Ser mujer de la periferia y estar en paro en la UAM Lerma

Ser mujer universitaria en la periferia puede ser transportarte dos horas y media de ida, y dos y media de vuelta para llegar a la universidad. Caminar sobre ladrillos para llegar a la puerta de la escuela. Llegar y dibujar con la mirada una extensa reja de alambre que custodia el campus y que cualquiera podría brincar.

El Estado de México es la entidad en el país con mayor violencia en contra de las mujeres, el recordatorio de la situación lo tuvieron muy claro los estudiantes de la Universidad Autónoma Metropolitana unidad Lerma (UAM L) cuando en diciembre del 2022 encontraron el cuerpo de una alumna de en un lote baldío a unos metros de donde se encuentra su plantel.

“Estamos tan inseguras y tan expuestas en el exterior que no es posible que en el lugar donde, en teoría, deberíamos estar seguras, no lo estemos. No es posible que no solamente tengamos que enfrentarnos a lo de afuera, qué tan grave está la situación de violencia de género a nivel nacional que literalmente se nos metió hasta en las aulas de clases. Ni aquí dentro estamos seguras”, declara para La-Lista una de las universitarias de la UAM Lerma.

Su identidad ha sido resguardada por protección y revela: “Toca hacer algo, realmente este fue el último recurso que consideramos como comunidad estudiantil, no solamente como UAM Lerma, un paro fue el último recurso porque no hay resoluciones favorables para las víctimas. Todo el tiempo se les sigue revictimizando, todo el tiempo se les sigue vulnerando. Esto está muy grave”.

La unidad UAM Lerma se declaró en paro el 10 de marzo después de lo acontecido en el plantel Cuajimalpa con el caso de Karen ‘N’. “El caso de Karen escaló tanto, traspasó tanto y conmocionó tanto que no podemos mantener ajenas ante esta situación, no podemos hacer de cuenta que no pasó nada. Están pasando muchas cosas muy horribles de las que o nos defendemos o nos quedamos esperando a ver cuándo somos parte de otra cifra”, dice la estudiante con el rostro cubierto.

Los casos en UAM Lerma

La violencia de género no ha sido ajena en el plantel Lerma, las actuaciones de las autoridades dan cuenta de su falta de pericia ante las resoluciones.

La UAM Lerma cuenta con denuncias formales de un caso de acoso sexual y hostigamiento por parte de un estudiante que escaló del acoso a las amenazas de muerte e incluso de atentar contra la seguridad de la comunidad estudiantil con un tiroteo. Víctimas del agresor dejaron de asistir a la escuela por la situación de riesgo que presentaba su presencia.

En este caso, la resolución de la universidad fue suspenderlo dos trimestres, sin que eso represente una garantía de seguridad y protección a la integridad de toda la comunidad estudiantil.

Ante ello, el colectivo que sostiene el paro exige la destitución del Consejo Académico Divisional que integró la Comisión de faltas por la resolución, además de la destitución de la secretaria Alma Patricia de León Calderón por su omisión ante “un caso tan grave”.

Los tendederos organizados en la UAM Lerma dan cuenta de los nombres de acosadores sexuales dentro del plantel. Existe un nombre que en repetidas ocasiones protagoniza la denuncia. Las víctimas solicitan la no convivencia con el agresor. Pero ante ello, tampoco ha habido intervención y respuesta.

La denuncia no culmina con los estudiantes. En las aulas de la UAM Lerma también hay profesores que son nombrados como agresores. Octavio Monroy Vilchis se encuentra como parte del profesorado de la unidad, mientras enfrenta una demanda formal por acoso sexual en la UAEMex. Las estudiantes denuncian una ausencia de contrato, pero que se encuentra activo como docente en Lerma. “Nuestra postura es que nosotros no somos basurero de agresores”, externó el colectivo de mujeres estudiantes.

Monroy Vilchis no es el único, en la lista también es señalado el doctor Francisco Pérez, parte de la unidad de Ciencias Básicas Ingeniería, que aunque ya no pertenece al plantel, las alumnas señalan que lo han visto por las instalaciones. Francisco Pérez tuvo una denuncia por parte de una estudiantes, que fue “la que se animó en denunciar” y en palabras de una de las integrantes que sostiene el paro, “incomodaba hasta con el saludo”.

La postura de las alumnas organizadas de la UAM Lerma “es que no queremos ningún agresor, nos vamos a mantener firme en eso, no vamos a permitir estar conviviendo con agresores. No importa qué cargo tengan, no los vamos a dejar estar aquí”.

Aunque los señalamientos son puntuales, el estudiantado de la UAM Lerma no se ha salvado de los comentarios misóginos en el salón de clases. Ellas indican que algunos profesores “no tienen ninguna clase de filtro en la comunicación que tienen con las alumnas” y declaran: “no nos merecemos que se nos violente de esa manera en los salones de clase”.

Las alumnas se presentaron en más de una ocasión en la rectoría para leer al rector pliegos petitorios en atención a los casos de acoso sexual y violencia de género, pero no obtuvieron una respuesta.

Ante la omisión de las autoridades, las alumnas de la UAM Lerma enuncian: “No vamos a aceptar carpetazos, todos los casos que lleguen a la Comisión de faltas de cada división tienen que ser resueltos, tienen que ser atendidos bajo protocolos de atención estructurados con perspectiva de género”.

En este punto, las estudiantes en paro, mencionan que mujeres estudiantes han sido golpeadas dentro del plantel y que no se ha hecho nada porque en el reglamento “no dice que entre compañeros no nos podemos golpear y, pues, no pasa nada”.

A la no atención a la violencia contra las mujeres en Lerma, se suma otra situación: la Coordinación de Bienestar Universitario y Género se encuentra vacía, por lo que no existe instancia a la cual recurrir ante la violencia de género en la institución.

Entrega del pliego petitorio

Después de las 3 de la tarde del jueves 15 de marzo, las alumnas entregaron el pliego petitorio al rector de la unidad, Gabriel Soto Cortés y a la secretaria Alma Patricia de León Calderón. De manera puntual fueron expuestos los puntos y se solicitó para su entrega, una carta de no represalias a las alumnas que sostienen el paro.

El rector, de principio trató de avalarse con los comunicados emitidos por las vías de comunicación institucionales, sin embargo, las mujeres sostuvieron que si los documentos no eran entregados en físico, con los sellos y las firmas correspondientes, no entregarían el pliego.

El rector cedió en la petición y entregó los documentos signados.

El paro solidario que sostienen las unidades de la Universidad Autónoma Metropolitana se sostendrá hasta que todas las demandas hayan sido atendidas.

Para la colectiva que sostiene el paro en UAM Lerma esta es una lucha digna y pondrán las reglas y las condiciones de trabajo.