La contrarreforma energética de AMLO
Política consciente

Licenciada en Relaciones Internacionales. Consultora en imagen pública y estratega en comunicación. Actualmente produce y conduce el programa The White Table para MMoodtv. Cofundadora del colectivo TÚ x México. Twitter: @anapatam_mx

La contrarreforma energética de AMLO
AMLO y John Kerry en Palacio Nacional. Foto: Especial

Como resultado de la visita de John Kerry, enviado especial presidencial de Estados Unidos para el Clima, se pactó elevar el potencial para la generación de energías limpias entre ambos países. Como parte del acuerdo, se acordó crear un grupo de trabajo para energías limpias, orientado a promover las condiciones necesarias para contar con un mercado competitivo y eficiente.

El problema es que la contrarreforma planteada por el Ejecutivo federal persigue justamente lo opuesto, ya que busca darle el poder absoluto a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y quitárselo a todos los demás participantes, lo que significaría desaparecer a los competidores, incautarles su patrimonio y colocar a la comisión como único encargado de la distribución. Así es, con ella no solo se eliminaría la competencia en el sector energético, sino que se favorecería el uso de energías fósiles.

Todo indica que en esta ocasión para que sea exitosa la contrarreforma en los términos que fue planteada habría que replantearla, sobre todo en cuanto a sus alcances, a no ser que el gobierno mexicano decida incumplir los acuerdos bilaterales confirmados esta semana.

La visita de Kerry es otra señal clara y directa de lo que han venido anunciando durante meses: queremos una reforma que promueva energías limpias, competitivas y con acceso para todos.

Al final, lo que se decida pronto podría cambiar los planes de la Cuarta Transformación y… que no se apruebe la contrarreforma. La aceleración mundial hacia el uso de energías renovables resulta inminente y, sin embargo, en el peor de los escenarios es posible que el gobierno mexicano se aferre al deseo presidencial, provocando que México incumpla lo establecido en el T-MEC y Estados Unidos terminen ejerciendo presión y castiguen al país entero.

Los sueños y caprichos del emperador podrían tener implicaciones muy serias a futuro, más allá de la economía del país y el seno de todos los hogares mexicanos, con el legado de un lastre a futuras administraciones que enfrentarían extensas controversias internacionales por años.

Esperemos que la conciencia nos permita reconsiderar las iniciativas bilaterales de energía limpia.

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