BlackRock amenaza con vender sus acciones en las firmas que más contaminen

BlackRock, la administradora de fondos de inversión más grande del mundo, amenazó con vender acciones en las compañías más contaminantes en un intento por respaldar el objetivo de cero emisiones de dióxido de carbono para 2050.

Larry Fink, director ejecutivo de BlackRock, dijo que le pedirán a las compañías en las que tienen acciones que revelen sus planes para alcanzar las cero emisiones. Este nuevo enfoque aparece en la carta anual de Fink para los CEOs de todo el mundo. BlackRock podría desligarse de las compañías contaminantes que actualmente administran (lo que representa casi una décima parte de sus activos) si no mejoran.

BlackRock ejerce una influencia significativa sobre las compañías, inversionistas y gobiernos por la amplia variedad de acciones, bonos y otros activos que controlan, con un valor de 8.7 billones de dólares a finales de diciembre. Su tamaño la convierte en una parte importante de las inversiones sustentables, aunque sólo 616 mil millones de dólares de sus activos, alrededor del 7%, se manejan con criterios ambientales, sociales o gubernamentales.

Fink dice que la pandemia de coronavirus aumentó el enfoque de los inversionistas sobre la crisis climática.

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“Creo que la pandemia presentó una gran crisis existencial (como un gran recordatorio de nuestra fragilidad), que nos impulsó a confrontar la amenaza global del cambio climático con más fortaleza ya considerar como, igual que la pandemia, alterará nuestras vidas”, escribió.

“Ningún problema está por encima del cambio climático en la lista de prioridades de nuestros clientes”.

BlackRock se ha enfrentado a la presión significativa de los activistas ambientales para mejorar sus acciones sobre el clima, debido a su papel como el más grande controlador de acciones y bonos en todo el mundo, incluyendo amplias participaciones en las compañías de combustibles fósiles.

La promesa para respaldar las cero emisiones para 2050 alinea a BlackRock con los compromisos de más de 100 países en todo el mundo, y con algunos de sus más grandes rivales que se comprometieron a no invertir en compañías contaminantes para 2050.

Otros inversionistas fueron aún más lejos. El lunes, la ciudad de Nueva York anunció que dos de sus fondos de pensión para empleados y maestros votaron para desligar sus participaciones con un valor de 4 mil millones de dólares de las compañías de combustibles fósiles.

“Los combustibles fósiles no solo son malos para nuestro planeta y las comunidades vulnerables, también son una mala inversión”, dijo el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio.

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Parte del compromiso de BlackRock significa que tomarán un papel mucho más fuerte en la negociación con las compañías donde tienen acciones, incluyendo al aumento en la disposición para votar contra las mesas directivas y en favor de las resoluciones climáticas y la “potencial salida” de compañías que no intenten mejorar. Enfocarán sus esfuerzos en 1,000 compañías (más que las 440 de 2020) que son responsables del 90% de las emisiones en el portafolio de BlackRock.

El año pasado, la administradora de activos se comprometió a desligarse de las compañías que obtuvieran más del 25% de sus ingresos del carbón térmico, pero la reciente decisión de amenazar con mayores desligues representa una señal más fuerte particularmente para los extractores de gas y petróleo que no tienen un plan para progresar hacia las cero emisiones.

No obstante, la compañía retendrá amplias participaciones en las compañías de combustibles fósiles por su papel de proporcionar fondos que que registren pasivamente los indicios de inversión, es decir alrededor del 90% de sus participaciones. Aún después de la promesa sobre el carbón térmico, BlackRock posee acciones estimadas en 85 mil millones de dólares en compañías productoras de carbón.

Los activistas ambientales le dieron la bienvenida a la decisión de BlackRock para desinvertir de los más rezagados en cuanto al clima. Sin embargo, Gaurav Madan, un veterano activista en Friends of the Earth, dijo que las acciones, incluyendo la promesa de las cero emisiones, “son muy poco, y llegan demasiado tarde”.

“Este no es el liderazgo visionario que necesitamos del más grande inversor en carbón, petróleo y gas, y productos relacionados con la deforestación”, dijo.

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BlackRock dice que su papel no es obligar a sus clientes a desligarse de los productores de combustibles fósiles, pero argumenta que le facilitan a sus clientes, como los fondos de pensiones y las fundaciones universitarias, elegir inversiones amigables con el medio ambiente en lugar de apoyar a los contaminadores. Estas incluyen nuevas medidas que demuestran puntajes “que se alinean con las temperaturas” para los fondos de igualdad, lo que añade los riesgos climáticos a sus procesos de inversión y ayuda a lanzar nuevos fondos alineados con el objetivo de las cero emisiones.