DeSantis amenaza con parque temático rival o una cárcel cerca de Disney

El gobernador republicano Ron DeSantis reveló la última medida de represalia contra Disney por pronunciarse en contra de su ley “no digas gay”: construir una nueva prisión estatal junto a los parques temáticos de la empresa en el centro de Florida.

El gobernador republicano presentó la propuesta en una conferencia de prensa convocada precipitadamente el lunes a la hora del almuerzo, en la que expuso las medidas que adoptaría la legislatura estatal para intentar recuperar el control sobre el mayor empleador privado de Florida.

Esta medida es la última de una disputa que comenzó en marzo de 2022, cuando Bob Chapek, el entonces director ejecutivo de Disney, se pronunció en contra de un proyecto de ley que limitaba el debate sobre la sexualidad y la identidad de género en los salones de clase de las escuelas primarias de Florida, conocida como la ley “no digas gay”.

DeSantis intentó apoderarse de Disney en febrero mediante el despido de la junta de control de la empresa y la instauración de una junta elegida personalmente compuesta por aliados republicanos, entre ellos uno que ayudó a redactar el proyecto de ley de educación.

Sin embargo, el gobernador de extrema derecha, un probable candidato a la nominación presidencial de su partido para 2024, se vio humillado en marzo cuando se dio a conocer que la junta saliente, en un último acto de desafío, llegó a un acuerdo para ceder el control a la propia empresa.

Molesto por esa medida, DeSantis denunció el lunes el acuerdo como una “farsa” sin fundamento jurídico, y anunció una nueva medida que devolvería el control del distrito especial que es sede de Disney World a una junta estatal de supervisión dirigida por personas designadas por el gobernador.

Entre otras cuestiones, las nuevas medidas incluyen ceder al estado la autoridad para inspeccionar las atracciones y el transporte de los parques temáticos, elevar la carga fiscal de Disney y otorgar a la junta recién constituida el poder de decidir cómo urbanizar los terrenos adyacentes a los parques temáticos de Disney.

DeSantis insinuó que la nueva junta podría emprender otras acciones relacionadas con las 10 mil 926 hectáreas que Disney posee en el centro de Florida, como construir un parque estatal, un parque temático rival o una prisión. “Creo que las posibilidades son infinitas”, comentó DeSantis.

Los críticos no tardaron en condenar las últimas propuestas de DeSantis. Brandon Wolf, secretario de prensa del grupo Equality Florida, comentó que se trataba de una “muestra de ego verdaderamente desequilibrada”.

La representante estatal Anna Eskamani señaló que algunas zonas del sur de Florida seguían bajo el agua tras las inundaciones registradas la semana pasada mientras DeSantis creaba “más drama Disney”.