El infarto me ayudó a concentrarme más en la actuación: Bob Odenkirk

“OK, ¡vamos a trabajar!”. Así respondió Bob Odenkirk al volver en sí tras sufrir un infarto que le mantuvo el corazón detenido por largos momentos, derivó en una cirugía y cambió radicalmente su aproximación al personaje de Saul Goodman en Better call Saul.

En una reciente entrevista con el medio NPR, el actor señaló que este incidente de salud le ayudó a perfilar de una manera distinta a Saul Goodman, el famoso abogado que protagoniza el exitoso spin-off de Breaking bad.

“Hizo mucho más fácil estar en el momento, ver al mundo como si recién te despertaras y no recordaras nada. Mi mujer llegó después de un día sin dormir, tomando llamadas de la gente y tomando un jet privado que Sony amablemente envió a Nueva York. Entró en la habitación del hospital y yo aparezco, saliendo de cirugía esa mañana, diciéndole ‘¡vamos a trabajar!’”, señaló Odenkirk.

El contar con una persona experta en maniobras de recuperación y tener un desfibrilador a la mano fueron la clave para que el incidente sufrido por Odenkirk no tuviera un desenlace fatal.

“Fuimos muy afortunados de tener a Rosa Estrada cerca porque ella sabía cómo hacer las maniobras de reanimación adecuadamente, y tenía el desfibrilador en su carro solo porque se lo iba a regresar a alguien que se lo prestó. Fue una coincidencia muy loca que ella lo tuviera en el carro y supongo que intentó devolverlo, pero su amigo no estaba en casa”, detalló.

De acuerdo con el también guionista, su corazón no tuvo señales de actividad durante 18 minutos pero, a pesar de ello, no parece sufrir secuelas de gravedad. Sin embargo, eso le ayudó a enfocarse en la actuación.

“Esa energía que tomé me hizo más fácil concentrarme en el momento, lo cual es tu trabajo como actor. Ese es el juego raro que juega tu mente, estar en el momento de la vida de alguien más, pero realmente sentirte al límite de no saber qué más va a pasar.

“Fue más sencillo para mí hacer más cosas con este extraño y nuevo punto de vista sobre el mundo. Realmente quiero seguir en contacto con lo que pasó allí porque fue una gran reconexión con estar vivo. Me encanta reflexionarlo cada día e intentar reconectar”, concluye Odenkirk.