Reportero egresado de la UNAM, formó parte de los equipos de Forbes México y La-Lista. Con experiencia en cobertura de derechos humanos, cultura y perspectiva de género. Actualmente está al frente de la Revista Danzoneros. X: @arturoordaz_
Necesitamos organizarnos ya
Es necesaria la organización de periodistas, pero no como un sindicato u organización charril, sino como un movimiento que vele por la integridad de sus participantes, donde se escuche y discuta las necesidades de cada uno.
Es necesaria la organización de periodistas, pero no como un sindicato u organización charril, sino como un movimiento que vele por la integridad de sus participantes, donde se escuche y discuta las necesidades de cada uno.
El 15 de marzo fue asesinado el periodista Armando Linares, el octavo en tres meses. La cifra de muertes en 2022 no solo igualó a la de los dos años anteriores, está a dos números de alcanzar el año más violento en el rubro: en 2019 mataron a 10 profesionales de la comunicación.
Según cifras de Artículo 19, durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador se han matado a 32 periodistas, así como a 152 durante todo el siglo XXI. Sin embargo, en octubre del año pasado la Secretaría de Gobernación informó que de 2018 a 2021 se han registrado los homicidios de 47 comunicadores.
Además, la entidad dijo que estos crímenes se concentran en seis entidades: Sonora, Guerrero, Veracruz, Michoacán, Estado de México y Oaxaca. Aunado a ello, hay una impunidad del 89% en las investigaciones de estos casos.
El 25 de enero salió el gremio a las calles a clamar justicia ante el asesinato de Lourdes Maldonado. Los oradores afuera de la Secretaría de Gobernación y en diversos estados de la República pidieron unión y que las exigencias no se queden en el olvido. Tal vez ese es el reto más grande, lograr un consenso.
Es necesaria la organización de periodistas, pero no como un sindicato u organización charril, sino como un movimiento que vele por la integridad de sus participantes, donde se escuche y discuta las necesidades de cada uno. Esta tarea titánica podría comenzar en los estados, donde es más difícil hacer periodismo.
Diversos compañeros han señalado la poca eficacia del mecanismo de protección a periodistas, ¿pero cómo nos podemos cuidar entre nosotros? ¿Tenemos confianza entre nosotros?
La solidaridad de publicar un reportaje “peligroso” en varios medios de comunicación puede ser una herramienta de protección. Pero primero hay que comenzar a tejer alianzas con quienes hacen periodismo en los estados más violentos. No basta con un mitin o una marcha para exigir mejores condiciones de trabajo, necesitamos organizarnos ya. Es verdad que será un proceso lento y tedioso, pero como van las cosas, si nosotros no hacemos algo, nadie lo hará.
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