Ya puedes subir a la pirámide de la Luna en Teotihuacán, reabren acceso: fechas, precios y horarios
Después de más de cinco años, visitantes ya pueden subir nuevamente a la pirámide de la Luna en Teotihuacán.

Visitantes ascienden por primera vez en años a la pirámide de la Luna.
/Foto: EFE/Mario Guzmán
Después de un prolongado periodo de cierre, la pirámide de la Luna en Teotihuacán vuelve a recibir visitantes en su escalinata. Desde ayer, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) permitió nuevamente el ascenso, marcando así el esperado regreso de una experiencia que miles de turistas anhelaban recuperar. Esta apertura se convierte en un hito para la zona arqueológica, uno de los destinos culturales más importantes de México.
Apenas pasado el mediodía del lunes, el personal retiró los señalamientos que impedían el acceso. En cuestión de minutos, los visitantes comenzaron a subir por los 47 escalones que conforman el primer cuerpo de la pirámide. Aunque por ahora el acceso está restringido únicamente a esta primera plataforma, la emoción de los asistentes fue evidente, especialmente entre aquellos que por años esperaron esta oportunidad.
Recomendaciones: La Reina Roja de Palenque llegará por primera vez a Japón
¿Desde cuándo no se podía subir a la Pirámide de la Luna?
El ascenso a esta estructura arqueológica se mantuvo prohibido desde el año 2020. La decisión de cerrar el acceso fue inicialmente parte de las medidas adoptadas durante la pandemia de COVID-19, como una forma de reducir el contacto físico y la aglomeración de personas. Sin embargo, la restricción se extendió por más tiempo del previsto, debido a otros factores relacionados con la conservación de la pirámide.
Durante este periodo, la zona arqueológica continuó recibiendo visitantes, pero sin permitirles subir a ninguna de las dos pirámides principales. Para muchos, esto representó una pérdida importante en la experiencia, ya que el ascenso es una parte emblemática del recorrido en Teotihuacán. Con la reciente reapertura, aunque parcial, se recupera uno de los atractivos más valorados del sitio.
Te puede interesar: La Reina Roja de Palenque llegará por primera vez a Japón
¿Por qué no se podía subir a la Pirámide de la Luna?
Más allá del contexto sanitario, el cierre prolongado respondió también a una preocupación legítima sobre el estado estructural de la pirámide. Se mencionó que el constante flujo de personas podría provocar daños a la construcción prehispánica, e incluso, algunos reportes indicaban que ciertas zonas comenzaban a mostrar signos de hundimiento. Además, la falta de un sistema médico en la zona arqueológica también influyó en la decisión, ante el riesgo de accidentes en la escalera empinada.
Recientemente, el director de la zona arqueológica, Rogelio Rivero Chong, informó que, tras una instrucción directa del director general del INAH, se hicieron adecuaciones que permiten reabrir parcialmente el ascenso. Sin embargo, dejó claro que el permiso solo aplica para el primer cuerpo de la pirámide y que se deberán seguir ciertos cuidados para preservar la integridad del sitio. La pirámide del Sol, por su parte, permanece cerrada al ascenso.
No te pierdas: INAH pide donaciones para salvar el Templo de Quetzalcóatl en Teotihuacán
Precios, horarios y días para visitar Teotihuacán
Teotihuacán abre sus puertas los 365 días del año, en un horario de 8:00 a 17:00 horas, siendo las 16:30 el último momento para adquirir boletos de entrada. Los museos dentro de la zona tienen un horario más reducido: de 9:00 a 16:30 horas, sin posibilidad de ingreso después de esa hora.
El costo general del acceso es de $100 pesos por persona, tarifa válida hasta el 31 de diciembre de 2025. Quienes deseen ingresar con cámara (aunque no sea profesional) deben pagar una cuota adicional. Como incentivo cultural, los domingos la entrada es gratuita para el público nacional.
Hay gratuidad permanente para ciertos grupos, incluyendo niños menores de 13 años, adultos mayores con credencial del INAPAM, estudiantes y docentes acreditados, así como personas con discapacidad y miembros de pueblos originarios. Este esfuerzo busca fomentar el acceso igualitario al patrimonio histórico.