¿En qué consiste la iniciativa de AMLO para crear una nueva ley de ciencias y tecnología?
Más de dos mil miembros de la comunidad científica firmaron la petición. Foto: Conacyt.

El presidente Andrés Manuel López Obrador envío a la Cámara de Diputados una iniciativa para expedir la Ley General en Materia de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación, así como para reformar diversas disposiciones de la Ley Federal de Entidades Paraestatales y la Ley de Planeación.

La iniciativa propone cambiar el nombre del Conacyt, que actualmente es Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología al de Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación. El director general será designado por titular del Ejecutivo federal, es decir, quien ocupe la Presidencia de la República.

Su Junta de Gobierno estaría integrada por los titulares de las secretarías de Agricultura y Desarrollo Rural, Bienestar, Infraestructura, Comunicaciones y Transportes, Cultura, Economía, Educación, energía, Hacienda y Crédito Público, de la Defensa Nacional, Marina, Medio Ambiente y Recursos Naturales, Relaciones Exteriores y de Salud.

En dicha Junta, podrán participar con derecho a voz pero sin voto, personas servidoras públicas, académicas y humanistas, científicas y tecnólogas que puedan hacer aportaciones.

La iniciativa prevé que los recursos públicos que destine el gobierno federal, a través de programas presupuestarios, para el fomento y apoyo de actividades sean entregados sin intermediarios a los becarios, humanistas, científicos, tecnólogos e innovadores.

Con respecto al otorgamiento de becas, señala que se establecerán programas para otorgar becas y apoyos complementarios a estudiantes que realizan estudios de posgrado o estancias postdoctorales en universidades instituciones de educación superior y centro de investigación nacionales y extranjeros.

Destaca que conforme a la disponibilidad presupuestaria, el Consejo podrá asignar becas a quienes realicen actividades de investigación humanística o científica desarrollo tecnológico o innovación en industrias relacionadas con las áreas y los temas que defina la Junta de Gobierno del Consejo Nacional conforme la agenda nacional siempre que las empresas en las que lleven a cabo sus actividades concurran en el financiamiento de las becas en términos del convenio que se celebre para tal efecto.

“Para la asignación de becas al extranjero y en su caso apoyos complementarios el Consejo Nacional considerará la relevancia y el aporte del proyecto al desarrollo humanístico científico tecnológico de innovación la trayectoria académica profesional de las personas aspirantes así como su orientación al estudio o investigación en área sistemas que defina la junta de gobierno del Consejo Nacional en el marco de la agenda nacional.

“En todo caso la asignación de Becas y apoyo similares así como la administración de los recursos correspondientes se lo entregará directamente a las personas estudiantes si la intermediación de coordinaciones asociaciones fundaciones o instituciones académicas de la sociedad civil de ningún tipo

En la exposición de motivos, la iniciativa dice que de 2001 a 2018 el Conacyt transfirió a empresas privadas más de 45 mil millones de pesos a empresas privadas, lo que representa el 42% del total de los recursos destinados al financiamiento de las actividades de ciencia, tecnología y que estas empresas nacionales y trasnacionales que no requerían del apoyo del Estado. En contraste, a la investigación científica básica sólo se invirtieron 7 mil millones de pesos, lo que representa la quinta parte de lo destinado al sector privado.

También critica que en el Sistema Nacional de Investigadores prevalecieron criterios elitistas y de evaluación productivista que promovieron el trabajo aislado.

Advierte que desde la creación del Conacyt, en 1970, hay evidencia de 12 registros de propiedad intelectual a su nombre y el último de estos tiene fecha de 1982, por lo que el Conacyt dejó de gestionar la propiedad intelectual del desarrollo científico y tecnológico que financiaba.

Como contexto de las decisiones tomadas en la actual administración, destaca la extinción de 65 fideicomisos que había constituido el Conacyt y que contaban con 21 mil 853 millones de pesos, los cuales pasaron a formar parte de la Tesorería de la Federación con una reforma la Ley de Ciencia y Tecnología, aprobada en noviembre de 2020.

“Esta iniciativa contempla las humanidades las ciencias las tecnologías y la innovación como herramientas para el desarrollo integral de la nación y el bienestar social, es decir, como instrumentos al servicio de la humanidad no simplemente como dispositivos óptimos para la competitividad empresarial y la productividad laboral en la generación y conservación de conocimientos, así como sus aplicaciones prácticas”, dice la iniciativa.

La iniciativa fue turnada a las comisiones de Ciencia y Tecnología y educación para su dictaminación, así como a las comisiones de Gobernación y de Presupuesto y Cuenta Pública para su opinión.

Síguenos en

Google News
Flipboard