Pese al descenso en cifra de hospitalizados, continuan los focos rojos en CDMX

A pesar del gran deceso en el número de hospitalizados por Covid-19 en la Valle de México durante las últimas semanas, luego del segundo brote por las fiestas decembrinas, los focos de alarma aún continúan en la capital y sus alrededores, ya que el nivel de enfermos internados está ligeramente debajo del primer pico que se dio en mayo del 2020. Además, la relajación de las medidas sanitarias por la vacunación complicaría el panorama.

De acuerdo con datos del gobierno de la Ciudad de México, la segunda ola de contagios de coronavirus alcanzó un tope de 10,072 hospitalizados, lo cual estaba debajo de la capacidad máxima de 11,642 camas generales que tiene el sistema de salud de esta área.

Al último reporte de este lunes, la ocupación hospitalaria en la CDMX es del 50.8%, es decir, hay un total de 4,391 personas en nosocomios por Covid-19, mientras que 5,891 individuos se encuentran en la misma situación, pero en toda la Zona Metropolitana del Valle de México.

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Aunque hubo una disminución de más del 50% en los enfermos hospitalizados en la capital, este número es similar al máximo que se alcanzó el 31 de mayo de 2020, cuando en el primer pico de la pandemia tuvo a 4,444 personas en nosocomios.

Después de dos cierres por el alto número de contagios, el gobierno de la CDMX lanzó el programa reactivar sin arriesgar, donde hasta la fecha se permite la apertura de restaurantes al 30% de aforo en interiores con horario limitado, así como de cines, teatros y museos con 20% de capacidad máxima, al igual que los centros comerciales y tiendas departamentales.

Tras un año de observar el comportamiento de la pandemia, la reapertura de actividades económicas tiene poco efecto en provocar contagios exponenciales de Covid-19, sin embargo las reuniones y las fiestas son el mayor riesgo, alertó Alberto Pantoja Melendez, médico epidemiólogo.

En entrevista para La-Lista, el académico de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), señaló que si se controlan los grandes puntos de congregación como centros comerciales, cines y tiendas pueden evitarse los contagios masivos, pero es en las aglomeraciones privadas es donde se esparce con más facilidad el virus.

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En ese sentido, detalló que el mejor ejemplo de ello fueron las celebraciones decembrinas, ya que esto provocó una segunda ola de contagios mucho más grande que la primera.

“Es cierto que estamos (el nivel de hospitalizados) como estábamos al inicio del verano pasado, en epidemiología sabemos que las segundas olas son más importantes que las primeras”, agregó.

Las vacunas y nuevas cepas

Ante el inicio de la campaña de vacunación contra el Covid-19 en personal médico, adultos mayores y profesores, hay casi 2 millones de personas que han recibido su primera dosis. Aunado a ello, el 25% de los mexicanos han estado en exposición al coronavirus, por lo que cuentan con inmunidad para esta enfermedad, según los datos preliminares de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición Covid-19.

Con dicho panorama, Pantoja Melendez aseveró que hay una cantidad importante de gente que funciona como barrera contra el virus, lo cual no lo inhibe pero sí provoca que se atenúe la dispersión, sin embargo esto es así bajo las cepas conocidas de coronavirus que circulan desde hace un año en México.

Por ello, el epidemiólogo alertó que el riesgo de las nuevas variantes de esta enfermedad es que provoquen una menor efectividad o anulen la capacidad inmune de las vacunas

“Ya están las nuevas cepas aquí, las cepas más fuertes suplen a las débiles. ¿Qué tanto se distribuyen?, eso está en veremos en la población”, añadió.

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Hasta el pasado 25 de febrero, la Secretaría de Salud federal informó que se tenía conocimiento de 6 casos de la variante de Covid-19 proveniente de Reino Unido, un enfermo con la cepa de Brasil, 10 con la modificación del virus de Estados Unidos y ninguno de la cepa sudafricana.

A inicios de febrero de este año, el ministro de salud de Sudáfrica, Zweli Mkhize, anunció la suspensión del uso de la vacuna de AstraZeneca, ya que ofrecía una protección limitada contra casos leves de la enfermedad causada por la variante 501Y.V2 del coronavirus.

En ese sentido, el experto de la máxima casa de estudios insistió en la posibilidad de un escenario donde la población relaje las medidas sanitarias por la aplicación de las vacunas, se dispersen las variantes extranjeras de esta enfermedad y los biológicos no tengan la efectividad esperada ante ello.

“El tiempo del sol ayuda a disminuir la presencia de los virus, y con la vacunación estaríamos esperando entrar a una meseta. Lo que todos estamos temerosos en epidemiología es que genere una relajación en la pandemia, y otra vez empiecen las reuniones porque eso es lo que genera los brincos importantes”, subrayó.

“Podemos empezar a regresar a la vida normal con medidas de precaución, si no va a ser un cuenta de nunca acabar. Las vacunas hasta ahorita evitan los cuadros graves, no los contagios”, remarcó.