Trump elogia al ‘genio’ Putin por desplazar tropas al este de Ucrania

Donald Trump dijo que Vladimir Putin es “muy perspicaz” e hizo una jugada “genial” al declarar dos regiones del este de Ucrania como estados independientes y al desplazar las fuerzas armadas rusas a los mismos.

Trump comentó que vio la escalada de la crisis ucraniana en la televisión “y dije: ‘Esto es genial’. Putin declara una gran parte de Ucrania… Putin la declara como independiente. Oh, eso es maravilloso”.

El expresidente estadounidense señaló que el presidente ruso realizó una “jugada inteligente” al enviar a la zona “la fuerza de mantenimiento de la paz más fuerte que jamás he visto”.

Trump, un admirador desde hace muchos años de Putin que fue impugnado por acusaciones de que amenazó con retener la ayuda a Ucrania a menos que pudiera ayudar a dañar la reputación de Joe Biden, elogió las acciones del presidente ruso al tiempo que afirmó que no habrían ocurrido si él todavía fuera presidente.

“Aquí hay un tipo que es muy perspicaz… Lo conozco muy bien”, comentó Trump sobre Putin mientras hablaba en The Clay Travis & Buck Sexton Show. “Muy, muy bien. Por cierto, esto nunca habría ocurrido con nosotros. Si hubiera estado en el cargo, era impensable. Esto nunca habría ocurrido”.

“Pero aquí hay un tipo que dice, ya sabes, ‘Voy a declarar independiente a una gran parte de Ucrania’ -usó la palabra ‘independiente’- ‘y vamos a salir y vamos a entrar y vamos a ayudar a mantener la paz‘. Tienes que admitir que eso es bastante perspicaz”.

La intervención de Trump fue criticada por los dos republicanos que forman parte del comité selecto de la Cámara de Representantes que investiga los disturbios del Capitolio del 6 de enero, que se encuentran entre los pocos republicanos que han criticado al expresidente. Liz Cheney tuiteó que los comentarios de Trump “ayudan a nuestros enemigos. Parece que los intereses de Trump no concuerdan con los intereses de los Estados Unidos de América”.

Por su parte, Adam Kinzinger retuiteó una captura de pantalla de los republicanos de la Cámara de Representantes que mostraba a Biden alejándose, la cual publicó con el comentario: “Así es como luce la debilidad en el escenario mundial”, para denunciarlo en términos exaltados.

Kinzinger escribió: “Como todavía ‘técnicamente’ un miembro de los republicanos de la Cámara de Representantes, permítanme, con todas mis fuerzas, condenar este maldito y horrible tuit durante esta crisis. Uno puede criticar la política, pero esto es una locura y aviva la narrativa de Putin. Pero oigan, retuits, ¿me equivoco?”

Durante un largo discurso el lunes que cuestionó el derecho de Ucrania a existir, Putin dijo que reconocía la independencia de dos regiones separatistas en el este de Ucrania -la República Popular de Donetsk (DNR) y la República Popular de Lugansk (LNR)- y que las tropas rusas serán enviadas a esa región para “operaciones de mantenimiento de la paz”.

Los líderes occidentales condenaron rotundamente la decisión por considerarla una peligrosa escalada de la tensa situación en la frontera entre los dos países y una violación a la soberanía de Ucrania.

Linda Thomas-Greenfield, embajadora de Estados Unidos ante las Naciones Unidas, expresó que la declaración de Putin era una “tontería” y que Rusia estaba “creando un pretexto para la guerra”. Boris Johnson, el primer ministro británico, dijo que Rusia estaba “violando abiertamente el derecho internacional” al intentar separar los dos territorios.

Aparte de Cheney y Kinzinger, la mayoría de los demás republicanos y las principales figuras conservadoras han dudado entre condenar a Biden por ser débil en su respuesta a la situación y afirmar que se está denigrando a Putin en un conflicto que no debería ser de interés para Estados Unidos.

“Odiar a Putin se ha convertido en el propósito central de la política exterior de Estados Unidos”, señaló el martes Tucker Carlson, el presentador de derecha de Fox News. “Es el tema principal del que se habla. Hay canales de cable enteros que se dedican a ello. Muy pronto, ese odio a Vladimir Putin podría llevar a Estados Unidos a un conflicto en el este de Europa”.