A más dinero, más inmunidad
En su esperada carta anual, Bill y Melinda Gates se enfocaron ahora en la desigualdad que trajo la pandemia, en la enorme brecha entre los ricos con acceso a vacunas y los pobres con acceso a la letalidad del coronavirus
En su esperada carta anual, Bill y Melinda Gates se enfocaron ahora en la desigualdad que trajo la pandemia, en la enorme brecha entre los ricos con acceso a vacunas y los pobres con acceso a la letalidad del coronavirus
En su esperada carta anual, Bill y Melinda Gates se enfocaron ahora en la desigualdad que trajo la pandemia, en la enorme brecha entre los ricos con acceso a vacunas y los pobres con acceso a la letalidad del coronavirus.
¿Qué dejará la pandemia en el mundo? “La desigualdad en la inmunidad”, dijeron la pareja a cargo de la fundación privada dedicada a la salud más poderosa del mundo.
Cada mes de enero publican una carta con sus previsiones y preocupaciones para el año; y sin dudas esta fue una de las más esperadas después de la crisis sanitaria global que deja el Sars-Cov2 a su paso.
Este miércoles escribieron sobre esa enorme separación entre los países con capital necesario para comprar vacunas por encima del total de su población y garantizar la inoculación universal versus aquellas naciones donde gotearán apenas apoyos y dosis de la OMS o del mecanismo Covax.
Pero los virus no conocen ni de fronteras, ni de pasaportes, ni de primeros y terceros mundos: mientras haya grandes grupos sin estar vacunados será imposible contener la pandemia en el mediano plazo.
“Desde el comienzo de la pandemia, hemos instado a las naciones con mayor poder adquisitivo a recordar que el covid-19 en cualquier lugar es una amenaza para todos”, dijo Melinda Gates en la carta. “Hasta que las vacunas lleguen a todos, seguirán apareciendo nuevos grupos de enfermedades. Esos grupos crecerán y se extenderán. Las escuelas y oficinas cerrarán nuevamente. El ciclo de desigualdad continuará“.
La carta invita a la ‘unión global’, donde la meta sea salvar la mayor cantidad de vidas en 2021, no solo de un país o países en particular.
Y también invitó a las economías más ‘pudientes’ a invertir millones de dólares en el corto plazo en ciencia e investigación para prepararnos para la siguiente pandemia mundial.
Y también sugirió crear un “sistema de alerta global” para detectar brotes de enfermedades tan pronto como ocurran, así como invertir en capacitación de grupos de soporte de salud.
“Para evitar que las dificultades de este último año vuelvan a ocurrir, la preparación para una pandemia debe tomarse tan en serio como tomamos la amenaza de guerra“, escribió Bill Gates.
“Hace dos décadas, creamos una fundación enfocada en la salud global porque queríamos usar los retornos de Microsoft para mejorar tantas vidas como fuera posible. La salud es la piedra angular de cualquier sociedad próspera. Si su salud se ve comprometida, o si le preocupa contraer una enfermedad mortal, es difícil concentrarse en otra cosa. Mantenerse vivo y sano se convierte en su prioridad en detrimento necesario de todo lo demás”. En lo que va de la pandemia su fundación ha inyectado 1.750 mdd en investigación, productos médicos y medicinas para capotear el covid-19 de gente ya infectada.
Hay un punto interesante: ellos plantean que esta pandemia ha vuelto a poner un concepto que suena anticuado o poco internalizado como es “la salud global”, porque el Covid-19 vino a ponernos en la cara que la salud global se puede convertir en salud local muy rápido.
Hay una luz de esperanza en las vacunas y en nuevos tratamientos para ayudar a quienes se ha contagiado, y esperan que estas mejoras se conviertan en regreso a aulas, en regreso de empleos y en regreso de las mujeres a su vida antes de la pandemia, con menos carga en el hogar y más oportunidades de desarrollo.