Sobreuso de antibióticos en animales de granja levanta preocupaciones para el comercio post Brexit
La peste porcina africana “es una grave enfermedad viral que afecta a los cerdos domésticos y silvestres”. Foto: Pascal Debrunner on Unsplash

El sobreuso de antibióticos en animales de granja es grande en algunos países clave con los que el Reino Unido planea hacer un tratado de comercio post Brexit, un nuevo reporte muestra, lo que levanta preocupaciones de que los acuerdos futuros pondrán en peligro la salud pública y la ganadería británica

EU, Australia, Nueva Zelanda y Canadá permiten que los granjeros le den antibióticos de rutina al ganado para hacerlos crecer más rápido, y en EU y Canadá el uso de antibióticos en animales es cinco veces mayor que en el Reino Unido, según la información de Alliance to Save Our Antibiotics

La carne que se produce de esta manera es más barata, porque los animales crecen más rápido y pueden mantenerse en condiciones sobrepobladas. Pero esta carne se prohibirá en la Unión Europea, por motivos de seguridad y salud pública. 

El uso de antibióticos en bovinos en EU es siete veces más grande que en el Reino Unido, y en cerdos el doble, según el reporte. En Australia, el uso de antibióticos en aves es más de 16 veces mayor que en el Reino Unido, y el uso en cerdos está cerca del triple. 

El uso de antibióticos en granjas se elevó en EU, Canadá y Nueva Zelanda en años recientes, y en Australia se elevó en 2010, el último año del que hubo información completa disponible. Algunos de los fármacos que se usan también son problemáticos: la bacitracina como promotora de crecimiento se usa en EU, a pesar de evidencia científica de que aumenta la resistencia a un antibiótico de último recurso llamado colistina, que se usa para tratar infecciones letales en humanos. 

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Cóilín Nunan, asesor científico de la Alianza para Salvar Nuestros Antibióticos, dijo: “La resistencia a antibióticos es un problema global, tenemos que elevar nuestros estándares alrededor del mundo para evitar que aumente. Estos acuerdos de libre comercio tienen que tomar eso en cuenta”. 

El sobreuso de antibióticos en animales de granja permite que crezcan formas resistentes de bacterias, conocidas como superbichos, que pueden causar consecuencias devastadoras en la salud humana. La carne infectada con bacterias resistentes puede causar directamente infecciones en personas, y también puede contribuir a un aumento general en la resistencia de los humanos a los tratamientos con antibióticos.

Los ganaderos británicos también corren el riesgo de que se prefiera la carne más barata importada y tratada con antibióticos, lo que reduciría los estándares de bienestar en el Reino Unido porque los ganaderos tendrían que guardar más densamente a sus animales para recortar costos y competir con las hordas de importaciones baratas. 

“Los productores del Reino Unido se verán forzados a competir con la reducción de costos, lo que significa más animales en peores condiciones, que significa un aumento en el uso de antibióticos”, dijo Nunan. “Cualquier tratado de comercio nuevo no debe comprometer los estándares británicos ni amenazar la salud pública al permitir que entren carnes y lácteos baratos producidos con antibióticos en el Reino Unido”. 

Los expertos médicos se preocupan por el rápido aumento de la resistencia a antibióticos alrededor del mundo, lo que nos deja sin defensas contra enfermedades comunes, y hace que operaciones de rutina como cesáreas o reemplazos de cadera sean potencialmente fatales. Los antibióticos se usan más en animales que en humanos alrededor del mundo, pero los intentos para reducir su uso son rechazados por grupos ganaderos poderosos en muchos países. 

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El uso de antibióticos se controla más en la Unión Europea que en cualquier otro lado, y el uso de fármacos como promotores de crecimiento está prohibido desde 2006. En el Reino Unido, el uso de antibióticos en la ganadería ha caído bastante en la última media década, a casi la mitad de los niveles de 2014, aunque hubo un aumento ligero el año pasado. 

En casi un año, desde enero 2022, reglas más estrictas de la Unión Europea prohibirán la importación de carne tratada de rutina con antibióticos como promotores de crecimiento, y prohibirá toda la medicación masiva de prevención con antibiótico en ganado. Es poco probable que el Reino Unido se una a esta prohibición. 

El gobierno ha dicho repetidamente que el pollo clorado y la res con hormonas seguirán prohibidos en el Reino Unido después del Brexit, después de la preocupación extendida sobre estándares alimenticios en los futuros tratados de comercio. Sin embargo, los expertos en alimentación y ganadería señalaron que esto le deja abierta la puerta a cientos de otros tipos de productos alimenticios y agrícolas que actualmente están restringidos por las reglas de seguridad de la Unión Europea, bajo los procesos actuales muchos de estos podrán legalizarse discretamente sin escrutinio público. 

Nunan llamó a las próximas regulaciones europeas como “un gran paso adelante” y pidió que los ministros las adopten en el Reino Unido. “El gobierno del Reino Unido debería comprometerse a implementar la misma prohibición en la mediación masiva de prevención, ya que confiar en acciones voluntarias no es un enfoque sostenible para el largo plazo. También debería asegurar que los tratados comerciales se fijen estándares altos para las importaciones para proteger la salud humana y no bajar los estándares británicos”. 

Un vocero del gobierno dijo: “Este gobierno fue claro con que no comprometeremos nuestras protecciones ambientales, bienestar animal y estándares alimenticios de primer nivel. 

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“El Reino Unido prohíbe el uso de hormonas artificiales de crecimiento en la producción doméstica y en productos importados, y esto continuará en el periodo de transición. También continuaremos con la operación de controles robustos en las medicinas que pueden usarse en todos los animales, también los que producen alimentos, para proteger la salud humana y animal y el ambiente.

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