le quitaban sus cosas y la ofendían verbalmente. 

“Hasta que la retaron a la pelea es cuando ella tomó la decisión de decir: ‘¡ya basta!, que me sigan molestando'”, contó Omar.

El 21 de febrero su hermana mayor, Alma Delia, planeaba ir a la escuela para informar a la directora lo que estaba por suceder y que las agresiones continuaban contra la menor de la familia, pero cuando llegó al plantel, la pelea ya se había suscitado.

Todo quedó grabado, compañeros de clase registraron con sus teléfonos celulares cómo una adolescente la golpeaba en la cabeza con un objeto.

Su familia se enteró del video una semana después, gracias a una vecina que le brindó los primeros auxilios a Norma Elizabeth al ver cómo había sangrado.

“A mi hermana se la llevaron a la Fiscalía de San Lorenzo y le brindaron los primeros auxilios los de Protección Civil y la otra chava, pues se les había dado la fuga a las autoridades”, señaló Omar.

A Norma le gustaban los corridos tumbados y su ‘plan b’ era hacer una carrera militar

Norma era una joven de complexión delgada, introvertida y su familia solo le conocía un par de amigos.

Su hermano compartió que entre los gustos musicales de Norma se encontraba la música de banda, los corridos tumbados, el reguetón, las baladas y la música pop. Su cantante favorito era Junior H, su comida predilecta eran los tamales y el mole con pollo.

Norma Elizabeth soñaba con titularse como enfermera y como segundo plan, pensaba unirse a las filas del Ejército, como su padre, quién alcanzó el grado de Sargento segundo de Artillería.

En casa, Omar compartió que su hermana solía estar sentada en el comedor, con sus audífonos, en silencio, haciendo tarea o estudiando para algún examen. 

“Como era una niña tímida, le dábamos su espacio, convivíamos con ella cuando comíamos, le dábamos el amor que necesitaba y el apoyo”, comentó.

La familia Ramos Pérez vive en la colonia Nueva Evangelista, en el municipio de San Juan Teotihuacán, a escasos 20 minutos en una caminata desde la zona arqueológica donde se encuentran las pirámides al Sol y la Luna.

Los vecinos de la familia la describen como una “buena niña”, callada, respetuosa; incluso algunas personas refirieron a La-Lista que la menor contaba con una inocencia poco común a su edad y se mostraba responsable con sus tareas de la escuela y ordenada en casa.

En la sala y comedor de su hogar ahora se encuentra un altar con una foto de la joven, con velas y cirios que se mantienen encendidos mientras dura el rosario.

En su espacio no han quedado objetos personales de Norma Lizbeth, solo la foto del altar. Su hermano explicó que su familia decidió llevar con ella todo aquello que los hiciera recordarla

Por ello, su familia decidió inhumarla con todas sus pertenencias: zapatos, ropa, libretas, mochila, perfume, labial, y hasta su teléfono fueron enterrados.