Museo Picasso expondrá obra de Françoise Gilot, expareja a quien Pablo intentó destruir

La expareja de Pablo, Françoise Gilot, quien fue rechazada y castigada en Francia tras separarse de Picasso, tendrá un espacio en un museo de París dedicado exclusivamente a su arte.

Cuando la artista Françoise Gilot abandonó a Pablo Picasso tras una larga y turbulenta relación, él le dijo que no sería nada sin él y se propuso destruir su carrera.

Gilot recordó más tarde cómo su antiguo amante le dijo: “¿Crees que la gente se interesará por ti? No lo harán nunca, de verdad, sólo por ti… Sólo será una especie de curiosidad que sentirán por una persona cuya vida tocó la mía tan íntimamente”.

Tras la ruptura, Picasso y sus amigos influyentes en los círculos artísticos e intelectuales de Francia libraron lo que ella describió como una “guerra” contra ella, obligándola finalmente a abandonar Francia y establecerse en Estados Unidos, donde reconstruyó su vida y su carrera y siguió pintando hasta su muerte en 2023, a los 101 años.

Sin embargo, al menos en Francia, su éxito siempre ha estado eclipsado por el que está considerado uno de los artistas más importantes del siglo XX.

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Ahora, el Museo Picasso de París intentará enmendar en parte este error cuando inaugure su nueva exposición permanente de obras del maestro, que incluye una sala con trabajos de Gilot.

“No se presenta como musa o inspiración de Picasso. No hay ninguno de los cuadros que él hizo de ella ni fotografías; en su lugar se concentra en Françoise Gilot como artista”, dijo un portavoz del museo.

“Es la primera vez que se hace y ha suscitado mucho interés”.

Gilot conoció a Picasso en un café parisino en 1943, en plena ocupación nazi. Ella tenía 21 años y él 61. Ferozmente independiente, Gilot hizo lo que ninguna de las muchas otras mujeres de Picasso se atrevió a hacer: lo abandonó, llevándose a sus dos hijos, Claude y Paloma.

Picasso destruyó sus posesiones, incluidas las cartas que Matisse le enviaba, exigió a la galería Louise Leiris que dejara de representarla e insistió en que dejara de ser invitada a exponer en el prestigioso Salon de Mai.

En muchos aspectos, Francia trató a Gilot aún peor que Picasso. Mientras Gilot presentaba tres demandas para impedir la publicación de su biografía de 1964, Vida con Picasso, 80 destacados intelectuales y artistas firmaban una petición en el periódico comunista Les Lettres Françaises pidiendo la prohibición del libro. El libro vendió un millón de ejemplares y se tradujo a 16 idiomas, pero el rechazo de su obra fue lo que ella describió como una “muerte civil”.

Diez años después de una renovación, el Museo Picasso, que alberga la mayor colección del mundo de la obra de Picasso, ha instalado una nueva exposición permanente en 22 salas repartidas en tres plantas y que incluye cerca de 400 pinturas, esculturas, cerámicas, dibujos y grabados.

La exposición Françoise Gilot, en la sala 17 de la tercera planta, es temporal, pero se espera que permanezca in situ durante un año.

Cécile Debray, presidenta del Museo Picasso, declaró que a Gilot “se le está dando el lugar que le corresponde como artista”.

Debray añadió: “En Francia, Françoise Gilot es conocida como la pareja de Picasso, mientras que, en Estados Unidos, donde vivió después de 1970, se le considera artista y pintora, por lo que tenemos aquí una sala en la que se exponen sus cuadros”.

Joanne Snrech, conservadora del Museo Picasso, dijo que era importante incluir una muestra de los cuadros de Gilot para disipar la idea de que era “sólo la pareja de Picasso”.

“Fue una artista por derecho propio, con una carrera muy larga en la que su obra fue evolucionando. Lo que mostramos aquí es la diversidad de su obra”, dijo Snrech.

Y añadió, “Es cierto que tras la publicación de su libro sobre su vida con Picasso fue rechazada por muchos miembros de la comunidad artística francesa. Pensamos que era importante mostrar no sólo el lugar que ocupó en la vida de Picasso, sino también que fue mucho más que sólo su pareja. Al fin y al cabo, sólo pasó 10 años con él de los más de 100 que vivió”.

Traducción: Ligia M. Oliver

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