El príncipe Andrés se enfrenta a nuevas peticiones para ser despojado del título de duque de York El príncipe Andrés se enfrenta a nuevas peticiones para ser despojado del título de duque de York
El mes pasado, la reina despojó al príncipe Andrés de sus afiliaciones militares y patrocinios reales. Foto: John Thys/AFP/Getty Images

El príncipe Andrés se enfrenta a meses de presiones para que renuncie a su título de duque de York, después de que una diputada se comprometiera a seguir “una serie de caminos” en el Parlamento, incluida la modificación de la legislación, para despojar al príncipe de su último cargo honorífico importante.

Rachael Maskell, diputada laborista por York Central, dijo que se reunió con funcionarios de la Cámara de los Comunes para analizar la forma en que podría obligar al príncipe Andrés a renunciar a su título de duque de York tras el acuerdo extrajudicial que alcanzó con una mujer que lo acusó de haberla abusado sexualmente cuando tenía 17 años.

Maskell señaló que esperaba que el príncipe Andrés renunciara voluntariamente a su asociación con la ciudad -un título de por vida otorgado por la reina en 1986-, pero que en las próximas semanas se encargaría de ello en el Parlamento, incluso modificando la legislación.

Comentó: “Es importante intentar encontrar la legislación adecuada, pero es evidente que en las próximas semanas tendremos asuntos pendientes en los Comunes [por lo que] puede haber algunas medidas que se puedan aplicar”.

Esta medida corre el riesgo de prolongar la controversia a lo largo del año del jubileo de platino de la reina -que se celebrará con un fin de semana festivo de cuatro días en junio-, ya que los diputados y los pares tendrían que aprobar cualquier nueva legislación y, posteriormente, la monarca tendría que dar su aprobación real.

El sorprendente acuerdo extrajudicial, anunciado el martes, significa que el príncipe Andrés no admite su culpabilidad respecto a las acusaciones formuladas por Virginia Giuffre, las cuales negó repetidamente y hace pocas semanas se comprometió a luchar en un juicio civil en Estados Unidos.

Sin embargo, el término de la demanda civil no logró calmar la inquietud en York sobre su vinculación con el asediado príncipe.

Darryl Smalley, concejal liberal-demócrata y miembro ejecutivo del ayuntamiento para la cultura, el ocio y las comunidades de la ciudad, señaló que las acusaciones de abuso sexual eran una “mancha en la reputación de la ciudad” y que aumentaría la presión sobre los parlamentarios y la casa real para que el príncipe Andrés renunciara al título de duque de York.

Smalley señaló: “Realmente necesitamos que la casa real y el parlamento reconozcan que esto es grave. Somos una ciudad de renombre mundial, con universidades, un entorno y una cultura fantásticos, pero la imagen de York en todo el mundo definitivamente se está viendo manchada por esto”.

El mes pasado, la reina despojó al príncipe Andrés de sus afiliaciones militares y patrocinios reales en un intento de distanciar a la familia real de las acusaciones. Sin embargo, el príncipe Andrés sigue conservando su título de duque de York.

La reina no puede retirar por sí sola los títulos de nobleza. El Parlamento tendría que dirigir cualquier iniciativa para retirar el título, a través de una legislación aprobada por la Cámara de los Comunes y los Lores.

Maskell, que planteó su preocupación sobre el título del duque de York en la Cámara de los Comunes el mes pasado, comentó el miércoles que su buzón de correo estaba “absolutamente atiborrado” de gente que pedía que se le retirara el título al príncipe Andrés.

La diputada dijo que la otra vía podría ser una petición en línea en la que los diputados pudieran debatir una propuesta presentada por los residentes de York en la que se pida que se le retire el título al duque de York. Los diputados considerarán la posibilidad de debatir una petición electrónica parlamentaria si obtiene más de 100 mil firmas, y una respuesta del gobierno si supera las 10 mil.

Maskell señaló: “El siguiente paso consiste en realizar una petición parlamentaria para medir la opinión pública y también para revisar la legislación. Ya hablé con los secretarios sobre cuáles son esas opciones. Por supuesto, como diputada sin cargo, todos sabemos que resulta difícil presentar una legislación, así que buscaré oportunidades en otras leyes que presente el gobierno para ver si se pueden modificar para abordar esta cuestión”.

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