Pobladores de Guerrero huyeron de comunidad por ataques con drones, alerta ONG

Habitantes de El Caracol, poblado ubicado en el municipio de General Heliodoro Castillo, Guerrero, son víctimas de desplazamiento forzado luego de haber sufrido ataques con drones y artefactos explosivos supuestamente perpetrado por el grupo criminal La Familia Michoacana.

El Centro de Derechos de las Víctimas de Violencia “Minerva Bello” alertó de esta situación y exhortó a las autoridades de los tres órdenes de gobierno a brindar atención humanitaria urgente a los habitantes de El Caracol, quiénes, dijo, se encuentran en condición de desplazamiento forzado interno producto de la violencia provocada por grupos armados.

Los habitantes de dicho poblado explicaron a la organización defensora de derechos humanos, que hace aproximadamente siete meses un grupo de hombres armados -presuntos integrantes de La Familia Michoacana-amenazó a la comunidad diciendo que “no querían ver a nadie de las comunidades de las orillas del río o se atienen a las consecuencias”.

Esto impidió a parte de la población salir al municipio de Apaxtla de Castrejón a hacer compras y las personas que han hecho caso omiso a la amenazas han sido golpeadas, de acuerdo con la misma organización.

A través de un pronunciamiento, el centro detalló que el pasado 2 de mayo de 2023, alrededor de las 18:00 horas, pobladores de El Caracol se percataron que había drones sobrevolando su comunidad. Para el día el 3 de mayo nuevamente advirtieron la presencia de estos, pero en esa ocasión fueron lanzadas seis bombas de los drones sobre su comunidad, lo que motivó que la población saliera de manera inmediata buscando proteger la vida de mujeres y niños.

Ya el 8 de mayo del año en curso, a pesar de ya encontrarse desplazados, la comunidad fue atacada nuevamente con los drones, los cuales lanzaron 11 bombas en contra de la población masculina que se mantuvo en la comunidad, denunció el Centro de Derechos de las Víctimas de Violencia “Minerva Bello”.

Así, desde el día 3 de mayo casi la mitad de la población de El Caracol se encuentra desplazada de manera forzada refugiándose en la parroquia de la comunidad de Tlacotepec, donde les han dado atención humanitaria, aunque esta ha sido insuficiente.

La organización indicó que más de la mitad de las personas desplazadas presentan problemas de salud, como diarrea, tos, gripa, fiebre, dolor de cuerpo, dolor de cabeza y crisis nerviosa, entre otros.

El Centro de Derechos de las Víctimas de Violencia “Minerva Bello” hizo un llamado urgente a las autoridades de los tres órdenes de gobierno, para que, en el ámbito de sus atribuciones, realicen las acciones que aseguren la salud, educación, alimentación, vivienda y empleo en condiciones dignas de la población de El Caracol. Y que se restablezca la seguridad para que los habitantes de la comunidad puedan retornar a sus hogares.

El número de desplazados internos por la violencia en México se situó en un total de 386 mil en 2022, mientras que otras 3 mil 600 personas viven lejos de sus hogares a causa de desastres naturales, destaca el nuevo informe anual sobre desplazamiento global elaborado por dos importantes organizaciones.

El estudio del Observatorio del Desplazamiento Interno (IDMC, por sus siglas en inglés) y el Consejo Noruego de Refugiados (NRC) indica que la violencia causó 9 mil 200 nuevos movimientos forzosos de personas el pasado año, una notable reducción frente a los 29 mil registrados en 2021, aunque la cifra es similar a las de 2019 y 2020.

Un 90 por ciento de los desplazamientos motivados por la violencia se produjeron en los estados de Michoacán (oeste), Chiapas (sur) y Zacatecas (centro), detalla el informe.

En los casos de Michoacán y Zacatecas, 2 mil 700 de los desplazamientos se debieron a actividades del Cártel de Jalisco Nueva Generación, y parte de ellos fueron causados cuando esta banda criminal tomó la localidad michoacana de Chinicuila, apenas dos semanas después de que esta fuera sacudida por un seísmo.

NRC e IDMC subrayan que la cifra de desplazados internos en México ha subido de forma sostenida durante la pasada década y que en muchos casos las familias que retornan a sus hogares deben dejarlos nuevamente por la falta de seguridad.

-Con información de EFE.