La desinformación rusa recurre a la extrema derecha de EU para debilitar el apoyo dado a Ucrania
Un informe reveló que las cuentas en Twitter vinculadas a Rusia han comenzado a hacer hincapié en las repercusiones energéticas y económicas de la guerra. Foto: Beata Zawrzel/NurPhoto/Rex/Shutterstock

A medida que la despiadada guerra de Rusia contra Ucrania se enfrenta a importantes reveses desde que comenzó hace un año, el Kremlin despliega nuevos temas y tácticas de desinformación para debilitar el apoyo que Estados Unidos brinda a Kiev, con la ayuda de estrellas conservadoras de los medios de comunicación y de algunos republicanos miembros del Congreso, según indican nuevos estudios y expertos.

Los mensajes de desinformación de Moscú han incluido teorías de conspiración ampliamente desmentidas sobre la existencia de laboratorios de armas biológicas estadounidenses en Ucrania, y temas favoritos de la derecha estadounidense que retratan al presidente ruso, Vladimir Putin, como un aliado en lo que respecta al respaldo de los valores tradicionales, la religión y la familia en la lucha contra las ideas “woke”.

Además, nuevos reportes realizados por centros de estudios que rastrean la desinformación señalan que plataformas alternativas de redes sociales como Parler, Rumble, Gab y Odysee son cada vez más utilizadas para difundir mentiras rusas después de que Facebook y Twitter impusieran más restricciones a la propaganda de Moscú.

Otros mensajes prorrusos centrados en los costos económicos que supone la guerra para Estados Unidos fueron repetidos por republicanos pertenecientes al poderoso grupo de extrema derecha Freedom Caucus de la Cámara de Representantes, tales como Marjorie Taylor Greene, Scott Perry y Paul Gosar, quienes, en diversos grados, cuestionaron la concesión de más ayuda militar a Ucrania y exigieron una supervisión más estricta.

Desde que Rusia lanzó su invasión el pasado febrero, el presentador de Fox News Tucker Carlson y el aliado de Trump –convertido en un influyente podcaster de extrema derecha– Steve Bannon promueven algunas de las afirmaciones más infundadas que ayudan a reforzar la agresión del Kremlin.

Por ejemplo, el episodio de febrero de 2022 del podcast War Room de Bannon incluyó una entrevista con Erik Prince, el acaudalado fundador estadounidense de Blackwater, en el que ambos afirmaban con entusiasmo que las políticas de Putin eran “anti-woke” y elogiaban la homofobia y transfobia de Putin.

También el mes pasado, en el aniversario de la invasión lanzada por Moscú, Carlson intensificó sus ataques contra el apoyo que Estados Unidos brinda a Ucrania, afirmando falsamente que el objetivo de Biden se había convertido en “derrocar a Putin y desplegar tanques estadounidenses en la Plaza Roja porque, claro, podríamos controlar a Rusia una vez derrocado el dictador”.

Los analistas que rastrean la desinformación de Rusia observan sinergias entre el Kremlin y sectores de la derecha estadounidense que han contribuido a difundir algunas de las mayores mentiras desde que comenzó la invasión.

“Rusia no saca de la nada ni siquiera sus narrativas más extravagantes, sino que aprovecha el resentimiento y las fisuras políticas existentes“, comentó a The Guardian Jessica Brandt, directora de políticas de la Brookings Institution, que realiza un seguimiento de la desinformación y la interferencia extranjera.

Y añadió: “Así que con frecuencia hay una especie de armonía: tanto los mensajeros del Kremlin como las figuras clave de los medios de comunicación, cada uno por sus propias razones, tienen cierto interés en criticar a la administración por su gestión de la crisis de Ucrania, en amplificar la desconfianza en los medios de comunicación autorizados, en aprovechar el escepticismo sobre los orígenes del Covid-19 y la frustración respecto a las medidas de mitigación del gobierno”.

Ese fue el caso de la teoría de conspiración sobre los biolabs, por ejemplo, que plantea que el Pentágono ha estado apoyando el desarrollo de armas biológicas en Ucrania. El Charlie Kirk Show y el podcast War Room de Steve Bannon, entre otros, dedicaron múltiples segmentos a esta afirmación. En realidad, no es que estemos presenciando algún tipo de coordinación, sino más bien una alineación de intereses“.

Brandt también señaló que Rusia tenía “interés en promover auténticas personalidades estadounidenses que expresen opiniones afines a los objetivos de política exterior del Kremlin. Y por eso es frecuente verlos retuitear a estadounidenses que exponen estos argumentos”.

Asimismo, dos informes publicados de forma independiente el mes pasado por la Alliance for Securing Democracy y el Atlantic Council revelan la forma en que los medios de comunicación estatales rusos modificaron algunos temas de sus mensajes y adoptaron nuevas tácticas con el objetivo de socavar el apoyo que Estados Unidos brinda a Ucrania.

El informe de Alliance documentó un cambio en los mensajes de Estados Unidos y Europa, que dejaron de defender directamente la invasión de Rusia para empezar a hacer hincapié en las repercusiones energéticas y económicas que estaba causando, temas que parecen resonar entre algunos políticos republicanos.

Durante los seis primeros meses de la guerra, los datos de Alliance revelaron que las cuentas de Twitter vinculadas a Rusia mencionaron el término “nazi” en más de 5 mil 800 tuits.

Sin embargo, en los seis meses siguientes, desde agosto de 2022 hasta enero de 2023, “el número de tuits sobre ‘nazis’ disminuyó a 3 mil 373, lo que supone una reducción del 42%”. Igualmente, las menciones sobre la OTAN por parte de cuentas de Twitter vinculadas a Rusia cayeron aproximadamente un 30% en el segundo semestre.

Por el contrario, en el semestre más reciente, según indicó el informe, “los tuits que mencionaban tanto ‘energía’ como ‘Ucrania’ aumentaron un 267%, mientras que los tuits que mencionaban ‘costo de la vida’ aumentaron un 66%” en comparación con los primeros seis meses de la guerra.

En otro cambio, Bret Schafer, que dirige el equipo de manipulación de la información de Alliance, comentó a The Guardian: En respuesta a las restricciones y a las medidas enérgicas aplicadas por las principales plataformas tecnológicas, las cuentas y los canales afiliados al medio de comunicación estatal ruso RT, que está totalmente prohibido en YouTube, se dispersan a través de redes sociales alternativas y plataformas de intercambio de videos como Rumble y Odysee, que tienen políticas de moderación de contenidos menos restrictivas y que permiten que RT opere sin etiquetas ni restricciones”.

“Esas plataformas también suelen estar dirigidas a audiencias que no son necesariamente prorrusas, pero que sin duda son más propensas, basándonos en otros videos encontrados en dichas plataformas, a oponerse a seguir apoyando a Ucrania”.

A pesar de la ofensiva de desinformación de Moscú y de los más de 100 mil millones de dólares en ayuda militar y financiera que ha recibido Ucrania en un año, el exmiembro republicano de la Cámara de Representantes Charlie Dent, de Pensilvania, señaló que “la mayoría de los miembros del Partido Republicano siguen apoyando a Ucrania en su lucha contra la agresión rusa“.

No obstante, Dent recalcó que “el extremo más duro de la corriente Bannon-Carlson del movimiento MAGA en el Congreso simpatiza más con los argumentos rusos y tiene una visión aislacionista respecto a la política exterior estadounidense. Hay algunos miembros que están menos dispuestos a oponerse a los autócratas. También hay otros que encuentran una causa en común con la orientación socialmente conservadora que profesa Rusia”.

Esas voces son especialmente fuertes en el Freedom Caucus, que ejerce una influencia cada vez mayor sobre el presidente de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, quien indicó que no apoyará conceder un “cheque en blanco” a Ucrania y esta semana rechazó la invitación del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, de visitar Kiev

El miembro del Freedom Caucus Greene del estado de Georgia que asistió a la reciente conferencia CPAC dijo rotundamente: “Ya hicimos suficiente“.

A los demócratas les preocupa en especial la aceptación de la desinformación pro-Kremlin por parte de la derecha estadounidense.

El senador demócrata Chris Murphy arremetió contra los conservadores estadounidenses por repetir la propaganda del Kremlin y remontó las raíces de este fenómeno al expresidente Donald Trump, quien al comienzo de la invasión rusa elogió a Putin como “astuto” y “genio”. Murphy señaló que la “admiración de Trump por Putin” se “convirtió en una obsesión colectiva de la derecha”.

Murphy destacó que entre las personas obsesionadas con la derecha se encuentra Donald Trump Jr, a quien sigue en las redes sociales, y que “se burla implacablemente de Zelenski en internet”.

Mientras tanto, las palabras y la propaganda del propio Putin han variado últimamente, a medida que intentaba influir en la opinión de Estados Unidos y Occidente, y mitigar la disidencia rusa.

“Millones de personas en Occidente comprenden que las están conduciendo a una verdadera catástrofe espiritual”, arremetió Putin el mes pasado en un discurso extremadamente hiperbólico que se centró en “la destrucción de las familias” y temas afines.

Los expertos en Rusia advierten que la retórica de Putin y los mensajes del Kremlin sobre estos temas distan mucho de la realidad rusa.

“Uno de los errores más evidentes de los propagandistas de extrema derecha es considerar a Vladimir Putin como una especie de defensor del cristianismo, de los valores familiares y como protector de la raza blanca”, comentó Ariel Cohen, investigador principal del Eurasia Center del Atlantic Council. “Repiten los argumentos del Kremlin y se entusiasman con la ley rusa de ‘propaganda de la homosexualidad’. Nada podría estar más lejos de la realidad”.

Actualmente Rusia es líder en Europa de altos índices de divorcio, infecciones de VIH y baja asistencia y práctica de la Iglesia“.

El senador Murphy prevé que Putin cuente “con la derecha (estadounidense) para hacer avanzar la propaganda rusa y aprovechar nuestras divisiones internas”.

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