‘El estafador de Tinder’: amor romántico, estafas emocionales y culpabilidad hacia las víctimas
Simon Leviev usaba vínculos emocionales para engañar a sus víctimas. Foto: tomada de internet.

Spoiler alert: este texto da detalles de parte del documental de Netflix

¿Quién no ha querido encontrar a su “media naranja” y vivir una historia de amor como las que veíamos de pequeños en las películas? Tener una relación en la que te complementas al 100% con la otra persona y en donde tu pareja mueve cielo, mar y tierra para que puedan seguir juntos. 

Esa historia, la del amor romántico, es la que lleva a que muchas personas sean víctimas de abusadores emocionales que se aprovechan de los sentimientos de alguien para obtener lo que buscan, ya sea un puesto laboral, una relación sexual o un valor monetario, entre otros. 

Es exactamente ese discurso el que está detrás de “El estafador de Tinder”, el documental de Netflix que habla de la historia de Cecilie Fjellhøy, Pernilla Sjöholm y Ayleen Charlotte, tres mujeres que fueron estafadas por Simon Leviev, cuyo verdadero nombre es Shimon Hayut, y quien se valió de crear lazos emocionales con estas mujeres para después estafarlas económicamente. 

¿Cómo lo hacía? A través de una cuenta en la aplicación de citas Tinder, Leviev contactaba a sus víctimas simulando tener una vida de lujos y mucho dinero, haciéndoles creer que debido a su estatus social tenía “enemigos” que lo atacaban a él y a su equipo de trabajo. 

Una vez que había creado un lazo emocional por muchos meses con sus víctimas, les decía que estaba en peligro y comenzaba a pedirles dinero prestado para poder ponerse a salvo. Sin embargo, este dinero era utilizado para pagar sus costosos viajes, cenas y hasta su guardarropa. 

Así, una vez que enamoraba a su víctima, le pedía dinero bajo la excusa de que no podía usar sus tarjetas de crédito y ese dinero lo utilizaba para enamorar a otra mujer y así sucesivamente.

En realidad, Simon Leviev nació en Bnei Brak, una ciudad al este de Tel Aviv, con el nombre de Shimon Hayut. El hombre fue detenido en 2019 tras haber utilizado un pasaporte falso, pero aunque su historia de estafas ya se había hecho pública, Simon solo estuvo cinco meses en la cárcel. 

Desde que Netflix dio a conocer su historia, se han destapado muchas críticas a Leviev, pero también a sus víctimas, cuestionando los factores que estuvieron detrás de estas estafas y el papel de la aplicación de citas en todo el caso. 

El amor romántico, una herramienta para la estafa

La Dra. Naylú Martínez Nuñez, quien es psicoterapeuta, terapeuta de familias y directora de la organización Mentes Saludables, considera que la idea del amor romántico compartido por películas, telenovelas mexicanas y distintos medios de comunicación, es uno de los factores que contribuyen a que las personas caigan en estafas emocionales. 

“Uno de los mitos relacionados a este tipo de amor es que el amor todo lo puede, el amor todo lo aguanta, el amor romántico es la fórmula perfecta para ser felices”, explica Martínez Nuñez a La-Lista.

“La trilogía de las novelas de Thalía, María la del Barrio, etc, enseñaban que había una chica pobre que siempre se iba a enamorar de este chico heredero millonario que la iba a salvar, más o menos lo mismo que las películas de Disney, pero llevado a las novelas (…) Las mujeres constantemente estamos en búsqueda de lo que es un mito, porque el amor romántico saludable es responsable”, explica la doctora. 

La búsqueda constante por el amor romántico de película, es lo que algunos usuarios en redes han señalado como una de las causas de las estafas como la de Leviev.

“​​Acabo de terminar de ver “El estafador de Tinder”, confirmo que el amor (romántico) es y ha sido el opio de las mujeres. Nos enseñaron a ser amadas por alguien más, a veces perdiéndonos a nosotras mismas en ese empeño. El feminismo nos salva también de eso, aunque a veces duela”, escribió una usuaria en Twitter sobre el documental. 

La experta indica que Leviev buscó hacer una estafa emocional a través de una aplicación en donde él sabe que hay mujeres solteras y selecciona a personas que sospecha que son solventes económicamente, para utilizar estos factores y poder llevar a cabo su estafa.

Culpar a las víctimas 

A raíz de que se hizo público el caso de Simon Leviev y de las tres mujeres que estafó emocional y económicamente –aunque no fueron las únicas, según el mismo documental de Netflix– en redes sociales se impulsó un discurso de culpabilidad hacia las víctimas, que incluso abrieron un proyecto de recaudación de fondos en la página GoFundMe para solventar las grandes deudas que Leviev les dejó. 

Entre las reacciones de la gente, acusaban a las mujeres de haberse interesado por lujos y dinero, de ser materialistas y de haber caído en las redes del estafador. 

“Él es muy inteligente (…) Las chicas solo esperaban dinero y más, cuando les “dio” una cantidad doble de dinero, ninguna de las dos dijo ‘eso no es necesario, solo quiero exactamente la cantidad de dinero que te presté’. Así que… bien merecido”, escribió una persona en la cuenta de un usuario con el nombre de Simon Leviev en Facebook. 

“Ayer a la noche vi el estafador de tinder y no puedo creer lo boludo que tenes que ser como para prestarle 40.000 dólares a alguien de tinder que conoces HACE UN MES, te regalaste”, escribió alguien más.

Al respecto, la Dra. Naylú Martínez Nuñez considera que hay un discurso de violencia de género, debido a que muchas personas se burlaron de las mujeres que fueron estafadas. 

“El hecho de que después de la denuncia se hayan sentido criticadas o culpabilizadas, nos tiene que poner a reflexionar sobre lo que estaban pensando estas chicas o lo que estaban pasando en ese momento que las hizo creerse esa historia e intentar ayudar a este hombre”, explica Martínez Nuñez.

Además, indica, hay que pensar en la confianza que las personas otorgan a este tipo de aplicaciones que no pueden comprobar al 100% que la persona detrás de la pantalla sea quien dijo ser.

¿Dónde está la seguridad de las apps de citas? 

Al respecto, Belén Ferreira Brisso, quien es abogada de familia y fundadora de @defensa_mama, que da asesoría y representación jurídica para madres y mujeres, explica en entrevista que poder imputar a Tinder algún tipo de responsabilidad por el caso es difícil, a pesar de que la aplicación promete ser un espacio seguro y confiable para hacer nuevas conexiones. 

“Nos esforzamos por aumentar la seguridad y reducir los riesgos dentro de nuestro ambiente digital. Activamente desarrollamos protocolos de acceso seguros y arquitectura de redes para mantener un control sistemático del acceso interno a las instalaciones, los sistemas y los recursos de Tinder”, se puede leer en las políticas de seguridad de la aplicación. 

Sin embargo, dice Ferreira Brisso, hay mujeres que incluso han muerto por tener citas a través de esta u otra aplicaciones. 

“Detrás de una pantalla se esconden mentes siniestras, que buscan víctimas y de eso es muy difícil que una aplicación lo pueda precaver, tendría que hacerle peritajes psiquiátrico forense a cada uno de sus usuarios para ver si son o no peligrosos, es difícil, y el mundo del internet está lleno de sorpresas”, explica la abogada. 

Por ello, para no caer en estafas como la de Simon Leviev, Ferreira Brisso recomienda a las mujeres que “aunque estén en vínculo de matrimonio y hagan préstamos a sus maridos o parejas lo hagan con documentos notariales, con tal que quede por escrito de que existe una obligación de devolverlo, así puede hacerse más fácil de exigir en tribunales de justicia”. 

Por su parte, la Dra. Naylú Martínez Nuñez recomienda a quienes decidan usar este tipo de aplicaciones poner atención a ciertos factores para evitar estafas emocionales: 

  • Esa persona que está instantáneamente disponible para conocerte en 10 minutos, tiene que levantar una “bandera roja”, ya que puede ser falso.
  • Si estás saliendo con una persona que desde el día 1 te está pintando una historia de derroche económico y lo expone, puede ser una estafa.  “Una persona así lo que quiere es impresionarte, no está interesado en conocerte”, explica la experta. 
  • Quien no te dice exactamente dónde vive, si no está dispuesto a presentarte a tu familia o llevarte a su sitio de trabajo físico, debe ser una alarma. 

Síguenos en

Google News
Flipboard