Ley que busca tipificar ataques con ácido avanza en el Congreso de la CDMX

El Congreso de la Ciudad de México dio este lunes 11 de diciembre un paso para tipificar los ataques con ácido y sustancias corrosivas, con lo que se busca que este tipo de violencia sea reconocido como tentativa de feminicidio. 

Por unanimidad, las comisiones unidas de Igualdad de Género y Procuración de Justicia del Congreso local aprobaron la iniciativa con proyecto de decreto para reformar la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia y al Código Penal de la CDMX.

El dictamen ahora será turnado al pleno del Congreso local para su análisis y votación. La iniciativa consta principalmente de estos aspectos: 

• Incorporar un nuevo tipo de violencia contra las mujeres: violencia por ataques con acido, sustancias químicas o corrosivas.
• Que se considere como tentativa de feminicidio.
• Penas de ocho a 30 años de prisión, según la agravante y daño causado.
• Considerar las agravantes en razón de género. 
• Llevar a cabo un registro de las personas atendidas por estos ataques.
• Incluir a mujeres de la comunidad trans.
• Garantizar medidas de reparación del daño. 

Ana Francis Mor, presidenta de la Comisión de Igualdad, destacó que este tipo de violencia tiene consecuencias a largo plazo, entre las que se incluyen ceguera, cicatrices y dificultades psicosociales y económicas. 

Además, dijo, se vulnera el derecho a la salud, pues los hospitales no saben cómo atender las heridas causadas por sustancias corrosivas o químicas; el derecho al trabajo, porque las víctimas se ven limitadas; y el derecho a la justicia, porque “no se les garantiza su seguridad ni integridad luego de presentar una denuncia”. 

“Este tipo de violencia busca causar de forma deliberada y permanente dolor y humillación a las mujeres; busca dejar una marca permanente en la vida de las víctimas”, expresó Francis Mor. 

Marcela Fuentes, ponente de la iniciativa, indicó que esta ley pretende que la violencia ácida no sea considerada solo una modalidad, sino un tipo especifico de violencia de género que además debe ser considerado como tentativa de feminicidio. 

“No tenemos estadísticas oficiales de cuántas personas sufren este tipo de violencia, y saber esto permitirá la creación de políticas publicas”, agregó. 

La diputada Gabriela Quiroga (PRD) mencionó que a inicios de 2023 se presentó una iniciativa para elaborar un registro de quienes compran y venden estas sustancias, por lo que sugirió no perder de vista esta propuesta con la que se podrían “tener más elementos para la tipificación del delito”. 

En México no se tiene una cifra exacta del número de víctimas por ataques con ácido. Sin embargo, Nashieli Ramírez Hernández, titular de la CDHCM, reportó que solo en 2022 se registraron 47 ataques con ácido o sustancias corrosivas en contra de las mujeres, y que la Ciudad de México, el Estado de México y Puebla son las entidades con mayor índice en este tipo de violencia.  

En mayo de 2023, la activista Carmen Sánchez logró una sentencia histórica (y la primera en su tipo en México y América Latina) de casi 47 años de prisión para Efrén García, quien la atacó con ácido en 2014. La sentencia se ejecutó en el Estado de México, pero en la mayoría del país estas agresiones siguen siendo consideradas bajo el delito de lesiones. 

El 2 de marzo de este año, el Congreso de Puebla aprobó la “Ley Ácida” –o “Ley Malena”, en honor a la saxofonista María Elena Ríos, víctima de ataque con ácido en 2019– alcanzando penas de 26 a 40 años de prisión.

A nivel nacional, el Congreso de la Unión analiza una iniciativa para reformar el código Penal Federal para tipificar los ataques con ácido o sustancias corrosivas –con penas de hasta 22 años de prisión– y garantizar a las víctimas acceso a cirugías reconstructivas.