Elecciones en Edomex 2023: más PRI o se afianza Morena

El Estado de México deberá tomar una decisión este domingo: refrenda al PRI en el gobierno del estado o le da la oportunidad de gobernar a Morena, en lo que sería la primera alternancia en la historia de la entidad.

El PRI ahora no va solo sino que compite en coalición, por lo que contará con el apoyo del PAN, PRD y Nueva Alianza para sumar votos.

Enfrente tendrá a Morena, quien repite a su candidata de 2017, Delfina Gómez, quien en aquella ocasión perdió por menos de 170 mil votos frente a Alfredo del Mazo, el actual gobernador.

La directora de la casa encuestadora Enkoll, Heidi Osuna, afirmó que existe consenso en que esta no será una elección cerrada, como la pasada.

Pero en los últimos días, la candidata del PRI-PAN-PRD-NA, Alejandra Del Moral, aseguró que ya había alcanzado a Delfina en las encuestas y que le iba a ganar.

En total, 12 millones 676 mil mexiquenses están llamados a las urnas, pero debido al abstencionismo esta cifra podría reducirse a la mitad. Aún así (con más de 6 millones de posibles votantes), esta elección es superior a la que habrá en Coahuila, donde la lista nominal es de poco más de 2 millones 300 mil votantes.

Las mujeres jugarán un papel importante, pues además de que las dos candidatas son féminas, el 52% del electorado es de este género.

Por eso uno de los programas sociales del actual gobierno estatal, el “salario rosa”, cobró relevancia en la campaña, al grado que llevó a la candidata de Morena a prometer que no lo eliminaría, sólo le cambiaría de nombre, en caso de ganar.

Los casi dos últimos meses transcurrieron entre dos campañas que lograron visitar los 125 municipios mexiquenses, con promesas como las de Va por México de implementar un salario familiar, regresar las estancias infantiles e implementar un seguro de desempleo; mientras desde Morena se ofreció aumentar las cámaras de videovigilancia, la ampliación del Metro hacia el Edomex, aplicar un plan de austeridad, entre otras.

El analista José Antonio Crespo asegura que hubo una campaña “muy sucia” y pronostica que si la de este domingo es una contienda cerrada -en la que se gane por menos de 5 por ciento- habría conflicto poselectoral, pero si hay una diferencia de dos dígitos, ya no habrá vuelta. Además, considera que hay una “elección de Estado”.

“Los servidores de la nación, que son una institución gubernamental, están haciendo proselitismo por Morena y eso es una elección de Estado, pero no digo que el PRI no esté incurriendo también en algún tipo de irregularidades. Es muy sucia la elección pero quien tiene la ventaja es Morena, no el PRI, porque Morena no dispone del aparato del Estado de México ahorita pero dispone del gobierno federal y dispone de varias gubernaturas, entre ellas la capital, ayudándole a recabar votos, movilizar”, señala.

La priista Ana Lilia Herrera negó que se haya pactado la entrega del Estado de México a Morena a cambio de que el PRI gane Coahuila.

Para otra priista, Dulce María Sauri, un triunfo de la alianza Va por el Estado de México este domingo “le daría un impulso a la coalición opositora al proyecto político del presidente López Obrador; mostraría de que es posible ganar en el 24”.

Sin embargo, para el operador de Morena en el Edomex, Adrián Barreto, el PRI no entendió al electorado que en esta ocasión apoyó desde el inicio hasta el final un “cambio” en el gobierno, lo cual pudo palpar no sólo en las encuestas sino en el territorio.

Barreto mencionó que en la campaña pasada, a la maestra apenas y la reconocían en los recorridos por los municipios, mientras ahora todos le piden una foto.

Casi el 50% del electorado en el Edomex tiene entre 18 y 39 años, por lo que el voto joven será un factor importante.

El actual gobernador Alfredo del Mazo ganó la elección en 2017 con poco más de 2 millones de votos. Mientras Delfina Gómez, quien ahora lo vuelve a intentar, alcanzó entonces 1 millón 871 mil sufragios. 

Si tomamos en cuenta que ahora la elección es entre dos y hay un alto abstencionismo, la ganadora podría alzarse si consigue más de 3 millones de votos.

Según la Secretaría de Seguridad, hay 33 focos rojos, 17 de ellos de riesgo alto: Chalco, Cuatitlán Izcalli, Ecatepec, Nezahualcóyotl, Los Reyes la Paz, Texcoco, Zumpango, Chicoloapan, Chimalhuacán, Coacalco, Cuatitlán, Ixtapaluca, Malinalco, Nicolás Romero, Tecámac, Toluca y Tultitlán.

En su libro El regreso al infierno electoral, Bernardo Barranco asegura que “en la batalla electoral de 2023, el PRI afrontará su sobrevivencia” ante Morena. Y “si pierde la elección entrará en un tobogán de extinción”, por lo que “no es una edición más, en definitiva: el PRI se juega su disolución“.

“La elección mexiquense es un punto de inflexión, está en juego la larga historia del PRI en la entidad y todo su andamiaje institucional en algunos casos ya oxidado que se ha forjado a lo largo de décadas… Todo ese ensamble político y burocrático se ve amenazado como pocas veces en la historia”, sentencia.