La primera ronda de reelección

Aunque ya había operado a nivel local desde 2017, y algunos estados tienen incluso dos rondas de aplicación, en 2021 pudimos por primera vez evaluar a quienes ocupan una curul en la Cámara de Diputados a partir de su desempeño. El aprendizaje en esta reforma nos tomará algún tiempo, pues se nos había acostumbrado por décadas a votar por un buen discurso, un jingle o una buena campaña en lugar de hacerlo retrospectivamente. Sin embargo, las experiencias hasta este momento han mostrado que la ciudadanía sabe juzgar si se le da la oportunidad.

A grandes rasgos, y según las leyes electorales, existen cuatro modalidades de reelección, si tomamos en cuenta que tenemos un sistema que combina asientos de mayoría con otros de representación proporcional:

1. Reelección distrito-distrito: es la modalidad más común y la que tiene mayor sentido. En este caso la diputada o el diputado compite para mantenerse en su cargo. Aunque las leyes permiten que alguien pueda competir para un distrito diferente al que tenía, es difícil imaginar que los partidos quieran asumir el costo que les daría ante sus bases.

2. Reelección lista-lista: en este caso, las dirigencias partidistas tienen total control sobre quiénes podrían continuar, según sus intereses. Por ejemplo, dirigentes relevantes según los equilibrios del instituto político, o personas con un perfil técnico altamente especializado, que no ganarían ni en sus secciones. El problema de apostar por una carrera por esta vía es que los grupos de apoyo pueden cambiar en tres años. De hecho, hace unos meses varias personas con larga trayectoria parlamentaria se dieron cuenta de lo anterior a la mala, cuando sus institutos políticos no les permitieron volver a competir por esta vía.

3. Reelección distrito-lista: si bien es posible, dudosamente veremos muchos casos como éste en el futuro. La razón: se enviaría la señal que se buscaría rescatar a alguien que no goza de simpatía alguna en su distrito.

4. Reelección lista-distrito: puede darse el caso que una diputada o un diputado quiera legitimarse en tierra, por lo que puede trabajar su distrito y postularse por éste. Incluso sería del interés del partido apoyar esta iniciativa, si desea ganar votos en esa localidad.

Te sugerimos: La-Lista de elecciones que los partidos quieren impugnar

Con lo anterior en mente, veamos las estrategias que siguieron los partidos para apoyar la relección de sus legisladoras y legisladores.

Al contrario de como había ocurrido en las elecciones locales, hubo un gran interés por parte de quienes integran la actual legislatura por reelegirse. Al principio más de 440 habían declarado su intención, y se presentaron 148 por reelección distrito-distrito, 17 por lista-distrito y 32 por lista-lista.

Lo anterior significa que en 159 distritos donde hubo al menos una candidatura que compitió por su reelección, contando que en seis se presentaron dos personas que competían por la permanencia: una distrito-distrito y la otra lista-distrito. El partido que más apostó por reelegir a sus integrantes fue Morena, seguido por el PT y en tercer lugar el PAN.

¿Qué tantos éxitos tuvieron los partidos? Morena tendrá un grupo significativo de integrantes reelectos en la próxima legislatura, seguido por el PT y el PAN. El resto de los partidos no tuvo mucho interés en impulsar las carreras de sus miembros a partir de la permanencia. Aunque el PES ganó un distrito, no conserva el registro por no alcanzar el 3% de la votación requerido.

¿En qué estados fueron los partidos más exitosos en sus intentos por reelección? Van unas gráficas para ilustrarlo.

La mayoría de las y los diputados reelectos de Morena vienen del Estado de México, seguidos de Veracruz. Por su parte, el PT concentra sus éxitos en la Ciudad de México, el Estado de México, Oaxaca y Puebla. Finalmente, la mayoría de sus miembros de grupo parlamentario reelectos del PAN provienen de Guanajuato, Chihuahua y Querétaro.
El porcentaje de éxito de la reelección, que se incrementará en los próximos días al definirse los asientos de lista, modificará significativamente las dinámicas tanto en el funcionamiento de la Cámara de Diputados, como al interior de los grupos parlamentarios e incluso los partidos políticos nacionales. Exploraremos algunos aspectos en entregas futuras de esta sección, Tácticas Parlamentarias. Nos vemos la próxima semana.