Invertebrados del 2024: saludemos a los héroes sin espinas de la Tierra
Presentación del invertebrado del año, llamada de la comunidad Composite: Guardian Design - Frank Hecker - Alamy / StellaNature - Alamy / Seaphotoart - Alamy / Dorling Kindersley Ltd. - Alamy / Science Photo Library - Alamy

Somos propensos a obsesionarnos con nosotros mismos y con animales como nosotros, pero la mayor parte de la vida en la Tierra no se nos parece en nada: son invertebrados. Apenas el 5% de todos los seres vivos conocidos son animales con columna vertebral. El resto, al menos 1.3 millones de especies y muchas más por descubrir, carece de espinas dorsales.

Saludemos a los invertebrados, animales de una diversidad asombrosa, nichos únicos y formas innovadoras e interesantes de ganarse la vida en este planeta. Entre ellos hay insectos (al menos 1 millón), arácnidos, caracoles, crustáceos, corales, medusas, esponjas y equinodermos.

Y, sin embargo, a pesar de su ventaja numérica, su originalidad y su deslumbrante carisma, los invertebrados se pasan por alto en favor de animales que se parecen más a nosotros mismos o, más exactamente, a un bebé humano: especies grandes, lentas, con dos conmovedores ojos; especies con las que podemos empatizar o antropomorfizar. Derrochamos dinero para salvar a un oso polar varado en un glaciar que se derrite o a un panda gigante aislado en un bosque fragmentado porque sentimos su dolor. Mientras tanto, ni siquiera estamos seguros de que los gusanos nematodos sientan dolor.

Una minúscula élite de invertebrados está en nuestro radar porque son visibles en nuestra vida cotidiana, por ejemplo, las mariposas almirantes rojas, las arañas domésticas gigantes o las abejas melíferas, pero la inmensa mayoría vive más allá de nuestro conocimiento, sin ser tocada por la aclamación humana o el estudio científico. Estos animales no necesitan nuestro aplauso, simplemente que los dejemos en paz. Por desgracia, el Antropoceno no deja en paz a ninguna especie; muchos seres vivos están siendo aniquilados sin que nos demos cuenta. La sexta gran extinción está en marcha y nosotros somos sus artífices.

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Debemos tomar medidas para desacelerar y detener esta crisis de extinción, entre otras cosas porque esta ola de extinciones acabará por engullir al Homo sapiens. Como advirtió el biólogo estadounidense E.O. Wilson en 1987: “La verdad es que nosotros necesitamos a los invertebrados, pero ellos no nos necesitan a nosotros”. Predijo que la humanidad no duraría más de unos meses sin invertebrados. Si acabamos con los polinizadores, oxigenadores, proveedores de alimentos, limpiadores y todas esas otras funciones no anunciadas que desempeñan los invertebrados y que nos aportan beneficios incalculables, no duraremos mucho en este mundo.

Sin embargo, a pesar de la caída en picado de la abundancia de insectos voladores en todo el mundo, la mayoría de los invertebrados son más resistentes que nosotros. Los insectos son millones de años anteriores a los dinosaurios. Han sobrevivido a las cinco extinciones masivas anteriores. Es más probable que acabemos con nosotros mismos antes que con todos los invertebrados, pero mientras estemos aquí tenemos la obligación moral de permitir que florezca junto a nosotros la mayor cantidad posible de vida en el planeta.

En Gran Bretaña, la crisis de extinción global se desarrolla en un microcosmos. Debido a su larga historia de ocupación humana, su temprana industrialización, su elevada población y su cultura al margen de la naturaleza, Gran Bretaña se ha convertido en uno de los países del planeta que más ha agotado la naturaleza. Aun así, junto a los míseros 107 mamíferos de tierra, mar y aire que aparecen regularmente por nuestro archipiélago, seguimos compartiendo nuestras tierras y mares con al menos 40 mil invertebrados. Los científicos de la conservación calculan que una de cada seis especies está en peligro de extinción en Gran Bretaña.

Esta semana lanzamos un concurso para celebrar la diversidad de la vida invertebrada en Gran Bretaña. Al mostrar el mundo salvaje de los invertebrados, sus innovadoras formas de ser y su importancia, esperamos concienciar sobre la pérdida de su abundancia y diversidad, y sobre lo que podemos hacer al respecto.

Hemos elegido una lista de 10 especies para el invertebrado británico del año 2024. Es desesperadamente insuficiente, por supuesto, porque gran parte de la vida son invertebrados. Hemos elegido una mezcla de invertebrados conocidos y otros más desconocidos de diversos filos y clases. Cada nominado cuenta la historia de un modo de vida extraordinario y de una forma de sobrevivir en el Antropoceno.

Algunos de los nominados transmiten un mensaje de esperanza y anuncian una advertencia. Algunos prosperan en una era de calentamiento global. (Nunca subestimes la capacidad de un animal pequeño para adaptarse a los extremos de nuestro mundo y al clima que estamos cambiando). Otros están en decadencia, y aquí están los embajadores y activistas no humanos, instándonos a cambiar y tomar medidas.

Si eres biólogo marino, entomólogo o naturalista aficionado, o incluso si no tienes muchos conocimientos sobre otras formas de vida, es casi seguro que detectarás omisiones flagrantes en nuestra lista. Así que propón tu invertebrado del año, explícanos tus razones y añadiremos uno de los mejores a la lista.

Quien gane será digno de ello. Esperemos que el gran ganador sea el maravilloso mundo de todos los invertebrados, ya que nos damos cuenta, prestamos atención y tomamos medidas para que puedan prosperar en nuestro planeta junto a nosotros.

Traducción: Ligia M. Oliver

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