Miles salen en defensa del INE y ‘pisan’ territorio de AMLO

La marcha en defensa del INE agrupó a miles nuevamente, como en noviembre pasado, pero ahora la manifestación le plantó cara al presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), pues los cientos de hombres y mujeres vestidos de rosa con blanco se dieron cita frente a Palacio Nacional, en un Zócalo que por años ha sido territorio de AMLO.

A pesar de que la convocatoria era a las 11:00 horas del domingo, personas de todas las edades llegaron varias horas antes a la plaza pública más importante de la capital para manifestar su rechazo al llamado “plan b” de la reforma electoral.

Al llegar al Zócalo, muchos se encontraron con la sorpresa de que una gran lona con el rostro del exsecretario de Seguridad Pública Genaro García Luna -–recientemente declarado culpable de cinco cargos criminales en EU–, colgaba al lado del Antiguo Palacio del Ayuntamiento, con el logotipo del Partido Acción Nacional (PAN) y la leyenda #GarcíaLunaNoSeToca.

Varios de los participantes en la protesta, indignados de que relacionaran su manifestación con quien fuera el encargado de la seguridad del país en el sexenio de Felipe Calderón Hinojosa, se dispusieron a quitarla jalándola desde abajo, mientras otros miraban asombrados en las calles.

Después de batallar por varios minutos, pudieron retirarla y la sustituyeron por una mucho más pequeña, pero ad hoc con el evento, grabada con la consigna que se repitió durante toda la mañana: el INE no se toca.

“Fuera-López”, se escuchó en distintos momentos de la manifestación, como si lo vieran detrás de las ventanas del Palacio. “No somos uno, no somos cien, pinche gobierno, cuéntanos bien”, aclamóla multitud.

Al final, la cuenta pareció quedar corta: la Secretaría de Seguridad del gobierno capitalino, aliada de AMLO, estimó 90 mil asistentes en lo que calificó como una “manifestación pacífica”.

Las pancartas, también en su mayoría rosas, advirtieron un despojo: “No te metas con mi INE”. Y hasta una dictadura: “Si el INE desaparece, la dictadura aparece”.

Entre tantos, por ahí caminó el empresario Claudio X. González, uno de los convocantes, quien celebró que pusieran pantallas, por lo menos cinco, gigantes, en distintos puntos, principalmente en el Zócalo.

“Es evidente que estaba absolutamente abarrotado el Zócalo, como nunca ha estado, y se desbordó a 5 de Mayo, a 20 de noviembre, y a Madero, y a todas las calles aledañas, Pino Suárez inclusive, no pudo entrar mucha gente al Zócalo. Creo que hicimos bien en tomar previsiones y poner pantallas y bocinas en las calles”, celebró. Aunque el empresario olvida la masiva manifestación contra el desafuero de AMLO, que reunió también a cientos de miles, e incluso una marcha contra la inseguridad en 2008.

Para Claudio X., los ministros deben escuchar a los miles de manifestantes: “Que escuchen muy claro el clamor. Hubo concentraciones en más de 100 ciudades en toda la República y en una docena de ciudades fuera de México. La voz de todos ellos es: declaren inconstitucional el ‘plan b’, porque lo es y porque pone en riesgo serio nuestra democracia y destruiría nuestro INE, y ese es patrimonio de todos los mexicanos”.

Hay quienes asistieron de la alcaldía Miguel Hidalgo, como Laura Barrenechea, quien aseguró: “El INE no se puede mover, o sea no, tenemos que defender al INE… no puedes dejar a 6 mil personas sin trabajo, no se vale, si este hombre ganó por el INE”.

O de Chihuahua, como Héctor Chávez, calificado como el mejor aficionado de México por su asistencia a múltiples mundiales de futbol, quien declaró: “nos quieren quitar la libertad de votar… si aún así, con toda esa cantidad de colaboradores, se hacen fraudes, que lo hemos vivido en elecciones pasadas, imagínate reduciendo de 10 a dos”.

María Alejandra, otra de las miles de asistentes, aseguró que esta marcha fue un mensaje claro para el presidente López Obrador por parte de la ciudadanía que no quiere “regresar a tiempos autoritarios”. 

“Demostramos, sin protagonismos, que somos muchos y pudimos llenar el Zócalo”, dijo a La-Lista. 

Arriba, en el templete, habló primero la expriista Beatriz Pagés y después el ministro en retiro de la Suprema Corte, José Ramón Cossío Díaz, en discursos que no rebasaron los 45 minutos.

Pagés pidió a los ministros de la Corte que “manden al basurero de la historia del plan B” en materia electoral.

Mientras Cossío dijo que confía en que los ministros demostrarán “su talante democrático para preservar la vida democrática del país”.

Al final, entonaron el himno nacional y comenzaron la retirada del Zócalo.

“Vámonos ya a Liverpool a pagar”, suelta uno de los asistentes a quien parece ser su familia.

En su mente llevan grabada la imagen de un Zócalo que ayudaron a llenar, el mismo que por años fue el lugar donde AMLO acostumbró acudir a sus masas, donde hoy no hubo vítores para el presidente sino gritos de “¡fuera!”.