Samuel L Jackson critica los Oscar por marginar a Poitier y perder su mística

Samuel L. Jackson criticó la ceremonia de los premios Oscar de este año por su gestión respecto al fallecimiento del pionero actor Sidney Poitier, así como por sus intentos de llegar a un público más extenso ampliando el grupo de presentadores.

En conversación con el periódico Los Angeles Times, Jackson comentó que estaba “todavía un poco molesto por el hecho de que el mejor actor que hemos tenido en Hollywood haya muerto y le hayan dado, qué, 10 malditos segundos. No. Debería haber sido toda una sección dedicada a Sidney Poitier”.
Jackson hizo referencia a la sección in memoriam de este año del programa, la cual comenzó con Poiter y le dedicó 40 segundos.

Poitier también fue uno de los tres actores favoritos de la industria –los otros son Ivan Reitman y Betty White– cuyo trabajo fue homenajeado en una sección especial con canciones y bailes.

Sin embargo, Jackson no quedó impresionado y comentó que el legado de Poitier era lo suficientemente importante como para que el programa hubiera resultado muy diferente sin su influencia.

“La razón por la que Will Packer produce este programa es por este hombre. La razón por la que Will Smith ganó un Oscar es por este hombre. La razón por la que Denzel (Washington), la razón por la que yo, la razón por la que Danny (Glover), la razón por la que todos ganamos, es este hombre, y se merece más de 10 malditos segundos de su tiempo, especialmente por lo que significó, no solo para nosotros, sino para Hollywood”.

“Le dio dignidad a Hollywood. Él fue la maldita realeza de Hollywood. Y no recibió lo que se merecía de aquel maldito programa”.

Jackson recibió un Oscar honorífico de manos de Washington en los Premios de los Gobernadores, celebrados dos días antes de la ceremonia principal. El programa no fue transmitido por televisión, y solo se editaron breves momentos en la transmisión de la noche del domingo, en la que también se incluyeron discursos editados de los ganadores de ocho premios “técnicos”, entregados antes del programa principal.

Jackson comparó el trato dado a estos ganadores, junto con sus compañeros ganadores honoríficos Liv Ullmann y Elaine May, con el generoso tiempo asignado a los nuevos esfuerzos encaminados a reconocer las películas populares con premios elegidos por el público.

Cuando le preguntaron si le parecía bien que los patinadores y snowboarders Tony Hawk, Shaun White y Kelly Slater fueran invitados a presentar la celebración de los 60 años de James Bond, Jackson respondió: “¡Dios! ¡No! Ellos tienen su espectáculo. Tienen los ESPY. Que vayan a hacer eso. Esta es la noche en la que Hollywood celebra el maldito Hollywood”.

Y continuó: “Aquello que solíamos tener cuando era joven, viéndolo y preguntándome, ‘¿Qué voy a decir cuando reciba el mío?’ era el glamour de todo ello, la extravagancia, la mística que es Hollywood. Algo de eso ha desaparecido”.