¡Bienvenidos a la fiesta!
Zinemátika

Escribió por una década la columna Las 10 Básicas en el periódico Reforma, fue crítico de cine en el diario Mural por cinco años y también colaboró en Reflector, la publicación oficial del Festival Internacional de Cine en Guadalajara. Twitter: @zinematika

¡Bienvenidos a la fiesta!
El Festival de Cannes se realizará en julio. Foto: AFP

¡Y voilà, se hizo la sombra en el cine! Pronto, el famoso bulevar de La Croisette se llenará de estrellas, flashes y personas que seguirán con singular atención la llegada de esas luminarias que, fuera de la gran pantalla, se ven más o menos espectaculares.

La edición 74 del Festival de Cannes, que se celebrará del 6 al 17 de julio, es por sí misma una noticia, pero hacerlo después de un año en confinamiento, con las salas de cines de todo el mundo cerradas por la pandemia de Covid-19 y el panorama del cine reducido a lo que se podía consumir en casa, tiene aún mayor significado.

Desde antes de su primera edición, celebrada entre septiembre y octubre de 1947, el Festival
de Cannes tiene un carácter abiertamente político y con un mensaje inclusivo e incluyente. Nació como una contrapropuesta a la Bienal de Venecia, cuya Muestra de Cine se creó en 1932, pero pronto se convirtió en una plataforma para diseminar la propaganda fascista de Mussolini y, luego, para catapultar la maquinaria de cine nazi.

Lee también: La-Lista de las películas que compiten por la Palma de Oro de Cannes

Desde sus orígenes, Cannes ha gozado del apoyo de las más grandes industrias fílmicas. Las productoras estadounidenses, soviéticas, británicas, suecas y, desde luego, francesas, le dieron lustre a un festival que, a diferencia de muchos otros, ha logrado adaptarse de una o de otra manera a los dictados de los tiempos del cine, que son casi siempre los mismos que los de las inquietudes sociales de la gente.

Desde hace décadas, señalar que una película ha sido mostrada en Cannes, aunque no sea en la selección oficial o esté en una de esas categorías que entre los críticos solemos llamar “dedicadas a los buenos salvajes”, las cuales casi siempre están fuera de competencia, es una especie de sello de calidad.

Si bien es cierto que, con el paso del tiempo, las exigencias comerciales han hecho que el festival abra sus puertas a proyecciones más o menos rocambolescas –el estreno mundial de Los Indestructibles II, con Sylvester Stallone, se efectuó en el marco de este evento y este año se encuentra programada Rápidos y Furiosos 9, por ejemplo–, ese aire se sigue sintiendo en las proyecciones creadas con la finalidad de animar a la evolución artística, a la apropiación de ese universo de sueños al que le llamamos cinematógrafo.

Grandes cineastas como Wes Anderson, Paul Verhoeven, François Ozon, Asghar Farhadi, Nani Moretti y Mia Hasen-Love, entre otros, aprovecharán el encanto de la ciudad de la Costa Azul francesa para presentar sus nuevas producciones, las cuales competirán por llevarse la codiciada Palma de Oro.

Además de la ya casi obligada presencia mexicana en la sección Un Certain Regard, dedicada a las novísimas expresiones del cine, llaman poderosamente la atención Freda, ópera prima de la cineasta haitiana Gessica Geneus que aborda la pobreza de su país natal a través de los ojos de una mujer; Lamb, estreno del cineasta islandés Valdimar Johánsson con la actuación de Noomi Rapace, o el drama minero Unclenching the Fists, de la rusa Kira Kovalenko.

Por todo esto y por lo que representa, ¡qué bueno que ya llegó Cannes!

*José Arrieta colaboró durante 10 años con la columna “Las 10 Básicas”, en el periódico Reforma, fue crítico de cine en Mural por 5 años y, durante ese tiempo, escribió en “Reflector”, la publicación oficial del Festival Internacional de Cine en Guadalajara.

Síguenos en

Google News
Flipboard