Trump y su Gabinete: un viraje a la derecha radical

Internacionalista por el Tecnológico de Monterrey y Maestra en Historia y Política Internacional por el Graduate Institute of International and Development Studies (IHEID) en Ginebra, Suiza. Investigadora invitada en el Gender and Feminist Theory Research Group y en el CEDAR Center for Elections, Democracy, Accountability and Representation de la Universidad de Birmingham, en Reino Unido.

Miembro de la Red de Politólogas. X: @tzinr

Trump y su Gabinete: un viraje a la derecha radical Trump y su Gabinete: un viraje a la derecha radical
El vencedor de los comicios presidenciales en Estados Unidos, el republicano Donald Trump. EFE/CRISTOBAL HERRERA-ULASHKEVICH

Los recientes anuncios de los personajes que ocuparán posiciones clave en el gabinete de Donald Trump para su próximo mandato han generado una mezcla de sorpresa y preocupación. Los perfiles seleccionados no solo confirman un giro hacia la extrema derecha, sino que evidencian una clara alineación con el controvertido Proyecto 2025: una hoja de ruta que promueve el despido masivo de burócratas ‘liberales’ —percibidos como un obstáculo para poner en marcha cambios iliberales en el sistema estadounidense— y busca concentrar el poder en el ejecutivo, desmantelando pilares fundamentales de la democracia norteamericana, como la autonomía de las agencias federales y el principio de pluralismo político en la administración pública.

Marco Rubio como Secretario de Estado

El senador de Florida, Marco Rubio, encarna la política exterior más agresiva de Trump. Conocido por su retórica dura contra China e Irán y su apoyo incondicional a Israel, Rubio también ha dejado clara su oposición al apoyo militar a Ucrania, alineándose con el aislacionismo trumpista. Además, su enfoque en América Latina sugiere un intervencionismo dirigido a combatir gobiernos de izquierda en la región.

Pete Hegseth como Secretario de Defensa

El veterano y presentador de Fox News Pete Hegseth será probablemente el líder del Pentágono. Sin experiencia en altos cargos gubernamentales, Hegseth es un defensor acérrimo de la política “América Primero”. Sus prioridades podrían incluir una mayor militarización de la seguridad fronteriza y la retirada de compromisos estratégicos en el extranjero, debilitando alianzas como la OTAN.

Hegseth ha expresado opiniones controvertidas sobre la diversidad y la inclusión en las fuerzas armadas, argumentando que las iniciativas de “wokeness” han debilitado la eficacia militar de Estados Unidos*1. Además, ha sido crítico de la participación de mujeres en roles de combate, sugiriendo que tales políticas comprometen la preparación militar. Estas posturas han sido celebradas por sectores de la derecha, pero han alarmado a defensores de la igualdad y expertos en defensa.

Más preocupante aún son las recientes revelaciones sobre los tatuajes de Hegseth, que incluyen símbolos vinculados con grupos supremacistas blancos y neonazis*2. Aunque él mismo ha negado ser parte de estos movimientos, su afiliación simbólica refuerza las críticas sobre su alineación con sectores extremos. Las imágenes que han circulado al respecto, junto con sus declaraciones anteriores, han encendido alarmas tanto en el ámbito militar como en el internacional, donde aliados temen que su nombramiento profundice el desprendimiento de Estados Unidos de sus aliados tradicionales.

Matt Gaetz como Fiscal General

La nominación del congresista Matt Gaetz para liderar el Departamento de Justicia ha encendido las alarmas. Gaetz, investigado anteriormente por presuntos delitos, promete un endurecimiento de las leyes migratorias y un desmantelamiento de las investigaciones federales que considera “politizadas”. Su designación apunta a una politización profunda del sistema judicial en favor de los intereses de Trump.

Sarah Huckabee Sanders como Embajadora ante la ONU

La exsecretaria de prensa de Trump, Sarah Huckabee Sanders, ha sido nominada para ocupar el cargo de embajadora de EEUU ante las Naciones Unidas. Con poca experiencia diplomática, Huckabee Sanders ha sido una defensora vocal de las políticas aislacionistas de Trump y se espera que utilice su puesto para bloquear iniciativas multilaterales relacionadas con el cambio climático, los derechos humanos, el tema Israel-Palestina y la gobernanza global en general.

Mike Huckabee como Embajador en Israel

El exgobernador de Arkansas, Mike Huckabee, conocido por su postura religiosa y su apoyo absoluto a los asentamientos israelíes, liderará la embajada estadunidense en Israel. Su nombramiento refuerza la agenda proisraelí de Trump, especialmente respecto a temas sensibles como Jerusalén y los territorios palestinos ocupados, lo que podría buscar el afianzamiento de un nuevo status quo que favorezca al Estado Isarelí.

Elon Musk al frente de la eficiencia gubernamental

Trump ha publicitado su intención de confiar a Elon Musk y Vivek Ramaswamy la dirección del nuevo Departamento de Eficiencia Gubernamental, uno de los pilares del Proyecto 2025. Ambos han prometido recortar hasta dos mil millones de dólares del gasto público federal, aunque sin detallar qué áreas serán afectadas. Bajo su gestión, es probable que agencias federales enfrenten cierres masivos, lo que no solo impactaría la prestación de servicios esenciales, sino que también consolidaría un viraje ideológico: desmantelar una burocracia que Trump y su equipo perciben como un bastión de valores liberales. Este enfoque podría redefinir la administración pública estadounidense en favor de intereses corporativos y afines al trumpismo, pensando en extender su influencia más allá de la gestión de 4 años que iniciará en enero de 2025.

Un asalto al sistema educativo

Trump ha declarado abiertamente su intención de eliminar el Departamento de Educación Federal*3, transfiriendo su competencia a los estados. Este movimiento, argumenta, permitiría a los gobiernos locales diseñar sus propios currículos, alejándose de lo que él llama “una agenda progresista impuesta desde Washington”.

Entre las propuestas más controvertidas está la reinstauración del rezo matutino en las escuelas públicas, acompañado de un esfuerzo por desmantelar los programas de diversidad, equidad e inclusión. Estas medidas refuerzan la narrativa cultural conservadora del expresidente, marcando un retroceso significativo en los avances por construir espacios educativos más inclusivos.

La desaparición del Departamento de Educación no solo representaría un cambio administrativo, sino un giro ideológico profundo. En palabras de Trump, los estados deben ser libres de enseñar “valores tradicionales”, un enfoque que podría marginar aún más a comunidades históricamente vulnerables y suprimir la educación en temas que reflejan la diversidad de Estados Unidos como los estudios de género o estudios afroestadounidenses.

Este enfoque deja claro que Trump ve la educación como espacio clave en la batalla cultural que busca restaurar una visión conservadora de la sociedad estadounidense en contraposición a los progresismos sociales.

Reflexiones finales

Con estas nominaciones, Trump no solo busca poner en marcha su agenda, sino reconfigurar las bases del gobierno estadounidense. Una de las dinámicas más complejas de este gabinete será, sin duda, la convivencia entre los ultraconservadores más radicales y figuras neocon*4. (neoconservadoras). Este grupo, cuya influencia había disminuido tras las guerras en Irak y Afganistán, resurge ahora bajo una versión más pragmática y alineada con el populismo de derecha del expresidente.

Figuras como Marco Rubio, en el Departamento de Estado, encarnan este neoconservadurismo adaptado: confrontar a China y reforzar alianzas con Israel, mientras se desentienden de compromisos como el apoyo militar a Ucrania o las responsabilidades multilaterales. Esta mezcla de aislacionismo con intervencionismo “selectivo” redefine el neoconservadurismo en clave populista de derecha. La fusión entre el autoritarismo ultraconservador y las posturas de los neocons consolida el poder de Trump y ofrece un modelo político híbrido que podría remodelar el sistema estadounidense y su proyección internacional. La interrogante ahora es cómo reaccionarán las instituciones, los aliados internacionales, la llamada comunidad internacional y la sociedad civil estadounidense ante estos embates.

Referencias:

  1. Para conocer más: Srivastava, M., Miller, C., Rathbone, J. P., Sevastopulo, D., Fisher, L., & Schwartz, F. (2024, 13 noviembre). Pete Hegseth: US army veteran, Fox News firebrand and now defence secretary nominee. Financial Times. https://on.ft.com/3Cp7gkO
  2. Para saber más: Trump’s Pick to Lead U.S. Military Has Tattoos Linked to White Supremacists and Nazis. DemocracyNow! https://www.democracynow.org/2024/11/14/headlines/trumps_pick_to_lead_us_military_has_tattoos_linked_to_white_supremacists_and_nazis
  3. Para saber más: Meckler, L., & Timsit, A. (2024, 12 noviembre). Trump pledged to close the Education Department. What would that mean? The Washington Post. https://www.washingtonpost.com/education/2024/11/12/trump-close-education-department-proposal-explained/
  4. El término neocon se refiere a una corriente ideológica que combina el nacionalismo estadounidense con un enfoque intervencionista en política exterior, argumentando que Estados Unidos tiene la responsabilidad moral de “liderar” y “promover el reordenamiento” del mundo según sus valores. Durante la administración de George W. Bush, los neocons jugaron un papel clave en justificar la invasión de Irak y la promoción de la “guerra contra el terrorismo”. Aunque tradicionalmente vinculados al Partido Republicano, algunos neocons han encontrado cabida en el Partido Demócrata, especialmente en temas como la “defensa/promoción de la democracia global” y el intervencionismo militar, lo que refleja la adaptabilidad que exhiben para alinearse con los intereses del poder político de turno.

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