El futbol de Estados Unidos es una mentira
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El futbol de Estados Unidos es una mentira
La selección de Estados Unidos no ha podido clasificar a los últimos 3 Juegos Olímpicos. Foto: EFE

El futbol de Estados Unidos es una fantasía, un cuento de hadas que se ha contado para engañar a ingenuos.

Ese balompié ha sido incapaz de trascender en la cancha y su importancia es una mentira.
Ayer, la selección estadounidense consumó un nuevo fracaso ante Honduras (2-1) al quedar fuera de los Juegos Olímpicos de Tokio para dejar en evidencia su debilidad cuando sale a competir a nivel internacional.

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Elementos como Christian Pulisic, Serginño Dest, Giovanni Reyna, o Wenston McKennie, -quienes ni siquiera la Federación de Estados Unidos pudo negociar para que participaran en el clasificatorio a JO- tendrán que conformarse con ver la máxima justa deportiva de la humanidad desde una pantalla. La supuesta generación dorada de ese país seguirá esperando pruebas trascendentales.

Habrán defensores que justificarán el fracaso preolímpico de ayer a la ausencia de sus máximas figuras. Pero esos jugadores hasta el momento no son referentes a nivel mundial y tampoco se les ha visto en competencias de selecciones de alto calibre. Su calidad como defensores de la playera de su país sigue siendo parte de un cúmulo de promesas nada más.

En el discurso y el mundo de los billetes, EU manda, presume y dice que será relevante en el futuro próximo. Los años pasan y pasan pero nada. Se la vive en el ridículo como un fraude a quienes se han creído la historia de que algún día trascenderán. Todo es una falacia hasta el momento.

A nivel de selecciones nacionales, Estados Unidos no fue a los últimos tres Juegos Olímpicos ni al Mundial de Rusia 2018 y eso que se clasifica en Concacaf, una de las denominadas peores zonas futbolísticas del orbe. El añejo plan de coronarse campeón del planeta en el balompié en la pasada Copa del Mundo ni siquiera estuvo cerca de concretarse.

Cuando se repasan los clubes, lo mismo. La hegemonía del futbol mexicano se puede ver porque de las últimas ediciones de la Concahampions (ante Copa de Campeones de la Concacaf), los clubes tricolores se han quedado con todas las ediciones desde 2006. La MLS tendrá mucha fama, fichajes rimbombates, inversionistas como David Beckahm, pero sus vitrinas están vacías y llenas de telerañas. Un total de 0 títulos internacionales lo demuestran.

Mucho se habla de los calendarios, pero es precisamente el desdén lo que impide que la liga de Estados Unidos se empate con las competencias en el resto del mundo. La MLS no pretende competir en audiencia con la NFL, MLB o NBA, los deportes verdaderamente gustados en la denominada Unión Americana.

El futuro pinta un poco más halagador para el futbol estadounidense. Se dice que su siguiente generación hará historia y será capaz de competirle a las grandes potencia. Según las predicciones de las autoridades del balompié de aquel país, la mira está puesta en el Mundial de 2026. Habrá que ver si es cierto, porque el futbol de Estados Unidos cada vez vive más del cuento que de realidades.

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