La fuerza contra Roemer me la dieron ellas y la educación artística: Itzel Schnaas

La fuerza para denunciar el acoso sexual de Andrés Roemer provino del contexto de apertura para hablar sobre el tema, de la educación artística, así como de las demás mujeres que decidieron alzar la voz, compartió la bailarina profesional Itzel Shanaas.

Hace unas semanas, la también directora de Fábrica Escena hizo público a través de un video que conoció a Roemer durante el Festival Ciudad de las Ideas en 2019, tras lo cual fue víctimas de agresiones sexuales por parte del conductor de TV Azteca.

A la fecha, hay 61 acusaciones por violencia de género contra el comunicador, según la organización Periodistas Unidas Mexicanas (PUM). Además, la Fiscalía de Investigación de Delitos Sexuales de la Ciudad de México ya abrió una carpeta de indagación contra el escritor.

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Durante una mesa de diálogo, Itzel Schnaas detalló que un motivante para denunciar a su agresor fue el espacio – tiempo que han abierto las mujeres para hablar sobre las violencias sexuales, aunque también abonó el respaldo que le dieron otras femeninas que también habían vivido una historia similar.

“La fuerza vinieron a dármela ellas, porque las declaraciones anónimas del mismo caso, las que corroboraba mi historia, las que no podía ni leer del dolor que me producían. Si no hubiera leído que le había ocurrido a alguien, probablemente hubiera descreído que a mí también me había ocurrido”, enfatizó la artista durante el Facebook Live en Cátedra Gloria Contreras UNAM.

Relató que a partir de ahí varias mujeres la contactaron y unieron fuerzas por ser víctimas de un mismo hombre: “era cosa de decir que iban a sumarse y así fue, salieron a gritar al mundo”.

Agregó que su fortaleza también provino de su educación artística, ya que los proceso creativos “te arrojan” porque no hay una receta para ello; algo similar pasó cuando formuló su acusación.

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“De eso se trataba la denuncia, de hacer una investigación que me llevara a conclusiones primero prácticas, después política, éticas y morales”, apuntó.

Aunado a ello, Itzel Schnaas invitó a cambiar y repensar los modelos pedagógicos que se aplican en el arte, ya que en las escuelas artísticas también se ejerce la violencia de género, la cual es normalizada y algunas veces no se identifica por parte de quienes la sufren.

“Mi intención no es ganarle a Andrés Roemer, tengo que entender, dejar ese ego en otro lado y mi única batalla contra él es para perderla y sumarle a las perdidas. Saber que avanzamos poquito. ¿para qué sirve la utopía?, para seguir caminando, ¿para que sirve la justicia?, para seguirla buscando”, remarcó.

Aceptó que no sabe cuál es la receta a seguir para denunciar un caso como este, pero insistió en que fue con el arrojo que le dió la danza y el respaldo de más mujeres la que la motivó a seguir adelante.

“La fuerza vinieron a dármela ellas, sólo era cosa de decir que iban a sumarse y salieron a gritar al mundo. Definitivamente yo soy porque están ustedes y porque estamos todas, y porque vivas nos queremos, no hay más”, concluyó Itzel Schnaas.

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