Sri Lanka: el presidente en funciones declara el estado de emergencia

El presidente en funciones de Sri Lanka, Ranil Wickremesinghe, declaró el estado de emergencia en un momento en el que su administración intenta aplacar el descontento social y afrontar la crisis económica que asola a la nación insular.

“Es conveniente proceder así, en interés de la seguridad pública, la protección del orden público y el mantenimiento de los suministros y servicios esenciales para la vida de la comunidad“, indicó un aviso gubernamental publicado en las últimas horas del domingo.

Wickremesinghe anunció el estado de emergencia la semana pasada, después de que el presidente Gotabaya Rajapaksa huyera del país para escapar de un levantamiento popular contra su gobierno.
Sin embargo, se desconocía si se había retirado esa orden o si había expirado, y si Wickremesinghe volvió a dictarla en calidad de presidente en funciones, tras haber tomado posesión de su cargo el 15 de julio. Un vocero de la oficina de Wickremesinghe no respondió la solicitud de comentarios formulada por Reuters.

El gobierno aún no ha anunciado las disposiciones legales específicas relativas al último estado de emergencia, no obstante, las normas de estado de emergencia anteriores han sido utilizadas para desplegar a los militares para arrestar y detener a las personas, registrar la propiedad privada y aplacar las protestas públicas.

La capital comercial del país, Colombo, permaneció en calma en la mañana del lunes, con el tránsito y los peatones en las calles.

Bhavani Fonseka, investigador principal del Centre for Policy Alternatives, señaló que la declaración del estado de emergencia se estaba convirtiendo en la respuesta por defecto del gobierno.

“Esto ha demostrado ser ineficiente en el pasado”, dijo Fonseka a la agencia de noticias Reuters.
La renuncia de Rajapaksa fue aceptada por el parlamento el viernes. Voló a las Maldivas y posteriormente a Singapur después de que cientos de miles de manifestantes antigubernamentales salieran a las calles de Colombo hace una semana y ocuparan su residencia oficial y sus oficinas.

El parlamento de Sri Lanka se reunió el sábado para dar inicio al proceso de elección de un nuevo presidente, y llegó un cargamento de combustible para proporcionar cierto alivio a la nación afectada por la crisis.

Wickremesinghe, un aliado de Rajapaksa, fue designado por el partido gobernante como su candidato para ser el próximo presidente, sin embargo, los manifestantes también desean que se vaya, lo cual hace prever nuevos disturbios en caso de que sea elegido.

Wickremesinghe fue nombrado presidente interino el viernes, después de ocupar el cargo de manera informal desde el miércoles, al tiempo que el anuncio era recibido con ira y frustración en las calles de Colombo.

Wickremesinghe, que actualmente ha sido primer ministro en seis ocasiones, está acusado de proteger y apoyar la dinastía de la familia Rajapaksa durante años, protegiéndola de las acusaciones de corrupción y permitiendo su regreso al poder.

Su decisión de aceptar ser primer ministro interino hace dos meses fue considerada por muchas personas como la razón por la que Rajapaksa permaneció en el poder durante más semanas de las que habría permanecido en caso contrario.

Se ha manifestado en múltiples ocasiones la frustración pública respecto a Wickremesinghe, desde el incendio de su residencia privada hasta la irrupción de manifestantes en sus oficinas el miércoles.
Wickremesinghe será el candidato del partido gobernante de los Rajapaksas, el Sri Lanka Podujana Peramuna (SLPP), un partido que sigue contando con el mayor número de escaños en el parlamento.

Tiene muchas posibilidades de ser elegido tras la votación de los diputados en el parlamento, la cual está prevista para el próximo martes o miércoles.

La candidatura de Wickremesinghe incluso parece haber provocado divisiones en el SLPP. El presidente del partido, GL Peiris, envió una carta al secretario general del partido en la que expresó su “asombro y total desconcierto” por la declaración de que respaldaría a Wickremesinghe como candidato presidencial.

No obstante, Wickremesinghe se enfrentará a varios candidatos en la votación presidencial secreta que se llevará a cabo la próxima semana, entre ellos el líder de la oposición, Sajith Premadasa –quien prometió asegurarse de que “nunca jamás se produzca una dictadura electoral” y procesar a los dirigentes que “saquearon el país”– y otro político del SLPP, Dullas Alahapperuma, lo cual podría dividir el voto del partido gobernante.

El exjefe del ejército Sarath Fonseka también ha manifestado su intención de postularse.