Covid sin fronteras: El impacto de la pandemia en 4 ciudades de Iberoamérica
Foto: Martín Sánchez/Unsplash.com

Por: Estudiantes de Maestría de la Universidad de la Comunicación*

La pandemia de Covid-19 nos ha planteado el desafío de seguir ejerciendo el periodismo en condiciones adversas. Por un momento dejamos el foco sobre las cifras incesantes de muertes y contagios, para conocer la experiencia de  protagonistas que viven la epidemia en 4 de los países con más casos. Así, nos adentramos en la historia de Miguel Apáez, en Girona, España; de Guadalupe Orrego, de Lima, Perú; David Cataldo, de Santiago de Chile y de un médico anónimo,  de Tijuana, México. Se trata de un trabajo desarrollado, y compartido a La-Lista, por estudiantes de la Universidad de la Comunicación.


MÉXICO

“En Tijuana el COVID-19 ha sido devastador”

Covid sin fronteras: El impacto de la pandemia en 4 ciudades de Iberoamérica - AnónimoMédicoTijuana

El médico de rehabilitación física se alarmó cuando empezó a llegar gente de Estados Unidos a Tijuana a abastecerse de productos en la primera oleada del virus de Covid-19, ya que cerraron las tiendas en California. 

“Porque mucha gente que venía de Estados Unidos cruzaba hacia Tijuana, los almacenes del otro lado ya habían quedado vacíos y aquí aun teníamos suficientes víveres, ellos hicieron compras de pánico y dejaron todo vacío. En las farmacias hacían filas porque no contaban con una institución médica que los atendiera, ahí me di cuenta de que es una situación que está fuera de control”.

Agrega que nueve meses después, la pandemia de Covid-19 sigue presente en la frontera  y los estadounidenses siguen entrando a México sin restricciones, mientras que los mexicanos no pueden entrar a Estados Unidos.

“Aquí en Tijuana el Covid-19 ha sido devastador, fatal porque la población no está preparada para ese tipo de situación (…) Aquí empezó la cuarentena cuando ya estaba lo del virus, lo del Covid demasiado fuerte (…) se debió iniciar desde antes que pegará el virus. O sea, cerrar fronteras. Ahorita tenemos el caso de que ciudadanos y residentes de Estados Unidos sí pueden ingresar a la ciudad de Tijuana, pero uno que tiene visa no te dejan pasar, que por órdenes de Donald Trump (…) Al gobierno se le hace muy fácil dejar ingresar gente, según ellos traen recursos, pero vienen a dejar el virus, ellos están más propensos al virus y está comprobado”.

¿Cuentan con los insumos y equipo necesarios para el tratamiento del Covid?

“No, de hecho, el único lugar donde se estaba atendiendo el Covid era en el Hospital General de Tijuana, pero hacían falta muchos insumos. Llegaba gente con Covid, se escuchaban casos y los internaban y pues, la gente decía que no había material, no había insumos. Dejaban entrar a la gente con el Covid, y dicen que les estaban inyectando hasta otra cosa y ahí mismo luego luego los embolsaban. Unos casos que llegaron a salir del hospital con la bata que les ponen y se echaban a correr, así de dura estaba la situación aquí”.

En entrevista desde Tijuana, el médico dice que la economía entró en crisis, al no poder surtir los productos que se venden en los mercados locales, cerraron negocios y se registró desempleo.

 “Sí les está brindando ayuda, pero a las personas mayores, a las personas con discapacidad. En este caso a los que están bien, la única ayuda que habían brindado eran unas despensas, yo no les podría llamar despensas, estaban muy incompletas”.

¿Tu te has enfermado de Covid-19?

“Yo siento que a mí me pegó yo siento que fue el virus en febrero de 2020 yo me empecé a sentir muy muy mal al grado que le dije a mi esposa llámale a un conocido para que me lleve al hospital porque yo ya no puedo estar de pie. Fui al hospital y cuál fue mi sorpresa que estaba cerrada la clínica más cercana que me tocaba y tuve que acudir a un médico particular, me mandó antibióticos, inyecciones y con eso me ayudaron y me alivié”.

¿Cambiarías algo respecto de las políticas públicas de tu país en cómo afronta la pandemia?

“Pues sí, es necesario cambiar las reglas y sobre todo cerrar la frontera pareja para que no dejen ingresar más gente. También aumenta la inseguridad que se vive actualmente en Tijuana, desaparecen mucho las personas, sobre todo mujeres que ya no se encuentran. Ya es el pan de cada día ir por la calle y encontrarte bolsas negras con cuerpos desmembrados, esa es la triste realidad que vivimos”.

¿Qué te ha enseñado esta pandemia?

Nos ha dejado muchas cosas, buenas y malas como país no hay unión y si realmente nos importara deberíamos de ser más unidos y ayudar al que más lo necesite”.

El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom, pidió a México tomarse en serio el control de la pandemia de Covid-19, además advirtió que el país se encuentra en una situación grave.

“Cuando suben los casos y también las muertes es un problema muy serio y pediríamos a México que sea serio. Esperamos que todos los líderes den ejemplo”, expresó en conferencia de prensa en Ginebra, Suiza.


CHILE

“Yo nunca había vivido algo así, en definitiva, fue de mucha valentía porque fue un tema muy delicado que hasta la gente comía de la basura”.

Covid sin fronteras: El impacto de la pandemia en 4 ciudades de Iberoamérica - DavidCataldo

El 3 de marzo del 2020, Chile confirmó el primer caso dentro de sus fronteras; se trata de un hombre que había viajado al sureste asiático con su esposa, quien también resultó contagiada.

Al registrarse los primeros contagios de Covid-19, el gobierno estableció un estricto toque de queda, con un horario de 5:00 am a 8:00 pm, relata David Cataldo, supervisor de servicio a cliente de una empresa transnacional.

“Si eras detenido tenías que pagar multas muy altas, aproximadamente 2 millones de pesos chilenos (el equivalente a 53 mil pesos mexicanos)”.

Dice que la población se mostró respetuosa de las medidas de cuarentana y confinamiento.

Lo tomó bien, en realidad toda la gente acá se empezó a asustar y la gente es muy de tomar conciencia en ese aspecto. En Chile la sociedad es muy respetuosa con la policía, los militares, tenemos esa cultura que cuando se colocan estos puntos de referencia la gente es muy correcta”.

David Cataldo, narra su experiencia de vivir la pandemia y la cuarentena generada por el virus Sars-Cov2 en Chile.

La cuarentena en Chile empezó aproximadamente el 17 de marzo, a esa época nosotros teníamos como 600 casos, fue muy rápida la reproducción del virus acá y fue todo por la gente que venía desde el extranjero, ellos lo traían y como tuvieron contacto con sus familiares, esto se empezó a propagar muy rápido. El gobierno empezó a instruir que las personas trabajaran desde casa, pero como en todo el mundo existen algunos empleos que no se pueden llevar acabo así, debido a eso las personas comenzaron a perder su empleo. Chile hasta este momento sigue muy afectado en cuestiones de economía”.

¿Cuentan con los insumos y equipos necesarios para el tratamiento del Covid-19?

Al principio estábamos preparados, pero no lo suficiente para la cantidad de personas que llegaron a estar contagiadas, nunca excedimos, pero el gobierno siempre trató de que tuviéramos lo suficiente por si esto se desbordaba. Hubo hospitales y clínicas que muchas veces tuvieron que adaptar sus equipos de oxígeno para poder mantener con vida a las personas que estaban graves. El gobierno tomó medidas en traer desde China una cantidad muy grande de respiradores para poder tener los hospitales abastecidos con lo necesario, no tuvimos problemas de desabasto, pero sí estuvimos al borde de lo critico”.

David se considera una persona sociable, pero al verse encerrado en casa, tuvo que adaptar su estilo de vida al hogar. El estrés le causó problemas con su madre, con quien vive.

“Llegó el momento en que solo con hablarme me molestaba”.

Respecto al desarrollo de vacuna, dice que hay dos universidades locales que se encuentran haciendo pruebas; así como acuerdos para contar con vacunas internacionales como la elaborada por Pfizer.

¿Cómo has cubierto tus necesidades básicas teniendo en cuenta que no se puede salir?

“Ha sido súper complicado, fueron siete meses donde estuvimos encerrados. Si tú querías ir al doctor necesitabas guardar tus permisos para poder salir, no podía ir a la peluquería, para salir al mercado solo era una vez a la semana, la gente comenzó a consumir en granel, no había otra opción”.

La situación que más ha impactado a David es el desempleo de conocidos, amigos, familiares y el tener que pedir préstamos a los bancos para poder cubrir necesidades básicas. El gobierno en Chile ha ayudado a todas las personas sin importar clase social con el tema de canastas básicas para que la gente pudiera comer además de darles algún bono monetario.

“Yo nunca había vivido algo asi, en definitiva, fue de mucha valentía porque fue un tema muy delicado que hasta la gente comía de la basura”.

En Chile se registran más de 16 mil muertos y 623 mil contagiados por la pandemia de Covid-19.

El Fondo Monetario Internacional prevé una caída del 8.1% del PIB para los países de América Latina en el 2020, de acuerdo con su informe de la economía mundial, publicado en octubre pasado.

Entre los países más afectados por el decrecimiento económico están: México -9,0%, Chile -6,0%, y Perú -13,9%.


PERÚ

“En mi casa entró el Covid. Todos nos enfermamos sin saber quién lo trajo. Mi papá vivía con nosotros y falleció”.

Covid sin fronteras: El impacto de la pandemia en 4 ciudades de Iberoamérica - GuadalupeOrregoPerú

Guadalupe Orrego, periodista, no sabe cómo entró el virus del Covid a su casa de Lima, Perú, pero toda su familia enfermó. En pocas semanas su padre César Orrego, de 92 años, falleció.

 “Lo más difícil fue mi papá. Fue ver a una persona tan mayor irse así… Gracias a que mi papá era médico, él consiguió la clínica inmediatamente que contrajo el Covid, eso nos facilitó encontrar el traslado y el hospital. Gracias a eso fuimos privilegiados, ya que aquí (en Perú) es difícil acceder al tratamiento del Covid”

Ella presentó dolores de cabeza muy fuertes, mientras que su esposo Gustavo Guinand tuvo dolor de garganta, ronquera y cansancio excesivo. Las secuelas que le ha dejado el coronavirus le impiden conciliar el sueño.

“No puedo dormir. A raíz de que entró el Covid a la casa tengo que tomar pastillas para dormir ya que este virus repercute en tu salud mental, hace que en las noches te pongas a pensar como una máquina ya que tu cerebro empieza a trabajar de manera excesiva y aparte vivimos en una situación de estrés”.

Su hija Paloma de 22 años perdió el gusto y presentó cansancio, solo el menor Rodrigo, de 21 años, resultó asintomático.

Menciona que el primer caso que apareció en Perú se reportó el 6 de marzo del 2020, 10 días después del mismo mes iniciaron las restricciones de la cuarentena en su país. Únicamente podían salir a comprar víveres a farmacias, donde podía ingresar una persona por familia con los cuidados debidos como: el cubrebocas, uso de gel antibacterial; en ciertos lugares no permitían el uso del automóvil, excepto taxis.

“Si había movilidad pública, pero únicamente para lo necesario. Al comienzo si se respetó, al menos en un sector, es más, a las 8 de la noche la gente salía a los balcones a aplaudir a la policía y a los militares que estaban para que se mantuviera el orden. En algunos distritos de la ciudad no se respetaban porque en Perú tenemos un tema: no podemos seguir las indicaciones o normas. El peruano siempre trata de sacarle el otro lado a las reglas, por otro lado, hay gente que vive al día. El problema económico es muy fuerte. Otros no creían en el Covid”.

Acerca de los recursos sanitarios y el poco ingreso que perciben para sostener a las familias en Perú, Guadalupe explica que hay peruanos que se ha endeudado, aunque el gobierno ha pactado con las clínicas privadas para que el seguro social cubra parte de esas deudas.

“Ha sido un negocio donde la gente se ha aprovechado de una manera inhumana. No había nada, no encontrabas nada a la hora de ir a comprar desinfectantes. Por otro lado, decían “Lávate las manos con agua y con jabón”, pero el agua el Perú no es accesible a todos. Los pueblos jóvenes que están alrededor de las ciudades no tienen agua”.

Perú se encuentra dentro de los primeros 20 países con la tasa de mortalidad más alta por Covid-19. Cuando comenzó la cuarentena no contaba con los insumos de salud necesarios para atender a la población, solo se tenían disponibles 100 camas y pocos tanques de oxígeno, mientras que el número de habitantes supera los 32 millones.

En el caso de los apoyos monetarios, la entrega se complicó porque la mayoría de los habitantes no tienen una cuenta bancaria y para recibirla se tiene que acudir personalmente.

 “Para esas personas que ni siquiera pueden salir a trabajar y que no tienen agua es una situación complicada, donde el COVID ha servido para desnudar las deficiencias en nuestro país en cuestiones de salud”.

Si antes de la pandemia se sufría de trabajo, ahora en esta situación es más complicada, dice Guadalupe entrevistada desde Lima.

“Aun con el teletrabajo los practicantes no saben qué hacer, entonces se vuelve muy complicado. Muchas oficinas están trabajando online y en realidad están despidiendo gente”.    

La restricción de espacios, tiempo, dinero y salud la llevó a reflexionar del aprendizaje que vive durante este encierro y sobre su contagio.

“Me ha enseñado a valorar todo lo que tengo, a todos mis amigos y, sobre todo, valorar las relaciones humanas. Ya nos estábamos olvidando de eso, pensábamos en el dinero, en trabajar en algo que te reditúe más dinero, el carro y ahora las personas ya valoran los pequeños momentos”. 

En Perú se han registrado más de un millón de casos y más de 37 mil muertos por la pandemia de Covid-19.

Alrededor de12 mil voluntarios se ofrecieron para probar la nueva vacuna del laboratorio chino Sinopharm. Antes de inyectarse, deben someterse a un examen físico y aplicarse la prueba de Covid-19. Se les advierte que podrían sentir efectos secundarios como náuseas y fiebre.

Los ensayos se suspendieron a mediados de diciembre, porque uno de los voluntarios presentó debilidad muscular, que podría asociarse al síndrome de Guillain-Barré.


ESPAÑA

“Me entubaron y me indujeron el coma”.

Covid sin fronteras: El impacto de la pandemia en 4 ciudades de Iberoamérica - Miguel-Apáez

Miguel Apáez, mexicano avecindado en Girona, España, se contagió en la primera oleada de Covid-19, mientras trabajaba desde su casa. Primero presentó fiebre, después dificultades para respirar y falla en los pulmones. Le detectaron neumonía bilateral atípica, a causa del entonces nuevo y poderoso coronavirus. Los médicos decidieron inducirle un coma e intubarlo, para enfrentar la enfermedad.

“Los primeros días me quedé en casa. El sistema sanitario en España estaba colapsado y me mantenían monitoreado por teléfono cada dos días para saber cómo estaba. La fiebre no bajaba.  Después de cinco días con fiebre en casa, llamé al médico y les dije que no podía más”. Estuve hospitalizado una semana con la sensación de que yo iba mejorando, pero los indicadores decían lo contrario, sobre todo los marcadores biológicos indicaban que los médicos tenían que hacer algo, o me podía quedar en el camino”.

Al cuarto día de estar intubado, despertó de la inconciencia, para sorpresa de su esposa María y de los médicos que lo atendían. Quizá fue su excelente condición física como nadador aficionado de aguas abiertas, lo que ayudó a Miguel Apáez a recuperarse de la enfermedad en unos cuantos días.

El consultor en prevención de riesgos laborales dice que las autoridades previeron que la pandemia no tendría graves consecuencias en España.

“A principios de marzo del 2020 ya se estaba hablando del coronavirus, la información que se tenía ya era algo contradictoria y la idea que se tenía es que era una gripe un poco más fuerte pero que no pasaría nada, inclusive el director general de emergencias dijo que en España habría pocos casos. El tiempo no le dio la razón”.

Entrevistado desde su casa en Girona, donde vive el confinamiento por la segunda oleada de COVID-19. dice que no quedó ninguna secuela en sus pulmones, ni en el resto de sus órganos

¿La gente ha respetado la cuarentena?

“Pues hay de todo. En general en Europa la población es bastante obediente a diferencia de Latinoamérica, pero hay un porcentaje que no sigue las indicaciones”.

¿España cuenta con los insumos y equipos necesarios para el tratamiento del Covid?

“Al principio no. No sabían cuál era el tratamiento que tenían que aplicar, e incluso no hay los insumos básicos necesarios, sobre todo mascarillas y material de protección para el personal sanitario, porque la globalización ha permitido que gran parte de este tipo de equipo se fabrican en China. En España hay pocos fabricantes de esos”.

Dice que los adultos mayores han sido más afectados.

“El 80% de los fallecidos son mayores de 80 años. Europa es un continente de viejos, sobre todo la enfermedad se concentró en las residencias geriátricas y asilos. El otro porcentaje son los adultos mayores, con enfermedades previas típicas de la sociedad moderna: colesterol, hipertensión, diabetes”.

Opina que el uso del cubrebocas será generalizado en España y en Europa.

“La mascarilla llegó para quedarse porque está mostrando que es muy eficaz, no solo para el coronavirus, sino para otras enfermedades. Ahora me lo pensaré dos veces antes de entrar a un lugar con muchas personas. Cambiarán los hábitos de higiene como el lavado de manos constantemente”.

Las consecuencias en la economía española serán más profundas.

“Ahora mismo España es el más perjudicado por la pandemia, el país que está padeciendo más económicamente. Puede dejar una huella muy fuerte, dejando una deuda al estado muy grande y tenemos el riesgo de perder posición en el nivel mundial, ya que hay otros países que no le dan importancia a la vida y que quieren ‘seguir adelantecomo Brasil y México”.

Después de sobrevivir a una forma grave de la epidemia de Covid-19, Miguel Apáez tiene claro su aprendizaje:

“Lo frágiles que somos y lo fácil que es perder todo lo que tienen, inclusive la vida en un momento. Es un pensamiento que debemos de tener siempre, no dejemos nada para más adelante, sino que intentemos siempre hacer todo lo que podamos porque la vida es muy frágil”.

España suma cerca de dos millones de casos y más de 51 mil muertos, debido al coronavirus.


*Covid sin fronteras es un trabajo coordinado por estudiantes de la Maestría en Periodismo y sus Nuevas Tecnologías de la Universidad de la Comunicación bajo la dirección del profesor Guillermo López Portillo.
Participaron: Bibiana Ávalos, Diana Dorantes, Eduardo Pérez  y Mariano León.
Diseño: Universidad de la Comunicación/Video: Roberto Díaz

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