Éxodo de Twitter: la empresa se enfrenta a un futuro turbio mientras los principales directivos huyen del nido

Twitter se enfrenta a una nueva incertidumbre en medio de un creciente éxodo de altos directivos y de informes que indican que en pocos días se podrían producir despidos masivos y cambios importantes en la plataforma.

Los directores de publicidad y mercadotecnia de la empresa recientemente anunciaron su salida, así como la directora de personal y diversidad, el director general de tecnología básica, el jefe de producto y el vicepresidente de ventas globales. La semana pasada, Elon Musk despidió al CEO, Parag Agrawal, al director de finanzas, Ned Segal, y a la directora de asuntos legales y política, Vijaya Gadde, poco después de asumir el control de la empresa.

Sarah Personette, la directora de clientes y jefa de publicidad que dijo que deseaba trabajar con Musk, publicó en Twitter el martes que había renunciado, lo cual aumentó la incertidumbre de los anunciantes respecto a la forma en que cambiará la empresa de redes sociales bajo su nuevo propietario.

Dalana Brand, la directora de personal y diversidad, anunció el martes en una publicación de LinkedIn que también presentó su renuncia la semana pasada. El director general de tecnología básica, Nick Caldwell, confirmó su salida en Twitter, cambiando la biografía de su perfil a “exejecutivo de Twitter” en la noche del lunes.

La directora de mercadotecnia, Leslie Berland, el director de producto de Twitter, Jay Sullivan, y su vicepresidente de ventas globales, Jean-Philippe Maheu, también dejaron la empresa, informó a la agencia de noticias Reuters una persona con conocimiento del asunto. Se desconoce si renunciaron o si se les pidió que renunciaran.

Los informes sobre los recortes de personal surgieron incluso antes de que Musk tomara oficialmente el mando. El último informe de la agencia Bloomberg indicaba el miércoles que el nuevo propietario multimillonario de Twitter recortaría alrededor de 3 mil 700 puestos de trabajo, lo que equivale a la mitad del personal de Twitter, con el objetivo de reducir costos, y que también pediría a los trabajadores que regresaran a la oficina. El medio también informó que Musk planeaba comenzar a cobrar por la verificación de la “insignia azul” de Twitter a partir de la próxima semana.

Varios empleados comentaron a Reuters que siguen recibiendo poca información sobre el futuro de la empresa. Twitter canceló una reunión de verificación la semana pasada, así como una reunión con todo el personal que estaba programada para el miércoles.

Mientras tanto, el equipo de Musk planea reunirse con los anunciantes en Nueva York la próxima semana, ya que los clientes de la empresa, cada vez más inquietos, alertan sobre la posibilidad de que aparezcan contenidos perjudiciales junto a sus anuncios.

El contenido de odio ha aumentado drásticamente desde la adquisición de Musk. El uso de la palabra “N” ha aumentado en casi un 500% en Twitter, según datos del Network Contagion Research Institute, entidad que identifica “amenazas cibersociales”.

Una coalición integrada por más de 40 organizaciones de defensa de los derechos humanos, entre ellas la NAACP y Free Press, envió el martes una carta abierta a los 20 principales anunciantes de Twitter, pidiéndoles que retiraran sus anuncios en caso de que Musk eliminara la moderación de contenidos en la plataforma.

Mediabrands, una unidad del holding empresarial de publicidad IPG, aconsejó a sus clientes que pusieran en pausa su publicidad en Twitter durante la próxima semana hasta que la empresa ofrezca mayores detalles sobre sus planes para proteger la confianza y la seguridad dentro de la plataforma, informó Reuters, según una fuente familiarizada con el asunto. IPG trabaja con grandes anunciantes como Coca-Cola.

Musk ha intentado tranquilizar a los anunciantes. “El compromiso de Twitter con la seguridad de las marcas no ha cambiado”, escribió en Twitter el lunes.

Anteriormente indicó que revertiría el veto que Twitter impuso a Donald Trump, quien fue expulsado debido a la preocupación de que pudiera incitar a más actos de violencia tras la insurrección en el Capitolio de Estados Unidos el año pasado. Sin embargo, esta semana, Musk indicó que no se restablecerían las cuentas bloqueadas hasta, al menos, después de las elecciones de medio mandato en Estados Unidos.