¿Qué es la sombra?
Regresando al amor

Psicoterapeuta familiar sistémica, escritora, meditadora y activista por la equidad de genero. Su práctica está encaminada al reconocimiento de la herida emocional infantil para el desarrollo integral del adulto consciente. Instagram @rominalcantar

¿Qué es la sombra?
Foto: Pixabay

La sombra son todos aquellos aspectos de nosotros mismos que rechazamos, consciente o inconscientemente. 

Se trata de una parte que hemos repudiado por la educación recibida, o bien porque la tememos, o incluso porque no es socialmente aceptable. El caso es que esa parte de nosotros permanece oculta y enterrada en ocasiones en niveles muy profundos de nuestro interior.

La sombra en su mayor parte se compone de deseos reprimidos e impulsos inaceptables que hemos excluido de nuestra propia autoimagen, es decir, de cómo nos vemos a nosotros mismos. Estas motivaciones son percibidas como indeseables para nuestro “ideal” de lo que somos o, más bien, de lo que “creemos” que somos.

Para mantener oculta dicha parte, necesitamos emplear gran cantidad de energía: no queremos oírla y le tememos. Nos sentimos amenazados por su existencia y tratamos de ocultarla. Creemos que pone en peligro el ser amados por los demás y queremos que permanezca oculta a toda costa. Y cuanto más la empujamos hacia las profundidades, mayor es el riesgo de que, aprovechando la mínima ocasión, aparezca de forma abrupta y exagerada.

Sin embargo, cuando damos voz a nuestra sombra, cuando la reconocemos y aceptamos como una parte de nosotros mismos, cuando canalizamos de forma adecuada su expresión e interpretamos el mensaje que nos trae, de forma paulatina va perdiendo virulencia y se produce la integración. Es por ello que el primer paso es reconocerla y acercarnos a ella, permitirla que se exprese. Dejar de luchar por ocultarla.

A nivel individual, se trata de los aspectos negativos de la personalidad, la suma de todas aquellas cualidades desagradables que desearíamos ocultar y las funciones insuficientemente desarrolladas. A nivel colectivo, abarca desde el conjunto de valores morales y sociales hasta la sombra familiar, incluyendo la propia sombra de nuestros padres.

Sin embargo, la sombra no constituye la totalidad de nuestra personalidad inconsciente, sino que tan solo representa aquellos atributos o cualidades desconocidos o poco conocidos del ego, aspectos que pertenecen, en su mayoría, a la esfera personal y que también podrían ser conscientes.

¿Dónde podemos identificar a la sombra?

  • En las proyecciones.
  • Detrás de aquello que nos avergüenza.
  • En nuestras adicciones.
  • Detrás de los síntomas físicos.
  • En nuestros sueños.

Observa en qué medida puedes identificar parte de tu sombra en estas situaciones:

  • En los sentimientos exagerados respecto a los demás.
  • En el feedback negativo de quienes nos sirven de espejo.
  • En aquellas relaciones en las que provocamos de forma continua el mismo efecto perturbador sobre diferentes personas.
  • En las acciones impulsivas o inadvertidas.
  • En aquellas situaciones en las que nos sentimos humillados.
  • En los enfados desproporcionados por los errores cometidos por los demás.

Aspectos para gestionar la sombra:

  1. Dejar de culpar a los demás.
  2. Asumir nuestra responsabilidad.
  3. Es un camino para ir paso a paso, la paciencia y la confianza son indispensables.
  4. Renuncia a la perfección.
  5. Soltar la expectativa y abrazar la incertidumbre.

El proceso de identificación de la sombra sirve para liberar nuestra conducta de repeticiones no deseadas, equilibrar nuestros rechazos o fascinaciones, armonizar nuestro carácter y expandir nuestra tolerancia y capacidad de amar. 

Observe que la sombra solo resulta peligrosa cuando no le prestamos la debida atención.

¿Estás listx para reconocer tu sombra?

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