Israel presionado para investigar las muertes causadas por ayuda alimentaria en Gaza
Un grupo de personas llora en el hospital Al Shifa de la ciudad de Gaza a un palestino muerto en un incidente en el que las fuerzas israelíes abrieron fuego contra una multitud en un punto de distribución de ayuda el jueves. Foto: AFP/Getty Images

Ante las muertes por ayuda alimentaria, Francia pide una “investigación independiente” y Alemania afirma que el ejército de Israel debe dar explicaciones tras la muerte de más de 100 palestinos en Gaza.

Israel se enfrentaba a una creciente presión internacional para que se lleve a cabo una investigación tras la muerte de más de 100 palestinos en Gaza el jueves, cuando multitudes desesperadas se congregaron en torno a camiones de ayuda y las tropas israelíes abrieron fuego.

Francia pidió una “investigación independiente” sobre las circunstancias del desastre, y Alemania dijo que el ejército israelí debe “explicar plenamente” lo sucedido.

Emmanuel Macron, el presidente francés, dijo que los civiles habían sido “blanco de los soldados israelíes” y pidió un inmediato alto al fuego.

No te pierdas: Hamás responde al plan de Israel con propuesta en tres fases para poner fin a la guerra en Gaza

“Profunda indignación ante las imágenes procedentes de Gaza en las que civiles han sido blanco de soldados israelíes. Expreso mi más enérgica condena a estos tiroteos y pido verdad, justicia y respeto al derecho internacional”, publicó en X.

“La situación en Gaza es terrible. Hay que proteger a toda la población civil. Debe aplicarse inmediatamente un alto al fuego para permitir la distribución de ayuda humanitaria.”

Un portavoz militar israelí afirmó que “decenas” de personas murieron aplastadas o atropelladas por camiones cuando intentaban escapar, aunque también dijo que las tropas de las Fuerzas de Defensa de Israel habían “abierto fuego” tras sentirse amenazadas.

Dijo el almirante Daniel Hagari: “Decenas de residentes de Gaza murieron aplastados o atropellados por camiones palestinos cuando intentaban escapar. Una fuerza de las FDI que estaba asegurando la zona pasó junto a la multitud y abrió fuego sólo cuando se encontró en peligro, cuando la turba avanzó hacia ella de forma que puso en peligro a la fuerza.”

Y añadió: “Contrariamente a las acusaciones, no disparamos contra las personas que buscaban ayuda y no disparamos contra el convoy humanitario ni desde tierra ni desde el aire.”

En una sesión informativa anterior, un portavoz israelí dijo que los soldados dispararon contra un pequeño grupo que se alejó de los camiones y amenazó un puesto de control.

En medio de diferentes versiones sobre lo ocurrido, Annalena Baerbock, ministra alemana de Asuntos Exteriores, se mostró conmocionada por las informaciones sobre el incidente. “La gente quería productos de primera necesidad para ellos y sus familias y terminaron muertos. Los informes procedentes de Gaza me conmocionan. El ejército israelí debe explicar plenamente cómo pudo producirse el pánico masivo y el tiroteo”, escribió en las redes sociales.

La Casa Blanca calificó de “tremendamente alarmante” la muerte de 112 personas desesperadas en busca de alimentos para sus familias.

El portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, dijo a los periodistas que Estados Unidos estaba “buscando urgentemente información adicional sobre lo que ocurrió exactamente” y que no se conocían todos los hechos. Washington “presionará para obtener respuestas”, afirmó.

Riyad Mansour, embajador palestino ante la ONU, declaró que, en una sesión de emergencia a puerta cerrada del Consejo de Seguridad de la ONU, Estados Unidos había bloqueado una resolución presentada por Argelia en la que se afirmaba que las muertes se debían “a la apertura de fuego por parte de las fuerzas israelíes”. De los 15 miembros del Consejo, “14 apoyaron el texto”, declaró Mansour tras la reunión.

Y añadió: “Esta atroz masacre es testimonio de que mientras el Consejo de Seguridad esté paralizado y (se emitan) vetos, le está costando la vida al pueblo palestino”. Washington ha bloqueado en tres ocasiones las resoluciones del Consejo de Seguridad en favor de un alto al fuego en Gaza.

El viernes, Stéphane Séjourné, ministro francés de Europa y Asuntos Exteriores, declaró a France Inter: “Pediremos explicaciones, y tendrá que haber una investigación independiente para determinar lo ocurrido. Francia llama a las cosas por su nombre. Esto se aplica cuando designamos a Hamás como grupo terrorista, pero también debemos llamar a las cosas por su nombre cuando hay atrocidades en Gaza”.

Si una investigación concluyera que los disparos israelíes fueron un crimen de guerra, “entonces obviamente esto se convierte en un asunto para el poder judicial”, dijo.

El ministro español de Asuntos Exteriores declaró que los “inaceptables” sucesos subrayaban la “urgencia de un alto al fuego”, mientras que el responsable de Asuntos Exteriores de la Unión Europea, Josep Borrell, expresó su horror ante “otra carnicería más entre los civiles de Gaza desesperados por recibir ayuda humanitaria”.

Arabia Saudita condenó enérgicamente lo que calificó de “ataque selectivo” contra civiles desarmados, mientras que Kuwait y Emiratos Árabes Unidos también emitieron condenas.

Qatar advirtió de que el “desprecio de Israel por la sangre palestina… allanará el camino para un ciclo de violencia en expansión”.

Las autoridades de salud de Gaza dijeron que al menos 112 personas murieron y 280 resultaron heridas después de que las fuerzas israelíes abrieran fuego contra un punto de distribución de ayuda.

Según el ejército de Israel, se produjo una “estampida” cuando miles de palestinos desesperados, en Gaza, rodearon un convoy de 38 camiones de ayuda, lo que causó decenas de muertos y heridos, entre ellos algunos que fueron atropellados por los camiones.

Las víctimas del jueves se sumaron a un número de muertos en Gaza que, según el Ministerio de Salud dirigido por Hamás, superaba los 30 mil, principalmente mujeres y niños.

La guerra comenzó tras el ataque de Hamás contra el sur de Israel el 7 de octubre, que se saldó con la muerte de casi mil 200 personas, en su mayoría civiles. Unas 250 personas fueron tomadas como rehenes.

Traducción: Ligia M. Oliver

No te pierdas: Combatir desperdicio para combatir hambre: bancos de alimentos en Brasil

Síguenos en

Google News
Flipboard