La violencia y misoginia son exhibidas en obras de arte y diseño en Zona Maco

En el extremo de Zona Maco se ubica un conjunto de galerías donde un tapete de frases incluye citas como: “A proper wife should be as obedient as a slave” (Una esposa adecuada debería ser tan obediente como un esclavo) Aristóteles.

Rofa Projects, de Maryland; Quetzalli, de Oaxaca; y Pabellón 4 Arte Contemporáneo, de Argentina, presentan a seis artistas cuyas inquietudes son la vindicación de los derechos de las personas y mostrar la misoginia que hay en el mundo desde hace siglos mostrando frases de filósofos como Aristóteles o de escritores como Honoré de Balzac.

Con un concepto curatorial a detalle, el conjunto de galerías ofrece en cada pieza una exposición para representar la violación a los derechos humanos y la violencia de género.

Gabriela Rosso, Ceo de la galería estadounidense, habló con La-Lista acerca de cómo se dio la unión de estos espacios bajo el nombre de Artfocus Latinoamérica. Además de mostrar la violencia de género, otra de las propuestas es dar presencia al trabajo y talento artístico que hay en la región de habla hispana y Brasil.

Al exterior de este espacio en Zona Maco está una urna tricolor en memoria de los derechos humanos de los mexicanos, pero dentro del montaje la bienvenida la dan unos tapetes con frases de pensadores como Nietzsche, Kant y Rousseau que muestran el machismo que históricamente está en el pensamiento de la sociedad.

El origen de Rofa Project, el papel de las artistas mujeres, la necesidad de compartir el trabajo de los creadores latinoamericanos y los próximos proyectos de la galería forman parte de los temas en el marco de la semana del arte en México.

La-Lista (L-L): ¿Por qué decidieron que el concepto de sus galerías en Zona Maco girara en torno a la violencia de género?

Gabriela Rosso (GR): Vemos a la colonización como origen de la violencia estructural y de género. Por eso muchas piezas hablan de la discriminación contra la mujer. Por ejemplo, tienes unos tapetes con frases misóginas de grandes pensadores de la historia; obvio ponemos esto en contexto de que era otra época, pero hay nombres de personas que respetábamos como Aristóteles y Nietzsche.

Tienes ese caso o el de una obra en la que un artista muestra que el color negro representa la proporción de los hombres en museos, mientras en rojo se muestra el porcentaje ínfimo de mujeres.

Nuestra propuesta sí son derechos humanos en la mujer, pero también en general. Por eso pusimos la urna de Eugenio Merino que dice “In loving memory of human rights”, que contiene los derechos destrozados en México. Pero eso no es exclusivo, también pasa en toda Latinoamérica.

L-L: ¿Con la obra de los tapetes busca mostrarse que el machismo de nuestros días se toma como filosofía?

Sí, que la gente reflexione, reaccione y abra un poco su mente. Que vea que estos grandes pensadores eran sumamente misóginos. Es algo que tiene historia y venimos lidiando con esto toda la vida. Ya es momento de pararlo definitivamente.

L-L: ¿Cómo surgió Rofa Projects?

Gabriela Rosso (GR): Cuando me mudé a Estados Unidos hace unos nueve años, decidí ir con todo mi bagaje de los países en que viví y donde reuní a varios artistas. Ya en EU dije: “Nuestra propuesta tiene que ser América Latina“. Somos la única galería en Maryland, Virginia y Washington que trabaja puro América Latina y España. Es todo un statement decir que una mujer inmigrante, latinoamericana, trabaja con América Latina.

Trabaja mucho en Estados Unidos el tema de la violencia contra la mujer. Incluso una parte de nuestra galería está dedicada exclusivamente a ecofeminismo transversal intersectorial.

L-L: ¿Cómo surgió la alianza para que tres galerías abordaran la violencia de género en Zona Maco?

GR: Cuando veníamos para acá, como soy amiga de galería Quetzalli, de Oaxaca, le dije: “Mira, esta es la propuesta que quiero presentar. Vamos a unirnos para tener un boom más grande”.

Es como una exposición porque hay muchas galerías que muestran las obras de sus artistas, pero solo las cuelgan. En este caso hicimos una curación, una cosa más museística. Hay una historia que contar y hay una interrelación entre todos los artistas.

Por ejemplo, Natalia Revilla es una artista peruana que trabaja con plantas endémicas. El patriarcado destruye el ambiente, pero ella y su familia trabajan conservando estas especies en vías de extinción. Es un proyecto poético y son las mujeres de la familia quienes usan las plantas para curar, pero también buscan preservarlas.

Para la selección de obras primero escogimos el tema, lo que quieres transmitir. Con base en eso eliges los artistas que requieres para llenar esa propuesta.

L-L: Retomando la obra sobre la representación de hombres y mujeres en los museos, ¿ustedes trabajan algunos proyectos con las Guerrilla Girls?

GR: No inmediatamente, pero vamos a tener un proyecto a futuro donde ellas estarán incluidas. Además trabajamos con artistas mexicanas que son pioneras del movimiento feminista en el país. Es un grupo que se llama Mutua y que está integrado por Mónica Mayer, Lorena Wolffer y Cerrucha, entre otras.

En marzo vamos a tener una exposición donde Lorena Wolffer sea la curadora de la exposición allá en Estados Unidos.

L-L: ¿Del total de las obras expuestas en Zona Maco, cuántas corresponden a artistas mujeres?

GR: Tenemos a Priscilla Monge, Natalia Revilla y Amor Muñoz. Tenemos seis artistas en total: tres hombres y tres mujeres.

Aparte tengo un convenio en Estados Unidos con la George Mason University. En este momento tengo allí una exposición sobre violencia contra la mujer. Y de 15 artistas en total, 13 son mujeres. Es una propuesta súper contundente.

También abrimos recientemente la galería de George Mason. Es un espacio nuevo y nos lo dieron para inaugurar. Es súper padre porque como te decía: Una mujer latina, llevando sus artistas latinas en una universidad de EU. Es un sueño dorado.

L-L: ¿Cuál fue el mayor reto que enfrentó en esta carrera?

GR: Creo que el trabajar con América Latina en el sentido de que hay mucho desconocimiento. Parte de nuestro trabajo es hacer entender que Latinoamérica no es solo artesanía, sino es muchísimo más que eso.

Es una labor titánica de que la gente modifique su visión de lo que es el arte en América Latina y que hay arte conceptual y otro tipo de cosas con propuestas que van mucho más allá de la artesanía.

L-L: ¿En Estados Unidos cómo se vive la discriminación a las artistas por ser mujer?

GR: La discriminación hacia mujeres en los museos es en todo el mundo, no solo en nuestros países de este lado. Otra cosa que es cierto: en Estados Unidos no hay representación de latinas.

En Washington, por ejemplo, hay un espacio que se llama el Museo de la Mujer. De la cantidad de artistas que tienen, hay como seis y son los grandes nombres, como Graciela Iturbide y Frida Kahlo, pero no en lo contemporáneo.

Hay que hacer entender la cantidad de buenas artistas latinoamericanas contemporáneas que hay, son un montón que la gente desconoce. Es muy duro en EU, pero parte de nuestra labor es cambiarlo.

Nosotros colocamos piezas de nuestras artistas en el Banco Mundial o el Banco Interamericano para el Desarrollo y eso es importante, es uno de nuestros objetivos.

L-L: ¿Cuáles son los objetivos de Rofa Projects a corto plazo?

Hacer más convenios con universidades porque creemos que llegando a los jóvenes es que la mentalidad se va a poder cambiar. Tenemos este acuerdo con esta universidad en Washington, pero estamos empezando otro con una en California.