La-Lista de 9 leitmotifs célebres del cine

¿Por qué cuando empieza la película de Superman (la de 1978) y escuchamos las tubas, los trombones, las trompas, las trompetas de la orquesta inmediatamente sabemos que hay por ahí un superhéroe que vela por la verdad y la justicia y que se enfrente al villano al que se enfrente, saldrá victorioso y triunfal de la batalla?

Pues porque la música hace su función: crear un clima emocional, conectarnos con el personaje, rebelarnos sus valores y explicarnos su historia.

En particular, este tipo de melodías que asociamos a un lugar, a un sentimiento, a un grupo o a una persona se llaman leitmotifs. 

Suelen ser un conjunto de notas, a veces tan solo dos, o incluso de ritmos, que tienen una función narrativa y descriptiva de la historia que se representa, pero cuyo mensaje no nos llega por el intelecto, sino por la intuición y la emoción. 

Cada vez que aparece, nos anuncia algo del personaje y ese algo es verídico, tanto, que a veces por estas secuencias musicales nos anticipamos a los hechos, en otro términos, los leitmotifs pueden llegar a hacer spoilers. Por ejemplo, cuando en el juego de Quiddich de Harry Potter y la piedra filosofal, aparece el tema de Voldemort cuando la cámara enfoca al profesor Snape. 

En las batallas o encuentros entre varios de los protagonistas de Avengers, los leitmotifs nos indican quién de ellos tiene la voz cantante y, a veces, nos informan de que quizás lo que estamos viendo en pantalla no es lo que realmente está sucediendo. 

A Steven Spielberg, esta figura musical le hizo de sustituta de la tecnología que en aquel entonces no había para recrear al protagonista de su película Tiburón: el tiburón. De esta forma, bastaba con el mi-fa-mi-fa-mi-fa para alertar de la presencia del animal, es decir, del peligro. 

Ese leitmotif ayuda a entender cómo la música puede definir y describir un carácter. En ese caso se usan tonos graves, que denotan algo grande, pesado y que sale de las profundidades. Al alternarlas a ritmo de corcheras nos indica que está en movimiento y a medida que se acelera el ritmo, anuncia que cada vez está más cerca.

El pionero en usar la música como narradora de la historia fue el alemán Richard Wagner, en obras como su ópera El anillo del Nibelungo. Desde entonces, los compositores se han servido de este recurso para musicalizar desde teatros o películas musicales hasta, hoy, videojuegos. Piensen en las dos notas ascendientes que suenan cuando Mario Bros gana una moneda. 

Hay veces que se confunde el tema de la historia con el leitmotif. El tema es la melodía principal. Si le pidieran que pusiera música a Star Wars probablemente la primera que le vendría a la cabeza sería la melodía con la que empiezan todas las películas de la saga. Suele ser más largo que el leitmotif y a veces, no está asociado a ningún personaje, objeto o lugar al que representa. 

Marimbas y cajón para Evo

“La gente analiza las obras de arte tratando de buscar que todo sea blanco o negro, y en el arte, todo es gris”, explica a La-Lista el compositor Leonardo Heiblum, autor de bandas sonoras de películas como Chicuarotes, dirigida por Gael García Bernal, o el documental galardonado con dos premios Emmy El silencio de los otros, de Almudena Carracedo y Robert Bahar.

“El leitmotif a veces es tema, como en el caso de El Padrino, y en el caso de La Misión, el oboe de Gabriel es Gabriel. A veces se usan para una cosa u otra, no es ciencia”, añade. 

Antes de empezar a musicalizar una historia, Heiblum explica que habla con el director para saber por qué quiere música en su película. En Chicuarotes, por ejemplo, usó leitmotifs para identificar a la familia.

El documental que musicalizó sobre Evo Morales, “Cocalero”, de Alejandro Landes, es otro buen ejemplo de cómo la selección de instrumentos también habla del personaje.

“Tenemos marimbas, pero también añadimos una mezcla de cajón flamenco con bombo legüero. Es un sonido muy particular, en la película podíamos usarlo de letimotiv porque conectaba mucho con la mezcla de las raíces indígenas del personaje pero también, su futuro político”, explica. 

El mundo de los leitmotifs ha dado para libros, tesis doctorales y, más recientemente, para análisis de youtubers especializados en música.

Uno de los videos que dieron a conocer al español Jaime Altozano al público general es el análisis de la banda sonora de Star Wars. De hecho, el pasado mes, sacó una lista de listas de leitmotifs del mundo del cine, videojuegos y musicales donde recopila buena parte del material que existe sobre ese tema en la web. 

Aquí resumimos una lista de 9 leitmotifs célebres en el cine.

– El Tema de Hedwig (Harry Potter)

La música de las dos primeras películas de la saga Harry Potter pertenecen a uno de los compositores más reconocidos del cine, John Williams. Estos leitmotifs solo se usan en las dos primeras porque hay cambios de directores y de compositores a lo largo de la saga. Alfonso Cuarón dirigió la tercera, Harry Potter y el prisionero de Azkaban, y aunque el compositor siguió siendo Williams, cambiaron los leitmotifs.

Uno de los más icónicos es el tema de Hedwig, la lechuza de Harry Potter. “Hedwig necesitaba una música fina, ligera, así que pensé que en una celesta, que es como un mini piano, y cada nota que tocas suena como una campanilla. Es la forma en que un pájaro de plumas flotaría”, comentó el mismo Williams. 

También están el tema de la Nimbus 200, la primera escoba voladora del mago, el tema de Voldemort, la fanfarria del Quidditch, y muchos más. 

• El Tema de Luke (Star Wars)

Williams también firma una de las sagas más estudiadas des del punto de vista musical en la historia del cine. Empezando por el Tema de Luke, que es la fanfarria con al que inician las películas de Star Wars; la Marcha Imperial, el tema de Darth Vader; el Tema de la Fuerza, el de Obi Wan Kenobi, o el Tema de la Princesa Leia.

• La fanfarria de Superman. (Superman)

Si la apertura de Superman les recuerda a la de Star Wars es porque en ambos casos es una fanfarria, donde dominan los vientos de metal de la orquesta, tiene ritmo de marcha y son del mismo autor. 

Williams musicalizó el Superman de 1978, protagonizado por Christopher Reeve y dirigida por Richard Donner. El resto de películas retomaron el letmotiv que identifica al superhéroe que lucha por la justicia y la verdad en los Estados Unidos, aunque con algunos arreglos y, en ocasiones, ocupando temas completamente nuevos, como hizo Hans Zimmer con “El hombre de acero”, de 2013, dirigida por Zack Synder. 

• El tema de William Wallace (“Braveheart”)

Compuesta por James Horner, el tema principal de la película lo es también el que identifica al protagonista, William Wallace, aunque a lo largo de la película hay dos más: el tema de Escocia, que identifica el amor a la patria, y el tema del amor. 

• Tema principal de “El bueno, el malo y el feo”

Ennio Morricone logró con cinco notas convertir el oeste en música. Emulando el aullido de un coyote, el tema principal de la película es también el leitmotif con el que se identifican los tres protagonistas, cada uno interpretado por un instrumento diferente.

• El tema principal de Tiburón

Sí, esta también es de John Williams.

• El tema de Rose (Titanic)

Se titula “Rose” pero en realidad, esta melodía suena en la película para evocar la historia de amor de los dos protagonistas. Es uno de los temas por los que más se recuerda Titanic, aunque también está el “Himno del mar”, con el que se evoca la tragedia del transatlántico. La banda sonora de la múltiple oscarizada película también es de James Horner.

• El tema principal de la saga James Bond

Fue creado por Monty Norman aunque quien orquestó el tema y le dio la sonoridad que conocemos fue John Barry, para la película primera película, Dr No, de 1962. Es el tema principal, con que abren las películas de la saga del agente 007 (a excepción de Casino Royale), aunque en cada película, los respectivos compositores han decidido usarlo además de leitmotif para identificar al espía británico o como un motivo más de la película. 

• El tema de America (West Side Story)

A lo largo de la película, la música es clave para representar el conflicto racial entre dos bandas del Upper West de Nueva York: los blancos Jets y los puertorriqueños Sharks. Las melodías con las que se expresan los primeros suelen ser interpretadas por big bands y adoptan forma de jazz y blues, mientras que la banda latina se expresa con paso dobles, huapangos mexicanos y mambos.

Existen tres leitmotifs que identifican las tensiones de esta historia de amor inspirada en Romeo y Julieta: el tema del odio, el tema del amor (María) y el tema de América, el principal de la película.