El duelo, los talibanes y el pajarito real: el príncipe Harry lo cuenta todo en una entrevista con Stephen Colbert

El público del estudio en Nueva York coreaba “¡Harry! Harry!”. Sin embargo, es probable que los monárquicos británicos consideren el impúdico intercambio como otro golpe a la dignidad de la familia real.

El martes, el príncipe Harry llevó su gira literaria a la televisión nocturna estadounidense y se encontró a sí mismo confrontado con preguntas sobre un viaje al polo norte en el que sus genitales sufrieron una congelación.

Se mostró imperturbable y divertido en la entrevista con el comediante Stephen Colbert, quien se preguntó en voz alta: “Nadie en mi vida, cuando era niño, pudo explicarme que algún día el duque de Sussex me iba a decir las palabras ‘protector para pene’ y que todo tendría sentido. Esto es absolutamente surrealista”.

El libro de Harry, Spare: En la sombra, salió a la venta el martes. La editorial, Transworld Penguin Random House, informó que solo el primer día se vendieron en el Reino Unido 400 mil ejemplares en tapa dura, libro electrónico y audio. Harry lo promocionó mediante entrevistas en la cadena británica ITV y en el programa estadounidense de actualidad 60 Minutes, que obtuvo su mejor audiencia de la temporada con un total de 11.2 millones de televidentes.

No obstante, su aparición en el programa The Late Show with Stephen Colbert, en la cadena CBS, representaba una apuesta más arriesgada. Colbert criticó una vez al presidente George W. Bush en la cena anual de corresponsales de la Casa Blanca y se ha forjado una carrera televisiva ridiculizando sin piedad a los políticos y los medios de comunicación.

Como era de esperar, el presentador no pudo resistirse a retomar un pasaje en el que Harry, de 38 años, describe cómo una visita al polo norte le provocó una leve congelación en su pene que perduró durante la boda de su hermano con Kate.

“¿Puedes explicar cómo es que el estándar real se congeló?”. preguntó Colbert con evidente complacencia. “Explícanoslo. Tómate todo el tiempo del mundo”.
Harry respondió: “¿Puedo beber algo? ¿Cuánto tiempo has estado esperando para hacer esa pregunta?”.

Colbert comentó: “Desde que leí el libro ayer”.
En lo que cabe suponer constituye una primicia para un miembro de la familia real, Harry dijo: “Hemos dado un gran salto desde el duelo y el trauma a mi pajarito”.

Colbert respondió: “Pajarito. Esa es una palabra muy suave. Pajarito. Suena como un buen apodo. Saben, amigos, aquí está Willy, aquí está Pajarito, aquí está John Thomas”.
Después preguntó: “¿Cómo se congeló? ¿Por qué no cuidaste las joyas reales?”.
Harry se rió y señaló que el contexto era importante. Colbert dijo: “El contexto de esto es que vas al polo norte y las cosas se pusieron muy frías. ¿En qué momento te diste cuenta de que había una crisis en el polo sur?”.

El público estalló. Harry insistió: “No se convirtió en un carámbano”. Explicó que se había unido a veteranos militares en una caminata hacia el polo norte y que había llevado todo el equipo adecuado, excepto un “protector para pene” para mantenerse caliente.

El programa también había comenzado con un tono desenfadado cuando Harry fue recibido por dos trompetistas uniformados en los estudios de la CBS en Nueva York. Harry comentó: “Stephen, no era necesario, pero gracias, te lo agradezco”. Colbert respondió: “¿De qué estás hablando? Esto no es para ti. Espera, fuera del camino. ¡Ya viene!”. Entonces apareció la estrella de Hollywood Tom Hanks y Harry le lanzó varios pétalos.

Posteriormente, Colbert le sirvió a Harry un vaso de tequila y supo que ve y “comprueba los hechos” de la serie dramática de Netflix The Crown. Pero también abordó un tema serio, preguntando si Harry cree que la familia real está llevando a cabo una campaña activa para socavar el libro.
“Por supuesto”, respondió, añadiendo que los medios británicos estaban haciendo lo mismo. “Pero esta es la otra versión de la historia, ¿no? Después de 38 años, ellos han contado su versión de la historia. Esta es la otra versión de la historia y hay muchas cosas ahí que, quizás, hacen que las personas se sientan incómodas y asustadas”.

Harry dio el ejemplo de sus recuerdos de su servicio en el ejército británico en Afganistán. El príncipe escribe que en su segunda misión, como copiloto y artillero de un helicóptero Apache, mató a 25 militantes talibanes, sin sentir ni satisfacción ni vergüenza por sus acciones. Algunos veteranos y líderes militares señalaron que la publicación del recuento de bajas viola un código militar tácito, aumentando potencialmente el riesgo para la seguridad de Harry y de las fuerzas británicas.

Cuestionado por Colbert, el duque defendió la revelación y afirmó que los medios de comunicación la habían tergiversado sin contexto. “Sin duda, la mentira más peligrosa que han contado es que de alguna manera presumí del número de personas que maté en Afganistán”.

Prosiguió: “Diría que si yo escuchara a alguien más o escuchara a alguien presumir de ese tipo de cosas, me enojaría. Pero es una mentira y espero que ahora que el libro ya salió, la gente pueda ver el contexto. Es realmente preocupante y muy inquietante que puedan salirse con la suya porque tenían el contexto. No era como si aquí hubiera solo una línea. Tenían toda la sección. La sacaron y simplemente dijeron, aquí está, él presume de esto… y eso es peligroso. Y mis palabras no son peligrosas, pero el cambio de mis palabras es muy peligroso”.

Colbert preguntó: “¿Peligroso porque te convierte en un objetivo mayor, a los que te rodean y quieres?”.
Harry coincidió y dijo: “Esa es una elección que ellos tomaron”.

El duque explicó que su motivo, tras haber pasado casi dos décadas trabajando con veteranos de todo el mundo, era ser honesto y compartir sus experiencias sin avergonzarse. “Todo mi objetivo y mi intento con el hecho de compartir esos detalles es reducir el número de suicidios”.

En el libro, Harry cuenta cómo su padre le dio la noticia de la muerte de su madre, Diana, pero que no le ofreció un abrazo. También comparte detalles sobre su ira contra los medios de comunicación británicos y su tensa relación con Guillermo y su familia en general, la cual empeoró después de que comenzara su relación con Meghan Markle, la actriz estadounidense mestiza con la que se casó en 2018.

Mientras Colbert ahondaba en este aspecto, Harry bromeó con el público del estudio: “Un poco como terapia de grupo”.
El propio Colbert tenía 10 años cuando perdió a su padre y a sus dos hermanos adolescentes en un accidente de avión. Ha hablado del duelo con entrevistados como el presidente estadounidense, Joe Biden, y el presentador de la cadena CNN, Anderson Cooper. Le preguntó a Harry: “Si tu madre siguiera viva, ¿alguna vez piensas en cómo manejaría ella este momento?”.

Harry respondió: “Es imposible decir dónde nos encontraríamos ahora, dónde estarían esas relaciones ahora, pero de ninguna manera la distancia entre mi hermano y yo sería la misma”. Harry dijo que sintió la presencia de Diana con más intensidad en los últimos dos años que en los últimos 30.

Harry reflexionó: “Ella murió a los 36 años y yo tenía 36 cuando todo esto empezó, ya que en enero de 2020 fue cuando mi esposa y yo básicamente dijimos basta, no podemos soportarlo, no podemos lidiar con esto, necesitamos forjar algo diferente. Así que fue una interesante superposición de tiempo”.