China restringe el acceso a ChatGPT
ChatGPT, un servicio de chat de inteligencia artificial, no está oficialmente disponible en China. Fotografía: Florencia Lo/Reuters

Los reguladores chinos supuestamente restringieron el acceso a ChatGPT, a medida que las empresas tecnológicas y universidades chinas avanzan en el desarrollo de bots nacionales de inteligencia artificial.

ChatGPT, el popular bot de debate creado por la empresa OpenAI, con sede en Estados Unidos, no está disponible de forma oficial en China, donde el gobierno aplica un amplio cortafuegos y una estricta censura en internet. Sin embargo, muchos usuarios accedieron al programa a través de redes privadas virtuales (VPN) y algunos desarrolladores de terceros crearon programas que permitían cierto acceso al servicio. Esos programas desaparecieron de las cuentas de WeChat.

Múltiples informes indicaron que se ordenó a las principales empresas de tecnología, entre ellas la empresa matriz de WeChat, Tencent, y Ant Group, que cortaran el acceso a los programas. A principios de esta semana, los medios de comunicación estatales expusieron los peligros de ChatGPT como posible herramienta para que Estados Unidos “difunda información falsa”.

Un artículo del periódico China Daily señalaba que las preguntas formuladas a ChatGPT sobre la provincia de Xinjiang siempre arrojaban respuestas “acordes con la propaganda política del gobierno estadounidense de que en la provincia hay un supuesto ‘genocidio'”. Se descubrió que el gobierno chino ha cometido violaciones masivas de derechos humanos en la provincia de Xinjiang, algo que niega.

Las búsquedas de ChatGPT en las plataformas chinas ya no ofrecían resultados, mientras que los programas de solución alternativa fueron desactivados o sustituidos por un aviso que indicaba que habían sido suspendidos por “violar las leyes y reglamentos pertinentes”, informó el periódico South China Morning Post.

Tencent no respondió la solicitud de comentarios. La Dra. Ilaria Carrozza, investigadora principal del Instituto de Investigación para la Paz de Oslo, comentó que la medida drástica no era sorprendente. “OpenAI no permitía que la gente de China se registrara, por lo que había algunas barreras, pero no estaba completamente bloqueada”, señaló.

“El modelo se basa en la información abierta de los países occidentales. Potencialmente plantea muchos problemas (para el gobierno chino), porque la gente podría haberlo utilizado para plantear cuestiones sobre temas delicados, como los abusos de los derechos humanos en Xinjiang, Taiwán o las Islas Senkaku”, agregó.

Se había registrado un interés generalizado por ChatGPT, lo cual avivó la carrera tecnológica en la industria china para crear chatbots nacionales. Los medios de comunicación sociales y estatales chinos se han visto inundados de noticias sobre pruebas de esta tecnología y debates sobre su uso en entornos académicos y de otro tipo. Plato, un chatbot lanzado por Baidu en 2021, suscitó comparaciones poco favorables en las redes sociales después de que no lograra estar a la altura del nuevo competidor creado en Estados Unidos, según indica una traducción de ChinaTalk.

En un ejemplo ampliamente compartido, Plato se obsesionó con decir que “3+5=5”, mientras que un falso aviso gubernamental redactado por ChatGPT en el que se anunciaba el fin de las normas de tránsito para evitar embotellamientos sorprendió a muchas personas en la ciudad de Hangzhou.

Un artículo viral del medio de noticias de negocios Jiemian señalaba que existían dos grandes retos para los desarrolladores chinos de inteligencia artificial: “Materiales de entrenamiento insignificantes y competencia tóxica en la industria tecnológica”. “Plato de Baidu parece estar poseído por un troll de internet de clase baja; hay algo de cierto en el popular chiste en internet de que fue entrenado en la sección de comentarios de Weibo”, indicaba el artículo, según ChinaTalk.

Ahora que se interrumpió el acceso a ChatGPT para los consumidores chinos, y que no hay un sustituto nacional equivalente, existe una demanda no cubierta en China. El sector aún no se ha recuperado de dos años de severas intervenciones reguladoras. “Se enfrentan a un dilema: quieren (asegurar) a los inversionistas y consumidores que se están desarrollando tan rápido como otras empresas tecnológicas en el mundo, pero tampoco quieren molestar al gobierno”, comentó Carrozza. “Para estas empresas es bastante difícil desenvolverse en estos entornos y proponer productos que no vayan a ser desactivados de inmediato”, remató.

Baidu, Alibaba, JD.com y Tencent figuran entre las decenas de empresas y universidades que anunciaron planes para desarrollar chatbots de inteligencia artificial. El programa de Baidu, denominado Ernie Bot, está considerado como el más avanzado en términos de desarrollo, y su lanzamiento está previsto para marzo.

El CEO de Baidu, Robin Li, comentó a la prensa esta semana que la empresa llevaba años desarrollando grandes modelos lingüísticos entrenados a partir de sus miles de millones de consultas diarias en el motor de búsqueda. También comentó que Ernie Bot era “lo más avanzado” entre los grandes modelos lingüísticos impulsados por inteligencia artificial en lo que respecta a la comprensión de la lengua y la cultura de China.

Chi Hui Lin y Reuters contribuyeron a este artículo.

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