Una persona segura de lo que quiere puede resultar bastante excitante: ‘La Fatshionista’
La podcaster y activista Priscila Arias habla acerca del empoderamiento detrás de la masturbación.
La podcaster y activista Priscila Arias habla acerca del empoderamiento detrás de la masturbación.
Hablar de sexo se vuelve algo más cotidiano, pero hacerlo acerca de la masturbación es algo que todavía tiene un grado de represión a nivel social, tal como lo plantea Priscila Arias, mejor conocida como “La Fatshionista”.
En el marco del mes de la masturbación, así como del lanzamiento de la segunda temporada de ¡Guácala! Qué rico a través de Podimo, la activista contó que todavía hay timidez a la hora de abordar este tipo de temas, pero gracias a la interacción con su comunidad comenzó a hacerlo de una forma más tranquila.
“Hablar de sexualidad y masturbación es tan fácil como te relajes”, dijo la podcaster mexicana, quien añadió que cuando la persona le quiere meter más información, se estresa o involucran aspectos morales o políticamente correctos, la conversación se complica.
“La Fatshionista” contó que ¡Guácala! Qué rico comenzó gracias a la conversación, la curiosidad y el intercambio con sus seguidoras, pues cuando había cosas que desconocía porque no le habían pasado o bien no había experimentado, le contaban sus experiencias.
Reconoció que si bien las nuevas generaciones normalizan más este tipo de conversaciones, su objetivo a través de su ¡Guácala! Qué Rico es que haya más conversación en torno a temas de sexualidad en las generaciones que no son tan contemporáneas a la actualidad.
En su experiencia contó que las mujeres viven una represión sexualidad porque dentro de un ciclo de discriminación no es tan normal la libertad al placer.
En la cotidianidad es más fácil y común escuchar a varones sobre este acto sexual, así como la forma en que lo hacen. En su consideración esto se debe a que entre ellos esto los haría más viriles, lo que fomentaría los pensamientos machistas que se refuerza a partir de la pornografía.
“Entonces tú no puedes sentir eso y lo tachan de qué cochinada. Tampoco lo puedes hablar, no tienes opciones de comentarlo ni con tus amigas”, dijo Priscila Arias. Agregó que gracias a que se acercó a mujeres más liberales, así como integrantes de la comunidad LGBT+, fue que recibió la ayuda para expandir su panorama respecto a tópicos como juguetes sexuales y sexo anal.
“Y fue cuando dije, ‘¿Por qué no se sabe esto?, ¿por qué no se platica normalmente entre personas heterosexuales tan más abiertamente?”, dijo.
“La Fatshionista” consideró que las personas heterosexuales traen unos “rollos muy heavys” y suelen discriminar, inclusive dentro del sector médico con personas que tienen situaciones de cromosomas u hormonales que se salen de la norma del binarismo.
“A mi novio le dijeron: ‘Como tú no produces hormonas masculinas nunca vas a poder tener sexo‘. Esa es una falacia porque las áreas erógenas no tienen nada que ver con ello, el placer está separado. Él lo descubrió conmigo porque yo no soy coitocentrista, no tengo problemas en que digamos no tengamos penetración y qué mejor que hacerlo con alguien que amo. Así descubrió que sí tiene placer, hasta sus 35 años logró realmente disfrutar de su cuerpo y dejar de avergonzarse de él“, contó.
Arias consideró que la masturbación es una de las mejores formas de autocuidado y de autoconocimiento, pues así uno mismo descubre lo que le gusta sin que nadie le juzgue.
“Estás tú, y nadie más, y puedes pensar en Ryan Gosling o Jack Black cantando ‘Peaches, peaches, peaches’ y nadie te va a juzgar o decir ‘Guácala, qué horror’, pues es lo que te prende y te guste. Tócate como quieras porque es tu cuerpo, ¿qué va a ser más consensuado que ese tiempo que te des para ti?”, dijo.
Comentó que “la masturbación te empodera demasiado en la medida en la que justo avanzas en hacerlo cada vez más porque es lo que te gusta y aprendes cada cuándo te gusta más. La masturbación está increíble porque tú puedes ser parte del juego y si desde un principio te muestras como una persona segura de lo que quiere, creo que puede resultar bastante excitante“.
La activista consideró que es gracias a las redes sociales que se empezó a hablar de sexo y que con ello surgió todo un fenómeno con el que se pudieron concebir diferentes vidas sexuales y a empoderar a personas pues al ves a alguien con características similares a las tuyas haciendo algo que pensabas que estaba negado para ti, se te abre un mundo de posibilidades.
“La Fatshionista” dijo que la diversidad que hay dentro de los podcasters permite que todas las personas tengan opciones. Los tímidos que apenas empiezan en el mundo de la sexualidad pueden conectar así con ¡Guácala! Qué rico, o bien gente que quiera estar más especializada en estos temas se puede acercar a Sexópolis o Divulvando mitos, con Paulina Millán o Laura Salazar, respectivamente.
Es así que a su consideración ya no debiera haber motivos por los cuales censurarse respecto a estos temas. “Si ahorita mi tía dijera ‘¡Ay, masturbación!’, le diría: ‘Ay, tía, bienvenida al 2023, toma, aquí hay un juguetito’, porque ya ahorita en vez de que me sienta avergonzada, para mí sería como un cómo crees que tú no estás hablando de esto”, finalizó.
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