Los errores de la entrevista de Lady Di con la BBC no deben repetirse jamás: Boris Johnson

Boris Johnson exhortó a la BBC a ordenar sus asuntos después de que un veterano ministro dijo que los abrumadores descubrimientos sobre la entrevista de Martin Bashir con Diana, la Princesa de Gales, en 1995 significan que la administración y la operación de la BBC tendrán que examinarse. Esto tras revelarse que Bashir presuntamente logró el encuentro “forma engañosa”: al presentar extractos bancarios falsos.

Sus comentarios llegaron cuando la policía metropolitana dijo que evaluarán los contenidos del informe del exjuez del Tribunal Supremo de Reino Unido John Dyson “para asegurarse de que no haya evidencias nuevas significativas”, después de haber decidido previamente no comenzar una investigación criminal. 

El primer ministro también se sumó a la presión sobre la BBC, al decir que estaba “obviamente muy preocupado” por el informe. 

“Apenas puedo imaginar los sentimientos de la familia real y espero con ansias que la BBC dé todos los pasos posibles para asegurar que nada como esto vuelva a suceder”, señaló. 

Más temprano, la autoridad dijo que en marzo determinaron que “no era apropiado comenzar una investigación criminal sobre las acusaciones de actividad ilegal relacionadas con la transmisión del documental en 1995, pero cualquier nueva evidencia significativa que emerja deberá evaluarse”. 

Cuando en el programa Today de la BBC le preguntaron sobre el potencial involucramiento de la policía, el secretario de justicia Robert Buckland dijo que eso era cuestión de la policía y de las autoridades de fiscales independientes, pero añadió: “Creo que cualquiera que lea los encabezados y el resumen de los descubrimientos de Lord Dyson se impactará con el uso de aquellas palabras, fraude y engaño y otras, y claramente ese tipo de problemas, me temo que sí aparecen”. 

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El informe de Dyson sobre cómo una entrevista de la BBC con Diana y las “impactantes” reacciones de sus hijos a los descubrimientos alzaron “algunas preguntas muy serias” para la transmisora, según Buckland.

“El gobierno tiene que, a la luz de estos graves descubrimientos, considerar el asunto con mucho cuidado y profundidad definitivamente”, dijo Buckland al programa Today en Radio 4. 

“Porque no era solo la decisión de un reportero o un equipo de producción, algunas decisiones se tomaron desde más arriba en la cadena sobre la conducta de estos individuos que ya se demostró, de acuerdo con Lord Dyson, que estaban equivocadas y no tenían fundamento. 

“Y por lo tanto, el gobierno sí tiene la responsabilidad de observar cuidadosamente si la administración de la BBC de hecho necesita una reforma a la luz de estos descubrimientos devastadores”. 

Un exdirector de la BBC, Michael Grade, mientras tanto, describió las críticas del príncipe Guillermo a la BBC como “sin precedentes” e hizo un llamado para hacer “cambios estructurales serios” dentro de la corporación. 

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“Creo que tiene que haber una junta editorial de periodistas sin conflictos, independientes y especialistas en el exterior que puedan responsabilizar por sus acciones al periodismo de la BBC, y analizar su cobertura de elecciones, el Brexit, Medio Oriente, etcétera, pero que sea una junta bastante completa”, consideró. 

Grade dijo que no cree que algún gobierno pueda “usar algo tan crudo como esto para atacar a la BBC” porque el público no lo tolerará. 

Pero entre los miedos de otras personas de que el gobierno aproveche la oportunidad para realizar cambios controversiales para la BBC, Buckland señaló que ahora surgen “preguntas serias” para la corporación, un día después de que el príncipe Guillermo lanzó un ataque furioso contra las deficiencias. 

Buckland dijo a Sky News: “Creo que una disculpa es buena para comenzar, pero no creo que sea el final del asunto, por lo que, todos nosotros, observando su administración, observando sus modos de operar, necesitamos hacerlo para asegurarnos de que este tipo de conductas, este tipo de cosas, no vuelvan a suceder”. 

Sus comentarios llegaron cuando nuevas presiones cayeron sobre la BBC la noche del jueves, con un comunicado de Guillermo transmitido en televisión, donde dijo que la “engañosa” manera en que la BBC consiguió una entrevista con Diana “influenció sustancialmente” su contenido. 

“Le fallaron no solo un periodista rebelde, sino todos los líderes de la BBC que voltearon la mirada”, declaró, mientras su hermano, el príncipe Harry publicaba un comunicado igual de incisivo, donde señaló que las prácticas engañosas expuestas jugaron una parte en la muerte de su madre. 

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También hubo nuevas críticas para la transmisora por parte del diseñador gráfico Matt Wiessler, a quien Bashir contrató para hacer los documentos falsos. Dijo que hay una cultura dentro de la BBC donde los errores solo se admiten “bajo presión”. 

Le dijo al programa Today: “Simplemente siento que hay una cultura dentro de la BBC, de la que soy como un denunciante, de que realmente no necesitamos que se dirijan a nosotros”. 

Una investigación, llevada a cabo por Dyson, antiguo juez de la suprema corte, encontró que Bashir participó en “conductas engañosas” al presentar documentos bancarios falsos para convencer a Diana de que aceptara la entrevista, esto es una “violación severa” a los lineamientos editoriales de la BBC. 

En su informe de 127 páginas, Dyson también criticó la conducta de Tony Hall, el exdirector general de la corporación, quien fue acusado de supervisar una investigación interna con errores y “profundamente inefectiva” sobre el problema. Cuando otras organizaciones de medios comenzaron a hacer preguntas sobre cómo la BBC consiguió la exclusiva global, Dyson dijo que la corporación “encubrió dentro de sus bitácoras de prensa” lo que sabían. 

La crisis para la BBC llega después de que un grupo de figuras influyentes preocupadas por el futuro de la transmisora pública acusó al gobierno, durante la semana, de desvirtuar la confianza en las industrias creativas del Reino Unido con historias “insuficientes” sugiriendo planes para la privatización de las transmisoras públicas. 

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Las acusaciones, hechas durante el lanzamiento del grupo British Broadcasting Challenge, coincidieron con la publicación de una carta abierta al secretario de cultura, Oliver Dowden, firmada por más de 120 personas, incluyendo a los escritores Hilary Mantel y Salman Rushdie, quienes expresaron su preocupación por el futuro de la BBC. 

Una reseña estratégica de la transmisora pública ya se está llevando a cabo, con un panel supervisor designado por el gobierno en noviembre.