El mayor productor de carne del mundo pagó un rescate de 11 mdd por ciberataque
Un trabajador de JBS esparce carne salada para secarla y empacarla en una planta en Santana de Parnaíba, Brasil. Foto: Paulo Whitaker / Reuters

JBS, el mayor procesador de carne del mundo, pagó un rescate de 11 millones de dólares después de que un ciberataque cerró las operaciones, incluidos mataderos en Estados Unidos, Australia y Canadá.

Si bien la mayoría de sus operaciones se han restablecido, la compañía con sede en Brasil dijo que esperaba que el pago evitara más complicaciones, incluido el robo de datos.

Hay información de que JBS, que suministra más de una quinta parte de toda la carne de res en Estados Unidos realizó el pago en bitcoin.

“Esta fue una decisión muy difícil de tomar para nuestra empresa y para mí personalmente”, dijo el director ejecutivo de JBS, André Nogueira. “Sin embargo, sentimos que esta decisión tenía que tomarse para prevenir cualquier riesgo potencial para nuestros clientes”.

El productor de carne se vio obligado a detener todo el sacrificio de ganado en sus plantas de Estados Unidos por un día la semana pasada, en una medida que amenazaba con interrumpir las cadenas de suministro de alimentos y provocar una mayor inflación de los precios de los alimentos en el país, donde la escasez de mano de obra, la alta demanda y los paros relacionados con el Covid están pasando factura.

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El ataque también interrumpió las operaciones de la compañía en otros países, incluida Australia, aunque de forma menos grave.

JBS, que gasta más de 200 mdd en tecnologías de información y emplea a más de 850 especialistas en el área, dijo que el FBI describió al grupo de ciberdelincuentes que llevó a cabo el ataque como “uno de los más especializados y sofisticados” del mundo. Los funcionarios de la Casa Blanca dijeron la semana pasada que la organización criminal responsable probablemente tenía su sede en Rusia.

Bloomberg nombró al grupo involucrado como REvil, también conocido como Sodinokibi, una banda cibernética con vínculos rusos. Este año, el grupo afirmó haber robado planos de los últimos productos de Apple durante el pirateo de una empresa de hardware taiwanesa que suministra al fabricante de iPhone. REvil se jacta de sus hazañas en un blog de la web oscura llamado Happy Blog.

Sin embargo, hasta el momento ninguna organización se ha atribuido la responsabilidad del ataque en contra de JBS.

El ataque de ransomware contra el productor de carne es el último en devastar temporalmente las operaciones de una empresa estadounidense. El mes pasado, un ataque a Colonial Pipeline, el oleoducto de combustible más grande del país, interrumpió la distribución de combustible en el sureste de Estados Unidos durante varios días.

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Colonial Pipeline también pagó un rescate de 4.4 mdd, pero un grupo de trabajo especializado en ransomeware creado por la administración de Biden recuperó la mayor parte del pago realizado en criptomonedas.

El exdirector de la Agencia de Seguridad de Infraestructura y Ciberseguridad de Estados Unidos, Christopher Krebs, advirtió que “todos están en riesgo” y son vulnerables a las bandas de piratas informáticos internacionales. Los sistemas de gobierno local de EU figuran entre las organizaciones que han sido objeto de ataques recientes.

JBS dijo que encargó una investigación a externos, pero una investigación preliminar había confirmado que ninguno de los datos de su empresa, cliente o empleado estuvo en riesgo como parte del ataque.

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